Recuerdos del único amor II: En la boca del infierno

Capitulo 12

Era uno de esos momento de mi vida en el cual estaba mas confundida que nunca, no sabía lo que sentía por ninguno de los dos. Estaba sintiendo cosas por Tomás pero ya de antes que sentía cosas por Jaison. Tenía que decidirme y dejar de jugar al triángulo de los amores, no quería repetir la historia de estar con los dos hermanos, la otra vez no salió muy bien. Esta vez estaba preparada para decirle todo a Jaison, no quería que se enterara por otra persona o por otros medios. No me perdonaría. Salí de la tienda en la cual me encontraba y me dirigí hasta el departamento de los hermanos que en ese momento eran dueño de mi corazón. Toqué la puerta pero nadie atendió a mi llamado, me giré y antes de poder darme la vuelta completa un fuerte golpe me dejó inconsciente en el suelo.

Desperté en una especie de celda tirada en el suelo. No estaba atada, me rodeaban paredes de piedra y rejas de hierro. Al frente mio estaban Jaison y Tomás, mirándome pensando quien me sacaría primero de ahí y se llevaría mi corazón.

-¿Dónde estoy?- toqué mi cabeza por el dolor.

-Tenemos la misma duda- dijo Jaison.

Miré a Tomás que en ese momento estaba en el otro lado de la celda acurrucado contra la pared ignorando mi conversación con Jaison.

-Tomás ¿te encuentras bien?

-Es que este lugar...- observó mientras me hablaba- lo conozco.

-¿Lo conoces?- gritó Jaison.

-Aquí es donde me transformé por primera vez.

-Nunca te vi entrar aquí.

-No estabas conmigo en ese momento- apartó su mirada de Jaison.

-¿Fue cuando...?

-Si- le interrumpió Tomás sin dejar que terminara la frase.

-¿Qué ocurrió?- dije curiosa.

-Tomás se escapó con su novia- rió- y se venían aquí a...

-Entiendo- le interrumpí y miré a Tomás con tristeza.

-A transformase- prosiguió Jaison.

Era el momento de confesar lo que llevaba callando tanto tiempo, lo que llevaba ocultando y me quitaba el sueño.

-Jaison yo...

-Ya se despertaron- dijo una voz que venía de la oscuridad.

-¿Quien eres?- gritó Jaison- ¿qué quieres?

-Luna- rió- es gracioso ya que me transformo en luna llena- salió de la oscuridad- hola Tomás.

-¿Luna?- se impresionó.

-Cuanto tiempo... demasiado diría yo- sonrió- me dejaste y...