Decir que no necesitaba ayuda era una gran mentira, todas mis cosas estaban en Arcoiris al igual que mis contactos, todos ellos operaban dentro del reino de los colores por lo que estaba sola pero para mi fortuna yo no era la única a la que Reyna había exiliado.
-¿En que puedo ayudarte?- dijo una niña de aproximadamente diez años, tenia el cabello de un oscuro color rojo y unos bonitos ojos oscuros con los que me miraba detrás de la reja de protección de su casa
-estoy buscando a alguien y creo que vive aquí su nombre es Caspian ¿lo conoces? - la niña abrió los ojos de par en par parecía que quería decir algo pero se retracto en el ultimo minuto
-¿cual dijiste que era tu nombre? - interrogo la pequeña, yo sonreí no se lo había dicho chica lista
-Davina -respondí - ¿el vive aquí?
-un momento- dijo la niña - ¡Papá te buscan en la puerta!- grito la pequeña al interior de la casa luego se volteo a mirarme dándome una pequeña sonrisa informándome que Caspian saldría en un momento
-¿buscarme? cariño si es de nuevo la señora Rubí ya te dije que debes decir que no estoy en casa...- dijo un hombre alto con barba recortada y una inquietante cicatriz en su ojo derecho, no la tenia la ultima vez que lo vi pero eso fue hace mas de 10 años por lo que no es de extrañar que me mirara de arriba abajo mostrando una mirada confundida - cariño vuelve a dentro- dijo a la niña y esta se fue sin protestar
- dijo que se llamaba Davina- informo la niña antes de irse y pareció darle algo de claridad a Caspian
-¿enana? -me interrogo y yo suspire
-antes te dije que si me llamabas así iba a abrirte la garganta y aun puedo hacerlo - respondí pero salió mas como una vieja broma compartida que como una amenaza real y él sonrió ante eso
-me gustaría verte intentarlo- dijo entre risas - vaya ciertamente no esperaba verte por aquí, no he sabido nada de Arcoiris desde que deje a ese niño de Frío en el palacio en fin- dijo mirándome -¿Que te trae por aquí?
-digamos que ahora estamos en el mismo club
-¿el mismo club?- interrogó confundido
-el de los desterrados de Arcoiris- dije sin gracia y sus ojos se abrieron con sorpresa
-¿que? ¿ella te hecho? ¿porque?
-la hice enojar- admití
-admito que Reyna tiene su carácter pero no puede echarte solo por estar molesta ¿Qué hiciste?
-me encantaría hablar de eso pero si lo hago - dije mientras le mostraba la pulsera multicolor que colgaba de mi muñeca, soltó una maldición al reconocerla porque Capian sabia perfectamente que significaba esa pulsera
-¡por la flama! Davina que mierda - me limite a mantenerme parada y en silencio mientras el continua maldiciendo, lo entendía yo había maldecido mucho de camino aquí
Caspian me invitó a entrar a la casa y me presento con su familia la niña que abrió la puerta era la mayor y se presentó como Regina, la menor de cuatro años tenía el cabello castaño, un rostro regordete y su nombre era Aura, por último estaba su esposa Hestia una mujer bonita con el rostro lleno de pecas, piel besada por el sol y una frondosa cabellera color caoba, cada parte de ella gritaba que pertenecía a Calor.
Su familia fue amable y me dejaron quedarme con ellos "todo el tiempo que necesites " fueron las palabras exactas pero no tenía planeado quedarme mucho tiempo lo que le informe a Caspian esa misma noche cuando las niñas se durmieron
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Detrás De La Corona
FantasyUn amor fugaz -----> Cometa Real Una combinación mortal ----> Hielo Ardiente Una corona que ganar ---->El torneo de los colores Una herida que sanar ----> La hija de los colores Una despedida Historias no contadas de ¿Princesas? No lo creo (no e...