Dormí bien, abrazándolo tan fuerte y aferrándome a todo lo que podía ser de forma material.
Desperté y sentí que algo faltaba, de a poco abrí mis ojos y él no estaba ahí.
Pennywise no estaba a mi lado y eso me desesperó.
- ¿Penny? -Lo llamé esperando que estuviera cerca, pero nadie contestó.
Bajé de la cama y comencé a recorrer cada espacio de la casa llamando su nombre. - ¡Pennywise! -Le gritaba y no aparecía.
Comenzaba a sentirme triste, mi preocupación aumentaba y me generaba ansiedad, fui a todos lados y nada.
Me dirigí al sótano, era el único lugar que faltaba. Prendí la luz y bajé las escaleras... Lo había encontrado.
Estaba en una esquina como en la noche anterior, acurrucado cubriendo su cuerpo, está vez estaba desangrándose, el suelo tenía varios charcos de sangre y la pared también, miré hacia el techo y ahí es donde se concentraba la mayor parte de sangre, me aterroricé al verlo así. Un nudo en mi garganta comenzó a formarse y corrí hacia él.
- ¡Aléjate! -Me gritó antes de que llegara a él, lo dijo con una amenaza que me intimidó tanto como para frenar de inmediato. - ¡Aléjate de mí! ¡Es tu culpa! ¡Tú querías esto! ¡Tu querías matarme y lo estás logrando! ¡Esa maldita tortuga...!
- ¡¿Que?! ¡No! -Le dije con nerviosismo, mi voz se quebraba al verlo en ese estado, sus ojos amarillos me miraron y dio un quejido de dolor. - ¡Penny! ¡Déjame ayudarte!
- ¡Tú nunca vas a poder ayudarme! -Soltó con rabia, una mueca de tristeza cambio por una sonrisa y creó una ilusión en el entorno, ya no estaba en el sótano, ahora estaba en un lugar oscuro y frío, solo había globos que nublaban mi vista, avancé haciéndolos a un lado buscando a Penny, pero solo oía su voz a lo lejos.
- ¡Te mataré! ¡Voy a matarte! ¡Se acabó! Devoraré tu carne y me alimentaré de ti aun así no tengas miedo -Y escuché su risa de siempre, dolía escuchar sus palabras y no encontrarlo, comencé a sollozar de la impotencia que sentía. Mientras apartaba todos esos globos sentí una calidez familiar y corrí en esa dirección alzando mis brazos, toqué una tela húmeda y supe de inmediato lo que era.
- ¡Penny, no quiero que nada malo te pase! -Dije en un sollozo, había tocado su brazo, el trató de alejarme moviéndose varias veces, pero no lo solté.
- ¡Te dije que voy a matarte! ¡Aléjate de mí!
- ¡¿Estás asustado?! ¡Está bien, yo también lo estoy! ¡Déjame ayudarte!
Y pude verlo, la oscuridad desapareció y estaba frente a mí, viéndome con miedo arrinconado, se veía débil, triste, asustado, abatido.
Lo abracé aunque él puso resistencia varias veces, finalmente accedió, comenzó a caer hasta quedar de rodillas, se me hacía tan pequeño al estar tan herido, solo quería abrazarlo y nunca soltarlo.
Lo tomé del rostro, como estaba en una posición que me favorecía, antes de agacharme junto a él lo besé y él lo permitió, me tomó del cabello y una vez estuve en el suelo junto a él, se posicionó encima de mi sin despegar nuestros labios.
Pasaron varios minutos en que nos besamos de forma pasional hasta que él se alejó, se puso de pie con rapidez y me observó atemorizado nuevamente. -Si intentas buscarme te mataré sin dudarlo. -Dijo con algo de enojo. -No vuelvas a acercarte a mí nunca más.
Quise ponerme de pie también pero el subió las escaleras y para cuando intenté alcanzarlo él había desaparecido.
Pennywise había huido de mi... no lo volvería a ver más.
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Verdad o Reto (Pennywise y tu)
RomanceLa historia sigue a Lei, una adolescente de 15 años que, gracias a su vecina Beverly, se ve involucrada en los sucesos que persiguen al "club de los perdedores", así es como logra conocer y saber de Pennywise, una entidad cósmica que se alimenta del...