ENTRE EL CIELO Y EL INFIERNO

Capítulo VIII

Todo había quedado en silencio, ni una sola respiración se podía percibir, nadie se movía nadie decía nada.

Lo que Harry acababa de decir o más bien gritar más  hubiese parecido una broma para las cinco personas que estaban presentes ahí en ese momento.

Todos con la boca abierta, nadie se atrevía a decir algo.

Hermione miró a Harry y Harry la miró a ella y sonrió para sí mismo.

- Eso es una broma cierto?

Los presentes se enfocaron en la menor de los Weasley que miraba con incredulidad a Harry.

- Nos están tomando el pelo? Dijo ahora Ron, que tenía aún sangre en la camisa y la nariz.

Hermione fue la que se puso al apar de Harry y lo tomó de la mano.

- Lo que Harry dijo es cierto, somos hermanos, los señores Granger no son mi verdadera familia.

- Y piensas que vamos a creer eso?  Preguntó Ginny.

- Creanlo o no es la verdad, yo lo supe hasta hace un año, pero ella lo supo todo el tiempo, se acercó a mí en primer año para cuidarme, bajo las órdenes de Dumbledore, él  se lo pidió. 

- Y también pidió que lo mantuviera en secreto para bien de Harry y mío,  yo soy hermana de Harry, mis padres Lily y James Potter me tuvieron un año antes que a Harry, y pidieron a la orden llevarme lejos pues sabían que tiempos malos venderían, harían lo mismo con Harry pero ya no les dio tiempo. Repuso ella con la voz embargada de emociones encontradas.

Las caras de Theo, Blaise y de Draco estaban en blanco, en cambio Ron y Ginny seguían sin poder creerlo.

- Si no nos creen no me importa, tus padres lo saben Ron, todo el tiempo lo han sabido. Le dijo Hermione al pelirrojo.

- Por eso odio cuando la haces sufrir Ron, y no voy a permitir que lo sigas haciendo, fue una excelente decisión de ella haber terminado su compromiso. Le  Recriminó él pelinegro.

- Bueno, yo me voy. Dijo Draco entrando al restaurante, dándole una fugaz mirada a Hermione.

Ella hubiera querido hablarle para agradecerle lo que había hecho por ella, era una necesidad que le nacía del pecho,  pero lo haría después si es que podía.

Theo miró a Hermione y le indicó que la esperaba adentro. Blaise solo siguió a Draco sin decir media palabra.

Ron y Ginny se miraron, Ginny quiso acercarse a Harry pero este se alejó.

- Ginny vete y llévate a Ron, esta noche no estoy de humor para estar cerca de ustedes que tanto daño le han hecho a mi hermana. Dijo mirando duramente a la pelirroja.
Evitó mirar a Ron, pues estaba muy dolido con él, siempre había sido su amigo y no le perdonaría que le hubiese puesto una mano encima a Hermione.

Los dos pelirrojos no tuvieron más remedio que irse de la fiesta.

- Harry, gracias por defenderme otra vez. Dijo la castaña suspirando.

- Lo haré siempre hermanita. Respondió  él a la chica y la abrazó. - Estás bien? Le preguntó.

Ella asintió, tocándose el lado donde Ron le había golpeado, ya no tenía rojo pero le dolía un poco.

- Si Harry estoy bien, entremos no quiero arruinar la noche de nuestro amigo. Dijo jalando a Harry hacía adentro.

Cuando volvieron a subir pareció que nadie más se había percatado de lo que había pasado, eso fue un alivio para Hermione, no quería ser el centro de atención y menos la noche la de fiesta de compromiso de Neville.