La verdad

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Mojados y sucios llegaron los hombres Lupin, quienes habían salido hace apenas unas horas en busca de un médico que atendiera el parto de Tonks pero o estaban en San mungo atendiendo a más pacientes o no querían arriesgarse a salir.

Los últimos meses habían sido como un sueño para Teddy, dentro de la casa todo era perfecto incluso ver a Remus comer carne cruda era increíble. Se había reconciliado con éxito con su padre el cual volvió luego de un mes. Pero en ese momento nada marchaba bien con la batalla de Hogwarts que ocurriría en dos días y su nacimiento el cual nadie podía asistir.

Como si de un milagro se tratase llamaron a la puerta y en ella apareció Victoire sin una sola gota de agua y con su cabello en su lugar como si la tormenta que había fuera no le afectara. –Me pareció escuchar que necesitaban un medimago. – dijo la rubia con el acento francés un poco marcado. Y mientras Ted se quedaba petrificado y Remus llevaba a la joven a la habitación de Tonks, en lo único en lo que podía pensar Teddy era que incluso la imagen de Victoire en su casa también era parte del sueño.

Entro a la habitación y sin inmutarse ni un poco Victoire continuo preparando el parto de Tonks, mientras que Ted quería respuestas. – Pero ¿Por qué estás aquí?, ¿No se suponía que estabas estudiando?

–Ahora no. – murmuro la joven.

– ¿Y ahora se supone que eres medimago? ¿Cómo, desde cuándo? – continuo Ted.

Victoire sin dejar de mover sus instrumentos volteo a ver a Ted. – No es el momento, solo agradece que este aquí... amor, tienes que salir, luego te explico todo. – dijo con tono dulce y sin la frialdad que tenía a su llegada. Solo así Teddy la dejo hacer su trabajo.

Al cabo de horas Teddy de 1998 nació con la capacidad de transformarse al igual que Tonks, su madre. Fuera de peligro de ser un hombre lobo, Remus salió para darles la noticia a sus amigos de la ya disuelta orden de fénix.

Apenas si podía asimilar verse de bebé, había pensado en que desaparecería al encontrarse con su yo joven (más joven) pero no, todo continuaba en su lugar. No era el único que había pensado en esa posibilidad pues sabía que Vicky creía lo mismo.

Una vez fuera de la habitación llego el momento del rencuentro. –Felicidades, eres un bebé precioso. – dijo Victoire.

–Gracias... tú pensaste lo mismo que yo ¿no? – señalo Teddy. – También pensé que desaparecería, como sea, ¿Qué haces aquí, porque no me dijiste que vendrías?

Victoire se alzó de hombros. – No tuve tiempo, todo fue tan... rápido.

–Dos meses, no me hablaste por dos meses ¿y no tuviste ni un minuto para mandarme una carta? – reclamo Ted sintiéndose extraño porque no le gustaba pedirle explicaciones a nadie, pero también se sentía indignado por lo anterior. – ¿Conociste a alguien?

Victoire pareció escandalizada con esa última pregunta. – ¡Como puedes pensar siquiera eso, no hay nadie Ted! Pero debería si vas a dudar de mí.


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–Lo siento, tenía que preguntar. – Se encogió de hombros y la invito a sentarse.

–Bueno... – se acomodó un mechón rubio detrás de la oreja y se semblante cambio, Ted se dio cuenta de que ese tiempo fuera del país la había hecho más madura y más hermosa – Lo que te contare es rarísimo pero es la verdad, el punto aquí es que no hemos sido los únicos viajantes del tiempo. Lo sé, es raro pero existieron al menos otros dos viajes.

Tomo aire y ante la mirada atónita de Teddy continuo. – Durante mi estancia en Francia me hice más cercana a Gabrielle, mi tía. Y fue ella quien me dijo que mientras Fleur estuvo participando en el torneo de los tres magos hubo unos visitantes extraños, menciono a Louis un joven pecoso que se hizo muy cercano a mi madre durante ese año... ¿te suena el nombre, cierto?

–Tu hermano, Louis. – dijo Ted mientras la rubia asentía.

–No solo él, investigue un poco más y Penélope Clearwater, secretaria del área administrativa de viajes internacionales.

– ¿Y ella es...? – dijo Ted.

–La ex novia de tío Percy, ellos salieron en 1992 y ella menciono a una niña de nombre Lucy... Exacto, nuestra prima, hermana de Molly. ¿Sabes lo que significa?

Teddy asintió lentamente, en sus ojos se veía el terror que significaba ese descubrimiento. –No solo nosotros viajamos en el tiempo, también los demás... pero a diferentes épocas...

– ¡Exacto! ¿Y algo ha cambiado? – pregunto Vicky con una ansiedad en sus ojos que daba miedo. – Nada, eso significa que ya regresaron.

–O que siguen atrapados. – contradijo Ted.

–Como sea, no cambiaron el pasado. Por lo tanto nosotros vamos a volver en algún momento, solo que no sé cuándo...

Ted se levantó de un salto y comenzó a caminar por todo el lugar. Si no se podía cambiar el pasado ¿Qué hacían ahí?, su única meta era evitar la muerte de sus padres y en ese momento sus esperanzas se caían a pedazos.

La rubia entendía lo que significaba. –Sé que es difícil, pero tal vez esto era para que tú convivieras con tus padres, fue una oportunidad única. – Se acercó a Teddy y lo abrazo por la espalda, sin embargo este se soltó y se puso frente a ella, cara a cara.

–Es una oportunidad para salvarlos, no los dejare ir Vic, no de nuevo. – dijo Ted.

Su novia negó. – Cariño, no creo que estés aquí para salvarlos...

– ¿¡Entonces para que carajos estoy aquí, para verlos morir!? – Exploto Ted – ¿¡Pretendes que me quede de brazos cruzados y vea como me vuelvo huérfano!? No pasara, te juro que no.

Se alejó de Victoire para ir a la habitación de su madre a pensar en cómo evitar que sus padres fueran a Hogwarts a pelear dentro de 48 horas.

Viviendo La Historia de Nuestros PadresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora