C A C H O R R O | YoonSeok | Editando Y Resubiendo

» veintinueve

Propuesta de matrimonio, tres simples palabras que eran difíciles de realizar, YoonGi estaba entrando en un enorme colapso, después de que él y Hoseok se mudaron a vivir juntos, YoonGi sentía que ya era tiempo de dar ese gran paso, pero el problema es que no sabía cómo.

—Entonces ¿Que tal una cena romántica? Ya sabes, apartas un lugar en algún restaurante, cenan y después le das uno de esos discursos románticos que hacen llorar, luego te pones de rodillas, sacas el anillo y le haces la pregunta o... lo llevas a uno de esos puestos callejeros y escondes el anillo en su taco.

Propuso Mark quien se encontraba revisando unos documentos.
YoonGi se pensó lo que le dijo su amigo, obviamente la primera parte, no le preguntaría a Hoseok si se quería casar con él en un puesto de tacos.

—Creo que lo del restaurante podría funcionar.

Mark dejo de lado lo que estaba haciendo y asintió con la cabeza para hacerle saber a su amigo que estaba de acuerdo con él.

—Aunque eso es lo que muchos hacen, podrías intentar hacer algo que sea memorable para ambos, nose, ir a un lugar que sea muy importante para ti y él o algo así que se yo.

"Oh Mark, tu sabes más de lo que crees" pensó el pelinegro mientras su mente comenzaba a trabajar ideando la manera en la que le pediría a su cachorro que se casará con el.

☀️☀️☀️

YoonGi llego a su hogar algo exhausto por todo el trabajo que había tenido ese día, al abrir la puerta de su hogar una imagen tierna de su pareja durmiendo en el sofá abrazando a Mickey lo recibió y no pudo sentirse más que feliz.

Se acercó a su pareja y acaricio con la punta de sus dedos los pómulos algo regordetes de Hoseok, esto causó que el menor diera un pequeño brinco por las caricias y se despertara con una pequeña sonrisa adornando su rostro al ver qué se trataba de su Alfa.

—No debiste esperarme cachorro, te hubieras ido a dormir.

—Na, está bien Hyung, me gusta recibirte cuando llegas del trabajo.

Dijo el menor mientras bajaba con cuidado a Mickey del sofá y la colocaba en el piso, y sin esperar más se acercó al mayor y lo abrazo escondiendo su rostro en el cuello de este frotando su nariz en la glándula del olor de YoonGi deleitándose con el aroma de su pareja.

Hoseok amaba el olor de YoonGi, le hacía sentirse protegido y relajado.
El mayor abrazo la cintura de su pareja y sonrió cuando sintió la nariz de este pasearse por su cuello, pequeñas acciones como esa hacían que su lobo se volviera loco y estuviera aún más enamorado de su Omega, definitivamente no quería a nadie más si no es Hoseok.

—Mañana es mi día libre.

Comento el pelinegro quien, sin soltar al menor, comenzó a caminar junto con él hasta llegar al sofá.

—Lo sé Hyung.

—¿Que te parece si vamos a algún lugar?

—Suena bien para mí, me agrada la idea. Por cierto Hyung ¡¿A qué no adivina?!

YoonGi sintió como su lobo daba brincos de felicidad al ver la carita de emoción de Hoseok.

—¿Que es lo que no adivino?

—¡Me dieron el trabajo!

Hoseok estuvo seguro de que toda la cuadra entera escucho el grito de emoción de su Hyung cuando le dio la noticia.