Epílogo

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El cielo es el límite y el infierno es el comienzo.

Muchos bellos años habían pasado ya desde que ella y Draco se habían convertido en marido y mujer.

Nueve meses después de haberse casado se convirtieron en padres de dos hermosos hijos, dos mellizos traviesos y rubios como su padre. Scorpius y Cygnus Malfoy eran la alegría de la casa Malfoy que correteaban por doquier y hacían travesuras con magia. Draco se había mudado con Hermione a su propia casa, no era tan grande como la Mansión pero era de gran tamaño para que sus hijos corrieran libres por los enormes jardines.

Hermione se encargaba de educarlos y decirles que la magia era hermosa pero no era un juego. Y qué también gracias a la magia había conocido a su padre.

Al principio todo fue difícil porque Hermione tuvo que decidir entre su trabajo y su familia.

Pero al nacer los mellizos decidió que quería estar con ellos así que renunció a su amado trabajo en el hospital.

Pasó un par de meses triste por ello pero Draco le dio como regalo de su aniversario de bodas un gran espacio en la casa para acomodar una clínica. Ya equipado y todo con los instrumentos que necesitaría. A Así que ella era dueña de su propia Clínica médica.

Narcissa y "Biby" la elfina doméstica ayudaban a Hermione a cuidar a los traviesos hermanos.

Luego del parto de los bebés que salió en todo el medio periodístico vino la máxima sorpresa y fue cuando Narcissa y Severus decidieron casarse.

Severus por fin superó la muerte de su amada Lily y una tarde le pidió a Narcissa que lo acompañara así que fueron hasta Godric Hollow.

Snape y Narcissa llegaron a la tumba de los Potter y ahí se despidió de ella definitivamente. Dejándole un hermoso ramo de flores blancas.

"Fuiste siempre la mujer que más amé en mi vida, luego de tu partida mi corazón quedó destrozado pero había un luz de esperanza y esa eran tus hijos Harry y Hermione a los que amé desde el primer momento que los vi, pero debía ser fuerte, frío e impenetrable para así poder mantenerlos a salvo. Ahora ya son todos unos adultos Lily, ella es tan hermosa como tú y Harry tiene tus ojos.
Vengo a despedirme, al fin mi corazón ha sido reparado"

Esas fueron las palabras que Severus le dedicó a Lily, Narcissa se limpiaba unas lágrimas y se aferraba al brazo de Severus.

Ella había superado también a Lucius y estaba siendo feliz. Había olvidado los años de maltrato e infidelidades de su ex esposo. Y se estaba dando la mejor oportunidad de su vida al casarse con el mejor pocionista de la historia de la magia.

La pedida de mano de Narcissa fue muy graciosa y emotiva, Draco y Hermione iban a  preparar una cena especial y habían ido de compras al mall ya para entonces los mellizos tenían seis meses de nacidos, lo gracioso es que como los vestían iguales a Draco se le olvidó Scorpius en la sillita del carrito del Mall creyendo que era al que al que llevaba y que a Cygnus lo llevaba Hermione en los brazos.

Cuando llegaron al automóvil, que Draco había comprado para la comodidad de los mellizos al transportarlos se dieron cuenta de que faltaba uno. Draco entendió que había dejado a Scor y llevaba a Cygnus cargado.

Draco recorrió asustado el Mall con la cara pálida por el susto. Lo encontró risa y risa con una de las cajeras que jugaba con él y un peluche de elefante.

Él se lo arrebato algo avergonzado y la señorita no podía aguantar la risa por haber olvidado al bebé en el carrito.

Cuando llegó Hermione con Cygnus en brazos comprendieron que había sido un mal entendido entre mellizos idénticos.

ENTRE EL CIELO Y EL INFIERNODonde viven las historias. Descúbrelo ahora