Defensores: El Secreto Del Libro

Capítulo 60: Por La Última

—¿Que a sido todo eso que dijiste?. —Pregunta Confundida Fany

—Yo... —Alejandro trata de tranquilizarse.

—Por que no lo entiendo. —Continua su amiga. —Ahorita no quieres conseguir la dentia pero te recuerdo que tú fuiste el que me dijiste a mi que querías ser un héroe.

—Pero...

—Si todo esto es por tu arma, de una vez te digo que no nos importa, has demostrado ser funcional aún sin una. —Fany confiesa.

Alejandro frunce su ceño. —¿Mi arma?. —Suena indignado. —¿Por qué... ¡Por qué piensan eso!?. —Grita Alejandro. —Esto no tiene nada que ver con mi arma. —Aclara.

—¿Entonces?. —Fany cruza sus brazos.

—Tiene que ver con el musdux. —Dice finalmente el chico.

Fany ni siquiera sabe cómo reaccionar. —Tienes que ser más claro por qué no te estoy entendiendo nada.

Alejandro suspira. —Algo me dice que Teyaka no es el musdux.

—¿¡Que!?. —Fany está sorprendida por lo que dice el chico.

—Lo que escuchaste. —Alejandro baja la mirada.

Fany entrecierra los ojos. —¿Estás conciente de lo que estas diciendo?.

—Si... Por eso no quería decir nada.

—¿Y por qué aseguras eso?.

—El musdux, me había dicho que nunca dudará de mis capacidades, pero Teyaka me dijo algo diferente.

Fany alza los hombros. —¿Y ya?, Solo por eso lo dices.

—¡Obviamente no solo es eso!. —Alejandro alza los brazos pues no puede hacer entender a la chica. —¿Que me dices de los cambios de actitud?, Antes el musdux nos dejaba tener un horario y en cuanto se manifestó en su "forma física" ahora era cuando el quería.

Fany roda los ojos. —Nos lo explico Alejandro, andábamos muy atrasados y...

—¡Yo no caigo con esa estupida justificación!. —Deja en claro el chico. —¿Y que me dices del libro?, ¿Por qué no nos lo quiso prestar?.

—No estábamos preparados. —Fany recuerda lo que decía Teyaka. —Aparte, Ya se los presto a Luis, Magali y Angela.

Alejandro frunce el ceño. —¿Y como si yo lo tengo?.

Fany se queda callada.

—Cuando estábamos en los niveles, si nos golpeábamos o nos lastimábamos, no tenía repercusión alguna y... Cuando casi morimos en Petra, muchos no nos podíamos mover y teníamos grandes moretones en el cuerpo. —Alejandro niega con la cabeza. —Solo piensa en Teyaka como alguien distinto al musdux y verás como las cosas cobran mucho más sentido.

Fany lo piensa por un momento. —Tu solo te estás dejando llevar por tus pensamientos, ven, discúlpate con Teyaka y ayúdanos.

—No ayudaré a nadie hasta que esté seguro de si Teyaka es el musdux.

—¿Y que si estás equivocado?. —La chica cuestiona. —¿Que pasará si "te das cuenta" que Teyaka es el musdux?.

—Pediré perdón. —Asegura Alejandro. —Pierdo más si tengo la razón y no hago nada al respecto que si hago algo y estoy equivocado. —Finaliza Alejandro y voltea a ver a Fany. —Exito con la séptima dentia.

Alejandro se deja caer hacia atrás para poder despertarse de su sueño y desaparece.

Fany niega enfadada con la cabeza y decide ignorar lo que a echo el chico.

Tambien decide ignorar toda la duda que ahora ella tenía hacia Teyaka.

—Terminara pidiendo perdón. —Fany cruza el portal que sigue abierto y cuando observa el lugar donde está, no puede evitar sonreír.

—¿Que paso?. —Pregunta Jesus. —¿Dónde está Alejandro?.

Fany observa a Teyaka. —Ya puedes cerrar el portal, el no vendrá.

Teyaka asiente y el portal desaparece. —Me lo temía.

—Alejandro se apego demasiado a una idea y ahora quiere probar puras incoherencias. —Cuenta la chica a Jesus.

—¿Que idea?.

—Luego te cuento. —Avisa la chica. —Es algo largo y no creo que sea ni el lugar ni el momento adecuado.

Jesus asiente.

Fany ríe. —No quiero ni imaginar la cara de Alejandro si tan solo viera dónde se encuentra la séptima dentia. —La chica observa la imponente estructura llamada "El castillo" en Chichen Itza.

—¿Que coincidencia, no creen?. —Pregunta Luis Angel.

Fany niega. —No lo es... Justo como lo dijo Alejandro, fuimos elegidos.

—Chicos, está es la última dentia a recolectar. —Habla Teyaka. —Tienen que ser demasiados cuidadosos. —Avisa. —Han crecido mucho y confío en que lo lograrán. —Después de esas palabras, Teyaka desaparece dejando solos a los chicos.

—¿Y dónde maldita sea está la dentia?. —Pregunta Dyllan.

—Mmm. —¿Quien utilizará previsión está vez?. —Dice Fany observando a todos sus amigos.

—¿Creen que sea necesario?. —Luis Angel pregunta.

Fany lo piensa por unos segundos. —¿Tal vez?.

—Mejor hay que utilizar previsión solo cuando estemos en peligro y no sepamos que hacer. —Sugiere Luis Angel.

—Pues creo que es mi turno. —Decide Jessica ignorando a su amigo.

Luis toda los ojos.

—Aun quedan tu, Magali, Dyllan y otros que no han utilizado previsión, por lo que si estamos en problemas, podemos volver a utilizarlo. —Explica Jessica. —Por el momento. —La chica hace la intia de la previsión. —Veremos que nos arroja esto. —Jessica toca el suelo y la serie de visiones comienzan a presentarse.

Primero, ellos tratando de subir.

Luego una silueta blanca, una especie de fusión entre una serpiente y un ave denegandoles la subida

La última visión era de Luis Angel a punto de tomar la dentia utilizando su escudo invisible, pero tropieza lo que lo hace visible ante la serpiente que no duda en aventarlo para proteger la dentia.

Jessi toma aire fuertemente pues siente que se ahoga.

—¿Estás bien?. —Fany la auxilia.

Jessica asiente mientas trata de tranquilizarse.

—¿Que viste?. —Pregunta Jesus curioso.

Jessica se toma su tiempo para explicarle a sus amigos lo que observó en sus previsiónes.

—Luis, tu sales aventado. —Fany lo observa. —Y no querías que utilizaramos previsión.

Luis ríe. —¡Dios!, Solo era una sugerencia.

Jessica ríe. —Creo que para tomar la dentia, tenemos que imitar la estrategia que utilizamos en Petra.

—¿Lo del escudo invisible?. —Pregunta Jesus.

—Exactamente. —Jessica asiente. —Claro, si mi previsión no falla.

—Ojala, por qué si no vamos a tener que enfrentarnos a la furia de ¡Quetzalcóatl!. —Dice Alfredo alzando las manos.

—No wey. —Jesus lo observa. —Quetzalcóatl no... Bueno si pero no.

—Los mayas le decían Kukulkán. —Le dice Jessi a Alfredo.

—Bueno lo que sea. —Alfredo responde indiferente.

—¿Entonces?. —Luis Angel pregunta. —¿Ese el plan final?.

—Creo que si. —Jessi alza los hombros.

Luis hace la intia del escudo invisible. —Pues entonces, a por esa última dentia.