Viviendo La Historia de Nuestros Padres

Obliviate

EL amor es como la magia, las parejas más improbables están atados por muchos medios, puede ser un amigo o quizás un troll, cual sea tú caso te pido que en el momento en que encuentres el amor pelea por él, con varita o con las manos…pero hazlo... –Hermione Jean Granger.

En la noche de san Valentín Hermione había dado un paseo a la torre de astronomía, no quería estar encerrada en su habitación escuchando a Lavender hablar de su Ro-Ro.

-Mi Ro-ro es taaan lindo. – Hermione improviso la voz chillona de Lavander.

Alguien se rio detrás de ella, se dio media vuelta y delante de ella estaba el pelirrojo. Tenía una enorme sonrisa adornándole el rostro. – Casi te sale la voz de Lavander, pero te falto más chillona.

La castaña también se rio pero se detuvo. – No deberíamos hablar de tu novia, al menos no de esa forma.

-Exnovia, terminamos al regresar de vacaciones. – Le sonrió, con un brillo especial en los ojos – Una persona me hizo saber que estaba con la persona equivocada

-¿Así? ¿Con quién se supone deberías estar? – pregunto observándolo fijamente a los ojos.

Se acercó a Hermione sonriendo. –Con mi castaña.

-Hay muchas castañas en Hogwarts. – respondió.

Ron puso los ojos en blanco. – Me refiero a una insufrible sabelotodo. – No supo que decir, pero Ron continuo - ¡Tu Hermione! Tú eres mi insufrible sabelotodo

-¿Yo? Pero lo acabas de decir. – Lo miro de mala manera – “Insufrible”, Ronald no vas a llegar a ninguna parte con las chicas si dices cosas como “insufrible”

-¡Pero así somos tu y yo Hermione! – Le dijo un poco desesperado – No somos como Ted ni Victoire derramando miel, somos el tipo de pareja que pelan todo el tiempo.

-¿Eso somos? – pregunto.

-Si, la extraña pareja de libros que viven peleados, que se retan mutuamente. –Hermione lo miraba de una extraña manera así que se apuró para explicarle  - Tú me dices bobo insensible y te respondo insufrible sabelotodo, ¿entiendes? Es lo nuestro.

-¿Pelearnos? Pero ah, Ron… - el pelirrojo la detuvo poniendo un dedo en sus labios.

-¡Sh! ¿Me quieres? – Pregunto, antes de que respondiera corrigió – No me refiero a un cariño de amigos.

Espero ansioso la respuesta, había soñado con ello desde hace tiempo, más tiempo de lo que habría querido aceptar. Abrió la boca dejando escapar una nube de vapor. – Te quiero. – Sonrió Hermione empezando a sonrojarse – Y no como amigos.

Los dos se fundieron en un beso, cuando se separaron comenzaron a reír.  -¿Por qué tardamos tanto? – inquirió Ron.

-No lo sé pero que… – se sonrojo y lo soltó rápido – Que nos queremos.

-Y no como amigos. – a completo Ron. Y volvieron a reír. – Ya quiero contarle a Harry, para que él no se tarde en tener novia. – Se quedó pensando unos largos segundos – Creo que a Romilda le gusta Harry ¿sabes?

-Pero a Harry le gusta Ginny. – Tan pronto como lo digo Ron perdió el color en el rostro. – No debí decir eso, no debí de decir eso.

-¿Mi hermana?  - Pregunto para asegurarse. Y Hermione  se arrepintió pero ya era tarde – Mi pequeña hermanita… - su cara se enrojeció - ¡No dejare que Potter se acerque a mi hermanita!

-¡Cálmate Ronald! – Lo reprendió Hermione – Para empezar ya no es una niña pequeña y dos Harry es tu mejor amigo jamás lastimaría a tu hermana

Se quedó serio mirando el cielo que estaba detrás de Hermione. Soltó un largo suspiro y hablo. –Supongo que no podría lastimar a mi hermana, y es mejor opción el que Dean.

-Por favor, no le digas a Harry que te lo he dicho si no se enojaría. – Pidió Hermione.

-Está bien, no diré nada. – Prometió el pelirrojo y tomo a Hermione de la cintura – Tengo una duda, ya hemos dicho que nos queremos ¿Qué sigue?

-No se dímelo tú. – dijo Hermione coquetamente

-¡Venga Hermione! La inteligente eres tú, no yo. – Digo Ron algo… muy típico de él.

-¡Pues novios Ronald! – Le grito Hermione emocionada. Ron coincidió con su novia. Platicaron hasta la madrugada sobre como contarles a sus amigos, la búsqueda de Harry, Harry y Ginny, Ginny & Dean, Ron y Hermione.

El sol se asomaba por las colinas y la pareja seguía despierta. –Fue nuestro primer San Valentín junto. – comento Ron

Otra voz respondió por Hermione, una voz que los dejo helados. –Lamento decir que será el último. – Entre las sombras apareció Snape, los apunto con las varitas. Ambos jóvenes estaban indefensos, las varitas posaban lejos de su alcance.

Hermione se aclaró la garganta. – Lo sentimos profesor, no volverá a ocurrir nos retiraremos a nuestras habitaciones.

-No es tan fácil señorita Granger. – Respondió el profesor – No estoy aquí porque hayan incumplido una regla del colegio.

-¿Por qué esta aquí? – pregunto Ron, al mismo tiempo se levantaron.

-Están yendo contra el destino. – Snape empezaba a explicar, cada palabra los inquietaba – El director Dumbledore me mando para evitar que se haga formal su compromiso.

-¡Miente! –Grito Hermione, ella como Ron estaban confundidos – El director nunca haría eso, además ¿en qué le afecta?

-Afecta en todo, con el viaje en el tiempo se han alterado muchas cosas, por ejemplo esta noche el señor Ronald tuvo que haber ingerido unos chocolates envenenados y su amigo Potter lo salvaría. Pero no paso, han alterado el futuro y no sabemos qué consecuencias pueda tener. – Concluyo el profesor.

-Nosotros no tenemos nada que ver con Quien-usted-sabe, no podemos empeorar ni mejorar nada. – le dijo Ron, temblando de rabia.

-Quizás, pero están vehiculados directamente con Potter, ustedes son una influenza para el chico. – Continuo – Lo que le pase a ustedes, le pasa a él.

-¿Y qué piensa hacer? ¿Matarnos? – Hermione y Ron se tomaron de la mano

-No, borrar lo que ocurrió esta noche. – Apunto a Ron y conjuro - ¡Obliviate!  - Lo mismo hizo con la chica, los dos quedaron en transe los minutos suficientes para que el profesor se fuera.

Parpadearon un par de veces antes de hablar. -¿Qué hacemos aquí? –pregunto Ron.

-No sé, no recuerdo nada. – Hermione se tocó la frente. Miro a su alrededor y exclamo preocupada - ¡Tengo que prepararme para las clases!

-Y yo para el desayuno. – Los dos se fueron del lugar.

Como te dije al comenzar la historia, disfruta el amor que aunque sea el verdadero  o no, si dura una noche o toda la vida nunca sabemos cuándo nos ataque un OBLIVIATE.-Hermione Jean Granger

Mensaje de la escritora: Casi llegamos a las 1000 personas que leen la historia y de verdad lo agradezco mucho, he dicho llegamos porque ustedes forman parte especial, todo es gracias a ustedes que votan, comentan o solo por darle la oportunidad a mi novela. 

Me gustaria leerlos, sus criticas constructivas, ¡lo que sintieron al leer los capitulos!, es importante para mi. Y si les gustaria que contestara sus comentarios.

Nos seguimos leyendo