Despierto con las manos atadas a cadenas a lo largo de una vieja y corroída muralla.
Abro los ojos lentamente, me pesa todo. Las fuerzas no me acompañan, y como puedo, me reincorporo. Las rodillas me tambalean y un fuerte olor a descomposición inunda mis sentidos.
Quiero taparme la nariz, pero las cadenas me lo impiden.
-¡Ayuda! ¡Alguien que me escuche! ¡Por favor!- pero nada, no hay contestación. Y así me lo paso por horas, creo yo. Porque la única luz que entra, es por una ventanilla al fondo de esta pocilga.
-¡Dios mío, ratas! No puede ser ¡Ayuda!- veo cómo una rata grande y gorda pasa golpeándome con su cola. Casi me desmayo.
Varias horas más tarde.
-Por favor, sáquenme de... aquí- siento que las fuerzas me abandonan -Gabriel, por favor. Sácame de aquí. Ya no quiero estar aquí...por favor- digo, mientras tiro de las cadenas con la vana esperanza de que éstas cedan, pero es inútil.
Poco a poco el sueño me vence. Al parecer, la luz del amanecer va haciéndose presente, por lo que comienzo a cerrar los ojos aún contra mi voluntad, dando paso a los sueños...
Oigo pasos frenéticos.
No puedo con el dolor y la angustia.
Mamá está en el quirófano en estos momentos.
Mi hermanito está...muerto.
Mi hermanita está...muerta.
No quiero estar aquí, quiero despertar.
-Mamá, mamá...mamita, por favor, no te vayas. No me dejes. Por favor...no me dejes sola.
Las horas pasan lentas en aquel frío hospital.
Estoy en un rincón, acurrucada, orando por mi madre. No tengo fuerzas.
Afuera, la lluvia golpea con furia todo a su alrededor.
"¡Ven, Mili, vamos!"- debí hacerle caso, debí hacerle caso. Quizá yo también estaría...
-¡Familiares de Margarita Gunder!
-¡Sí, doctor, yo!- Digo, entre asustada y esperanzada.
-Lo siento señorita, las heridas de la señora Gunder eran demasiado graves. Lamentablemente, ella... también murió.-
"ELLA MURIÓ"
-¿Mamá?-
"Hija. Ven. Hija, te estamos esperando con Tomy y Lili. Lo prometiste. Es hora. Ven con nosotros, mi niña...ven".
-¡¡¡Mamaaaaaá!!!- despierto en medio de una gran confusión. Mi corazón late frenético.
Había recordado todo.
La promesa.
La promesa.
La promesa.
-¡RECORDÉ!
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"Déjame Ir"
Random"Vine a Escocia a morir". Estoy cansada, solo quiero dormir, dormir para siempre. Hace un tiempo deseé con todas mis fuerzas estar sola. Hoy, no solo estoy sola, sino que me siento sola, y no lo puedo soportar". Gabriel, un oscuro y extraño hombre...
