«Notice Me, Hyung» [Yoonseok]

| 36 |Pt.2|

Por esto no te quería cerca.

Pero definitivamente soy más débil de lo que pensé.

Cuerpo con cuerpo, nuevamente sobre las suaves y limpias sábanas de la cama, sus cuerpos en movimiento más ambas respiraciones a más no dar, el sudor comenzando a hacerse presente, unas manos deleitandose con lo que tocaba y otras enrredandose en la cabellera color rojo vino del contrario, caderas en constante contacto y fricción, las prendas superiores fueron removidas tan sólo tocar la suave superficie queriendo más contacto, más calidez, más caricias.

Vaya que era débil.

Ambas miradas conectadas, seriedad en sus rostros, ni una sola palabra era emitida por ninguno de los dos, tan sólo miradas y respiraciones, Hoseok aún no soltaba a Yoongi y este no daba movimiento alguno de querer apartarlo, era un juego constante de saber quien ganaría en dicha situación ¿qué tanto podría aguantar Hoseok su paciencia? ¿Qué tanto podría Yoongi sostenerle la mirada a Hoseok? Tan sólo fueron segundos, segundos en los cuales se podría haber sentido perfectamente como el mundo desaparecía de su alrededor, donde lo único que importaba eran sus labios danzantes, uno contra el otro, en un guerra por tomar el control, por ser el mejor, por demostrar el amor.

Manos en las caderas y nuca, sin querer separarse uno del otro, caminando con rapidez hacia la cama donde todo comenzó y dondo todo podría cambiar tan pronto como lo hubiese querido Yoongi, donde tan solo llegar y tocar las suaves sábanas de la superficie sus camisas fueron removidas con desespero y sus labios apenas y se despegaban una milésima de segundo, no querían alejarse, el tacto, sentir, todo lo malo que podría estar pasando con ambos chicos en ese momento tan solo era una real mierda comparado con lo que ambos sentían.

-Hy-hyung.-jadeo Hoseok sobre los labios del mayor.

Sin dar respuesta a lo que decía el menor Yoongi despegó sus labios de los de Hoseok y bajó hacia el cuello del menor besando, lamiendo, mordiendo, dejando marca. Degustando del sabor que el menor poseía, deseando extrañamente más, la sensación que el cuerpo del mayor estaba sintiendo en ese momento nunca lo había sentido, ese querer más contacto, querer más cerca el cuerpo del menor, desear besarlo hasta que ambos ya no dieran a más. Ese sentimiento que alguna vez en su juventud guardó en lo más profundo de su conciencia y al cual había enterrado y olvidado con el paso del tiempo, ahora florecia, ahora inundaba todo su ser, erizandole la piel, haciendo a su corazón latir de extraña felicidad.

Deseaba más, lo quería para él.

-Ah~! Hyu-hyung!.-gemia Hoseok con sus brazos alrededor del cuello de Yoongi con sus uñas comenzando a rasguñar la pálida espalda del mayor.

Yoongi deslizaba sus manos tan suave, dulce y tentadoramente por las piernas del menor las cuales aún seguian cubiertas por el pantalón y el cual deseaba quitar, exponer el cuerpo de Hoseok ante sus ojos, admirarlo a pesar de todas las imperfecciones que este poseía, eso comenzaba a ser pasado.