Verdad o Reto (Pennywise y tu)

Verdad o Reto

Me fui tan rápido como pude, si llegaba demasiado tarde a casa volvería a discutir con Daniel y era algo que prefería ahorrarme.

Entré al hogar en ruinas del ente, todo estaba silencioso y parecía que no se encontraba cerca, bajé las escaleras para ir al sótano y gritarle por el pozo, pero no fue necesario ya que sentí algo moverse tras de mí.

Me volteé y no vi nada extraño, seguí acercándome al pozo hasta que algo frío y pesado tocó mi hombro, volví a girarme y lo vi, me había puesto una mano encima para llamar mi atención, estaba sonriéndome como de costumbre y suspiré.

-Hola de nuevo, Penny -Le dediqué una pequeña sonrisa y alejé su mano de mi cuerpo. -Tengo muchas preguntas para ti, pero sé cómo te molestan así que solo serán pocas esta vez.

El ente ni siquiera me respondió y de inmediato intentó acercarse a mí, dispuesto a hacer el contacto que lo "alimentaba", lo frené antes de que se acercara un poco más y me alejé. -E-Espera, ya tendremos tiempo para eso...

-No responderé nada si no me alimentas -Me soltó con una expresión molesta.

-No te alimentaré si no me respondes nada -Lo desafié intentando tener paciencia con él, pero era algo imposible cuando se negaba a cada cosa que le decía.

Seguía observándome con molestia sin decir nada más así que decidí ceder esta vez, me quejé en voz baja y lo abracé.

-Es de esto que tenemos que hablar, de este tipo de alimentación.

-No quiero hablar...

- ¡Pero yo sí! -Me alejé molesta, no me di cuenta de que estaba perdiendo la paciencia así que traté de calmarme. -Yo sí quiero hablar... Ya sé, jugaremos un juego. ¿Te gustan los juegos? -Le sonreí tratando de buscar una reacción positiva pero no fue así.

Negó con la cabeza y apreté el puño al ver su negativa. -Verdad o reto, ¿te parece bien? Tú podrás preguntarme cualquier cosa y yo te responderé también.

- Ya sé lo que es verdad o reto -Me respondió con molestia.

- Bien... bien. -Me acerqué y lo tomé de su traje volviendo al encuentro anterior. -Lo siento -Le dije mientras lo abrazaba. -Eres muy difícil... Haremos esto un momento y luego jugaremos.

Esta vez me sentí más en confianza, recosté mi cabeza en su pecho para sentir un poco de él, siempre se sentía algo frío, como si fuera un muerto con una movilidad extraña, lo había visto hacer movimientos imposibles para un humano común, mientras pensaba en todo esto sentí una especie de calor viniendo de su pecho, no sentía latidos ni ruidos, solo una vibración extraña, como si fuera un gato ronroneando sin hacer ningún sonido. Esto se apagaba a veces, noté que las veces que se apagaba él hacía un movimiento con su cabeza que no podía ver, quizás se estaba alimentando y eso indicaba que abría su apetito, podría estar teorizando todo el día sobre ello.

Luego de todo ese tiempo sentí como unas gotas caían, miré hacia arriba y era su saliva que se escapaba de sus labios, eran solo unas gotas finas que no caían por completo, me separé un poco, él tenía un rostro sereno, no tenía su sonrisa de siempre, parecía estar concentrado en alguna cosa. Llevé mi mano hasta su rostro y toqué aquella saliva que salía de sus labios. Pasé a tocar su labio inferior, no era tan frío como lo pensaba, al contrario, era suave, incluso parecía delicado, se sentía real y un poco humano...

No me di cuenta de lo que hacía hasta que tomé conciencia, quité mi mano de inmediato y me alejé de él.

Me quedé en silencio, hacer eso me había incomodado, recordé el juego y le hablé para romper aquel silencio incómodo por mi parte.