Pasamos un día entero en París, recorrimos sus calles en busca de los demás campeones o de alguna pista de los lugares que nos fueron asignados, no tuvimos suerte para ninguna de las dos tareas.
-Mike podría resolver el acertijo - pensé en voz alta mientras miraba las nubes del cielo, con mi cabeza sobre las piernas de Caspian este tenía una gorra cubriendo su cara y dormitaba- el sabría a que lugar debemos ir - continúe, Mike había leído sobre el mundo humano, de todos los campeones el era el mejor informado sobre este lugar aún que siendo honesta él era el mejor informado sobre varios temas, tomé nota mental de iniciar a leer la larga lista de libros que me ha recomendado a lo largo de los año y aparte el deseo de que el estuviera en el lugar de Capsian, estaba segura de que Mike sabría como disfrutar de esta ciudad, me mostraría los lugares más lindos y me contaría su historia además no tendría esa constante incomodidad, con Capsian cada palabra que decía era cuidada me sentía caminar en un campo minado y si pisaba en falso explotaria otro "te amo". Pero el campeón de la casa Verde no estaba aquí y debía adaptarme suspiré y continúe buscando figuras en las nubes una en particular parecía un lobo aullando lo que trajo a mi mente a Vincent ¿Dónde estará él? ¿Estará aquí?
-tengo hambre - mencionó Caspian sacándome de mis pensamientos
-no tenemos dinero - le recordé
-Iris aún sigues subestimandome - dijo alzando una billetera
-¿de dónde la sacaste? ¿Cuando la robaste?
-es solo un prestamo esta ropa no valía lo de tu vestido, el vestido valía mucho más aún si estaba roto y nosotros necesitamos comer así que ¿Qué quieres comer? - me incorpore y lo mire con ojos acusadores un momento pero mi estómago gruñó dándole la razón
-sorprendeme - me limite a decir Capsian se paro y me ofreció la mano para que yo me levantará la acepte pero cuando estuve de pie no la soltó curiosamente parecía que nuestras manos encajaban a la perfección
Terminamos en un pintoresco restaurante y comimos crepas, iniciamos hablando sobre los posibles lugares donde debamos ir, hoy fuimos a tres jardines y tres puentes en ninguno había una rosa o un candado arcoíris, no se en que punto pasamos de hablar de posibles lugares a anécdotas de la infancia.
-y cuando Kendrick salió corriendo porque quemaste sus pantalones ¡fue épico! - declare entre risas
-ese hermano tuyo era un patán ¿aún lo es?
-tan patán como tu hermana es una diva
-Margherita tiene carácter y jamás le agaradaste
-no me digas - comente sarcástica
-Arthur solía decir que tu eras la niña más bonita del mundo lo que molestaba a Margherita
-tu hermana me odia desde los cinco conocía a Arthur hasta los once
-pero a él le gustas desde los cinco- dijo Caspian con una media sonrisa - a mi me gustabas desde entonces - dijo Caspian y ese ambiente de risa se esfumó, su mirada recayó en la mía y sentí que quemaba
-creo que deberíamos pedir la cuenta y seguir buscándo
-siempre vas a evitar el tema cierto ¿alguna vez querrás hablar de ello?
-te odie - dije con voz queda - por año te odie, eras mi mejor amigo, mi único amigo de verdad corrí contigo aprendí a usar una espada contigo, recorrí el reino a tu lado en cada momento de mi niñez tu estuviste ahí hasta que solo murmuraste una disculpa antes de romper mi brazo apropósito ¡tu me traicionaste! La segunda persona que mas me importaba me traicionó, ¿tienes idea de cómo me sentí? Estaba tan molesta pero también estaba triste ¡yo llore por ti! - grite logrando atraer la atención de los comensales - no puedo solo borrar eso de mi vida sin importar tu historia, no hablamos por años, nos conocíamos a la perfección pero es increíble la rapidez con la que una persona cambia tu ya no me conoces ni yo a ti, amas una ilusión, amas a un recuerdo esa persona ya cambió, se modificó ¡tu no me amas Caspian! - declare antes de salir del establecimiento, corrí lejos de ahí no se si perdí a Caspian en el trayecto o simplemente decidió no seguirme como fuera parecía que nuestra alianza se había terminado pero ese nudo en el estómago había desaparecido, lo que le dije a Capsian fueron palabras duras pero ciertas, si, él fue mi mejor amigo por años, me conocía muy bien y yo lo conocía a él pero yo construí muros alto tras lo que me hizo, yo cambie no se si para bien o para mal pero la niñita que correteaba con dagas y disparaba flechas por deporte no es la misma que se sentó a comer una crepa en París, no odio a Caspian y a pesar de mi renuencia de hacerlo lo disculpo pero no lo correspondo, no lo amo, no lo haré aún que puede que si lo halla hecho tiempo atrás cuando era demasiado pequeña para saber que era eso porque en Arcoíris es un sentimiento que escasea.
ESTÁS LEYENDO
Detrás De La Corona
FantasyUn amor fugaz -----> Cometa Real Una combinación mortal ----> Hielo Ardiente Una corona que ganar ---->El torneo de los colores Una herida que sanar ----> La hija de los colores Una despedida Historias no contadas de ¿Princesas? No lo creo (no e...