_Oh, que mal_ aquel hombre de estatura alta, cabello negro y un corta barba_ De verdad estaba interesado en negociar con tu jefe.
_No es mi jefe, somos socios_ corrigió.
_Ya veo_ Junto sus manos sobre la mesa y miró directamente al más bajo_ ¿Entonces puedo hacer la negociación contigo?
_Así es_ asintió. Aunque la verdad es que no tenía permiso de hacer una negociación con aquel hombre, SeokJin claramente le había dicho que solamente fuera, entregará la mercancía, tomara el dinero y se fuera.
_Bien, primero quiero lo que ya se estaba acordado.
_Aquí esta_ señaló la maleta que había dejado en el suelo desde que llegó. El más alto llamo a uno de sus hombre y este reviso el interior_ son los veinte que pidió.
Se quedaron en silencio mientras el hombre sacaba el contenido de la maleta y pesaba cada bolsa en una báscula.
_Veinte_ confirmo.
_Entonces dale el dinero_ ordenó y Bobby recibió un maletín que contenía varios fajos de billetes, los contó para asegurarse de que fuera lo correcto_ Bien, ahora quiero hablar de un trato para ti y tu socio.
_¿De qué trata?
_Quiero que produzcan solamente para mí.
_¿Y que ganaremos nosotros?_ Choi tomó un papel y escribió un número en él.
_Ese sería su pagó_ Bobby no podía creer la cantidad que aquel hombre ofrecía_ Yo me encargaría de vender la mercancía y ustedes de cocinarla solamente, además de que yo les proporcionaría un lugar, el equipo y materiales para todo.
_Vaya..._ era una propuesta tentadora_ Yo debo hablarlo con mi socio..._ SeokJin le había ordenado no aceptar nada, pero era una te tentación, además de que ya estaba harto de que la mayoría de las ganancias de se las llevaban sus jefes y el hermano de Jin.
_Creo que sería mejor que organicemos otra reunión, una a la que ambos puedan asistir y así podamos negociar. Aunque me gustaría que pensaran mi oferta.
Bobby estaba decidido, debía convencer a SeokJin de que aceptará.
(...)
_¿¡Qué es esto!?_ Ji-ho jalaba la sudadera de su mejor amigo para poder ver bien su cuello_ ¡Parece que te ataco un vampiro!
_No es para tanto..._ Jin murmuró tratando de alejar a su amigo.
_¿¡No es para tanto!?_ Woo estaba molesto, ya todas las heridas de SeokJin habían desaparecido por completo, pero ahora el problema es que estaba lleno de chupetones y mordidas_ ¡¿Qué le voy a decir a tus hyungs?!
_Nada, no los van a ver...
_¿¡Cómo no los van a ver si están en tu cuello!?_ soltó un suspiro y giró a ver a NamJoon que estaba parado junto a SeokJin_ ¡Te dije que lo cuidaras, no que tuvieras sexo salvaje con él!
_No-_ el oficial no pudo ni hablar porque Zico lo interrumpió.
_Mira como lo dejaste lleno de marcas_ señaló el menor que sólo vestía con una de las sudaderas de su novio que le cubría hasta la mitad de los muslos.
_Ya soy grande y NamJoon es mi novio, no nos puedes prohibir tener relaciones.
_No se los prohíbo, solamente que no dejen marcas porque nos mete en problemas a todos_ paso sus manos por el cabello_ Guarda tus cosas, mañana vendre por ti para regresarte a tu casa.
_Pero yo aún no quiero regresar...
_No quieres, pero debes hacerlo porque ya pasó un mes y se empiezan a desesperar, además de que debes volver a tomar tus sesiones con el psicólogo.
_Pero me gusta vivir con Joonie_ abrazo a su novio que llevaba puesto su uniforme de policía.
_No es como si lo fueras a dejar de ver.
_Y es bueno que vuelvas con el psicólogo_ NamJoon agregó_ Podrás venir cuando puedas y quieras, pero es mejor que regreses por tu salud~_ NamJoon lo abrazó por la cintura y le beso la mejilla.
_Ustedes dos me dan diabetes_ Woo murmuró_ Vendre por ti mañana temprano.
_Si, si, ya entendí_ Jin le contestó y volteó a ver a su novio para que le siguiera dando cariñitos. Ji-ho salió por la ventana antes de ver algo que no quería.
(...)
_¡No me gusta ahí, quiero volver!_ Jin gritaba mientras lo llevaban en una camioneta de regreso a casa.
_Ya tranquilízate, dulzura_ Ji-ho lo abrazó y por los hombros_ Y recuerda, no dejes que nadie te vea desnudo porque pueden ver las marcas que te hizo tu novio.
_Ya entendí..._ llegaron al lugar en donde SeokJin vivía junto a sus hyungs. Ahí ya lo esperaba Bobby junto a otros guardias.
_Aquí te dejo, dulzura, debo trabajar_ me dió un beso en la mejilla_ suerte~
Entró a la casa, seguido de los guardias que lo llevaron a la oficina de sus hyungs.
_¡Hola!_ saludó al entrar.
_¡Jin!_ todos gritaron emocionados de verlo, ya estaban acostumbrados a verlo todos los días y un mes lejos les había afectado demasiado.
_¡Niño malcriado!_ Ji-yong lo abrazó_ ¿¡Cómo te atreves a irte así!?, No sabes lo preocupado que estábamos...
_Estoy bien, no sucedió nada~_ intento calmarlo.
Amaba a sus hyungs y los había extrañado demasiado. Solamente esperaba que ninguno fuera a notar las marcas en su cuello en las que Ji-ho y él se habían esforzado por maquillar y cubrirlas.
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