Alma De Hielo Fuerza De Fuego [ Libro 1 ]

6 Un Nuevo Mundo

Skay

Flashback

Dolor... un gran dolor es sentir tu cara y tu cuerpo contra una superficie muy rugosa, dura y con piedras; ese es el dolor que sentí. Abrí mis ojos y efectivamente estaba en el suelo, pero ya no estaba en mi casa. Me puse de pie y me sacudí la arena de mis pantalones, y vi unas grandes puertas de... – ¿Cristal? ¿Puertas de cristal? – y grandes muros de donde emanaba humo de aire frío. Las puertas se abrieron, y comencé a caminar. Estaba en una especie de lugar para comercios, habían muchos locales y lugares con cosas bonitas y mostradores, luego ocurrió... Una flecha.

–Una flecha de... ¿hielo? – dije acercándome e inspeccionando, la flecha que se ha encajado en uno de los pilares de madera que sostienen los techos de los mostradores

De un momento para otro me vi corriendo, y flechas me perseguían, estas aparecían a través de la niebla de la noche y me rozaban casi alcanzándome. Luego una caballería apareció de los callejones y me rodearon, acorralandome contra un muro.

Supuse que eran soldados, traían armaduras y grandes espadas de cristal; uno de ellos se me hacía familiar. Él tenía la piel pálida, como yo, los ojos azules un poco más oscuros que los míos, y un semblante serio e intimidante; algo que si es diferente, es su cabello, no era blanco como el mío, era azul con destellos rubios; había algo mas, su rostro... es muy parecido a mí. Y pasó, que se dio cuenta que lo veía.

–¿Qué miras forastero? – dijo refiriéndose a mí con desprecio.

–¿Foras... qué? – en un segundo se bajó del caballo, desenfundó su espada y la apuntó a mi cuello.

–Wow... hermano, no hay necesidad de eso – dije tratando de tranquilizarlo, pero aparentemente a él no le gusto que abriera la boca.

–¡Cállate! No tienes derecho hablar y no soy tu hermano; así que dame una razón para no cortarte el cuello en este instante – dijo mientras me agarraba el cuello de la camisa y colocaba su espada junto a mi vena aorta.

–Chase... sabes que lo tenemos que llevar ante el rey – dijo otro chico, parecía más joven, pero tenía casi los mismos rasgos que el tal Chase que estaba amenazando de matarme. Pálido, ojos azules, él los tenía turquesa, cabello blanco con mechas amarillas, como yo, y el mismo rostro...

–Y tu sabes que cuando estoy trabajando, no debes de meterte, ¿verdad Luke? – el chico bajó la cabeza con vergüenza, me recordó a mí cuando Derek me molestaba.

–Pero debo de hacerte caso esta vez hermanito, ya que tengo curiosidad de saber de dónde salió este – Chase le hizo una señal a uno de los soldados, este bajó del caballo y sacó una especie de arma, se parecía mucho a un rifle, pero la boquilla de este era más grande y a los costados tenía unos especie de paneles.

–Sédalo – se dio media vuelta y volvió a montarse en el caballo.

El soldado me apuntó con el arma –No por favor – apretó el gatillo y una gran luz blanca me segó...

Fin del Flashback 

Recuerdan como las personas de las películas después de una noche de fiesta, despiertan al siguiente día sin saber ¿cuándo, cómo o dónde están?... pues, así estoy yo ahora. Desperté en un cuarto oscuro, bueno no tan oscuro, habían unas especies de linternas o velas que estaban alrededor de la habitación y un candelabro arriba que iluminaba muy poco, pero al menos podía ver. Moví la cabeza para ver en qué estado estaba; era una habitación muy grande y organizada, como una de esas habitaciones que tienen los príncipes y las princesas en las películas y cuentos de hadas.