Guillermo Aristiguieta.
Las palabras de Rodolfo continuaban haciendo eco en mi cabeza, ¿Dios mío sería verdad que Estefanía y Adrián son hermanos? ¿Sería aquello posible o era una estrategia de Rodolfo para separar a su hijo de Estefanía? Seguí cabalgando por los límites de mi hacienda con la vista fija en dirección hacia la finca de los Álamos; no podía evitar quererla ¿Debía hacerme ilusiones? ¿Realmente me atrevería a soñar nuevamente con poseer su amor? Mis preguntas fueron respondidas, cuándo recordé la promesa que le había hecho a Adrián; pero si era cierto lo que me decía Rodolfo, entonces yo tenía que hablar seriamente con Adrián y no dudaría en decirle de frente que lucharía por el amor de Estefanía, de la misma manera que él me lo dijo a mí.
—Patrón —escuché la voz de mi capataz a mis espaldas. —Llegó una carta de su madre —me informó, extendiéndome la carta.
—Gracias —manifesté y me apresuré en bajarme del caballo y tomarla.
—¿Cómo está todo por el pueblo? Me han comentado que hay alboroto —le pregunté mientras abría el sobre.
—Bueno, a mencionar verdad, no hay nada nuevo, y el alboroto ya usted sabe por qué es; hay mucho movimiento en la finca que parece un castillo, la qué está sobre aquellas montañas.
—Si Juan, ya sé cuál finca es —le aclaré al ver como él me daba explicaciones. Yo sabía cuál era la hacienda "El Renacer", cuyo dueño era el conde Dómine desde épocas inmemoriales, pero que, según las historias, se marchó y nunca más volvió. Los que velaban por el bienestar de aquellas tierras eran simples encargados.
—Escuche decir en la pulpería, que el que viene es uno de sus descendientes —siguió contándome Juan.
—Espero que ese aristócrata, traiga más trabajo y prosperidad a esta tierra, en vez de más esclavitud y dolor.
—Ah, bueno de que trae trabajo lo trae y buena paga también.
—¿De dónde sacas eso?
—Por lo que escuché patrón, me topé con unos amigos que me aseguraron que van a trabajar ahí y le han ofrecido una excelente paga.
—¿Y te contaron quién los contrató? —Mi curiosidad crecía.
—Ellos me mencionaron que el contrato los hacía el encargado de la hacienda porque el verdadero patrón aún no llegaba, pero pronto llegaría; por eso tanto movimiento con cargamentos y mudanzas. Patrón, la gente es tan habladora que aseguran que él es de sangre azul y que trae a sus propios empleados para que trabajen dentro del castillo; los que contrata solo tienen acceso a los sembradíos y a las cabañas.
—¿Cómo se llamará ese hombre? —pensé en voz alta—. Y que parentesco tendrá con el conde Dómine, de seguro él era su bisabuelo, porque de ese hombre lo único que debe de quedar es polvo, ya casi 180 años más o menos han pasado desde que supuestamente se marchó y esas historias me las narraba mi abuelo. Ellos siempre han sembrado café y además poseen viñedos. Incluso después de él marcharse, allí se continuó vendiendo café, aunque la producción bajó.
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Resurreccion: El Origen de Malena TERMINADO ✔ 1era parte (SAGA)
RandomEstefanía es una hermosa joven mestiza que se conforma con su vida sencilla y cómoda bajo la tutela de Ana Álamo, dueña de la productiva hacienda «Los Álamos». La llegada de Adrián Álamo (nieto de Ana) y del misterioso Arturo Palacios, Conde Dómine...