En cuanto termino el concierto tuvimos que correr a unas camionetas y subirnos a ellas lo más rápido que podíamos, todo por cuestión de seguridad.Nos llevaron al hotel y tuvimos que entrar por una puerta de acceso trasera, la entrada principal estaba obstruida por fanaticos y nos impedían el paso.
Dentro del hotel fue más sencillo llegar a nuestras habitaciones, un hombre grandulón y fortachón nos acompañó a Sofía y a mí hasta nuestras habitaciones mientras Glenda y los Chicos Maravilla se quedaron en el vestíbulo y hablaban sobre el concierto.
Por un momento pensé que Chris recibiría algún tipo de regaño por lo que estuvo a punto de hacer, pero después al ver sus hombros relajados y su postura desganada me relaje solo un poco, hasta que recordé lo que me esperaba ahora.
La cena.
Sofía me pidió que le explicara, y lo hice sin darle tanta importancia, pero de todas se emociono y fue ella quien me eligió la ropa para la cena. Un vestido azul marino, del cual de la cintura para abajo era suelto, con mangas cortas y la verdad me gustaba, elegí llevar mi chamarra de cuero negro y unas botas militares, tal vez llevaría un vestido puesto, pero tenía que llevar personalidad.
Mientras me vestía, rezaba porque al Chico Maravilla se le olvidara y estuviera demasiado cansado como para salir, pero mis experanzas se esfumaron cuando un par de golpes sonaron en la puerta.
-Yo abro- dijo Sofía saltando de la cama y corriendo hacia la puerta.
Solo pasaron unos segundos hasta que su voz llego a mis oídos.
-Hola ardillita- ya está aquí.
-Pasa- lo invito Sofía y yo tomé una gran bocanada de aire para después girarme.
Llevaba puesto unos jeans negros, botas, camisa gris y una chaqueta marrón, se veía cansado pero aún así sonreía.
-Te ves bien, Caramelito- su voz aterciopelada me acaricio la piel.
No entendía cómo es que su voz podía ser tan suave y la vez tan llena de... sensualidad.
-Gracias- murmuré.
-Cuando te arreglas definitivamente pareces otra persona- rodé los ojos y camine hacia la puerta.
Y volvíamos al mismo idiota de siempre.
-Acabemos de esto de una vez
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La cena fue en el restaurante del hotel, en una mesa alejada de todas las demás, poca luz iluminaba sobre nosotros, la mesa era pequeña, y había una vela en el centro de la mesa, dándole un toque más íntimo al lugar.
-En serio te ves hermosa- hablo cuando nos sentamos
-Tu tampoco estás tan mal- me maldije en cuanto dije eso, pero a él no pareció importarle pues solo sonrió ligeramente.
La cena transcurrió despacio, no hablábamos mucho y yo ni siquiera despegaba la vista de mi plato. Había pedido asado de carné acompañado de puré de papa con espárragos y zanahorias al vapor y mantequilla.
El empezó a reírse ligeramente desde su asiento y yo alce la vista para verlo confundida- ¿Qué?
-Siempre que te veo estas comiendo algo, algún dulce o chocolate y ahora ni siquiera me miras por estar tan concentrada en tu comida.
-Siempre tengo hambre- me encogí de hombros
-Ya veo, y está en definitiva a sido la peor cita que he tenido en mi vida.
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Amor a la Italiana (TERMINADA)
RomanceEl amor se presenta de muchas maneras, a veces de formas extrañas e incomprendibles, a veces por medio de la musica o la pintura o simplemente llega sin darte cuenta... Pero a veces y solo a veces no siempre es bienvenido, y causa dolor y tristeza. ...