Verdad o Reto (Pennywise y tu)

Dolor y sangre

Se quedó en silencio, sabía a qué me refería, podía intuirlo. No iba a tener ese tipo de intimidad con él si el ente no sentía nada, se volvería enfermizo y debía alejarme de todos los sentimientos "humanos" que tenía hacia Pennywise, no podría olvidarlos, pero sí dejarlos de lado hasta que dejara de afectarme.

Mostró una mueca de enojo sin decir nada, avanzó cargándome aún y se dirigió hasta la habitación en donde volveríamos a los encuentros.

Pero está vez era diferente, había algo en él que estaba cambiando y no podía saber que era. Estuve viendo su forma real durante el encuentro y pasados los cuatro minutos, sentí los quejidos de Penny, luego unos gritos hasta pasar por gritos más profundos, él se distanció de mí y me hizo bajar de ese trance con brusquedad.

Lo vi en el suelo, se había alejado de mi con tal necesidad que se lanzó hacia la esquina del cuarto, estaba temblando y aún con el mareo que sentía, me puse de pie y me acerqué a él con preocupación.

- ¡Penny! -Le dije acercándome rápidamente a él, estaba acurrucado en el suelo y tenía los brazos sobre su rostro impidiendo poder verlo. - ¡¿Qué pasa?!

Movió un poco su brazo para dejarme ver un ojo que me observaba, estaba de color rojo y parecía enojado, me agaché y tomé uno de sus brazos para moverlo y poder ver su cara, pero en cuanto lo hice saltó hacia el techo y se apegó a él mirándome desde la esquina.

Estaba sangrando, ya no era solo un poco, sus labios, sus mejillas, las cicatrices que tenía, de cada lugar flotaban hilos de sangre, me observaba con sorpresa y en sus ojos noté que había miedo.

- Ven -Le pedí y alcé una mano para que bajara, estuvo varios segundos observándome de esa manera hasta que accedió y tomó mi mano. Bajó y me miró con cuidado, como si yo fuera una amenaza para él.

- ¿Qué es lo que pasa? ¿Por qué estás sangrando? ¿Qué te está haciendo daño? -Le pregunté a la vez que tocaba los hilos de sangre como si pudiera contenerlos. - ¡Háblame!

- No... -Tragó saliva. -No sé.

- Esto es malo, Penny, necesitas decirme todo lo que creas que pueda dañarte

- ¡No me importa! -Dijo con rabia y me asusté por su forma de reaccionar, lo miré con tristeza por su respuesta tan agresiva, creía que ya habíamos pasado esas etapas.

Notó mi tristeza y se alzó hacia mí, me abrazó con fuerza e hice lo mismo con él, escuché varios quejidos dentro de él, como si estuviera sufriendo por dentro.

La noche fue silenciosa, solo nos recostamos sin hacer nada, ambos mirándonos tratando de ignorar todo lo que había pasado en el día, entre la carta anónima y el sangrado de Pennywise no sabía que pensar.

Estuve abrazándolo como si quisiera aferrarme a él y fuera la última vez que podría hacerlo.

Sabía que eran cosas que no podían ignorarse por mucho, Penny no quería hablar del tema y me insistía en no saberlo, una parte de mi le creía, al ver ese miedo en sus ojos supe que algo desconocido había pasado, algo que él no comprendía.