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He ido a traerte algo,Por favor no te preocupesVolveré en menos de lo que crees

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He ido a traerte algo,
Por favor no te preocupes
Volveré en menos de lo que crees

—J

12:30 a.m

No había ningún rastro de Yoo Jinyoung en las calles de Seúl, a decir verdad, no había nadie en las calles que pudiera decirle a Taeyong donde estaba su chica.

Espero por ella una hora, luego pasaron dos hasta que el reloj marcaba las 12 y Taeyong no había tenido de otra que dedicarse a buscar a la chica por las calles. Llevaba más de dos horas llamando su nombre y buscando entre los pocos locales de comida que estaban abiertos.

Nadie la había visto.

—¿Has visto a una chica de cabello negro, de este vuelo y con una cicatriz en su palma izquierda?

—No, lo siento

El pelinegro siguió buscando sin poder tomarse ni un pequeño descanso, recorrió la ciudad hasta que terminó en Gwanjin, frente a la casa de Jinyoung.

—Está aquí—Dowoon informó mirando por la ventana de la habitación de Yoo.

Seonho rodeó el cuerpo de Jinyoung y camino hacia Kim, ambos miraron por la ventana y vieron a aquel pelinegro parado justo en frente de la casa de la chica.

Justo como Dowoon había predicho, Taeyong había venido a buscar a Jinyoung a su casa, ahora tenían que ver la manera de que entrara y poder llevárselo con ellos.

—Quitale la cinta y asegúrate de que él la escuche—ordenó, Seonho a pesar de que odiaba que Dowoon creyera que estaba a cargo, no rechisto.

Jinyoung miró al chico frente de ella acercarse peligrosamente hasta que le quito la cinta de golpe sin cuidado alguno, Seonho la levantó de la cama y se la llevó del brazo escaleras abajo.

La tiro en el último escalón haciendo un escándalo, pero en ningún momento Jinyoung había emitido sonido alguno. La chica tal vez no podía hablar pero podía oír perfectamente a ambos chicos.

Si ella gritaba, ellos lo atraparan y se lo llevarían a Changkyun, pero al mismo tiempo si se quedaba callada Taeyong nunca sabría donde estaba y volvería a su infierno.

Pero Jinyoung no dudaría en quedarse callada con tal de que dejaran a "Taehyung" irse.

—¿Te comió la lengua el gato?—cuestionó Seonho mirando a la chica, Jinyoung le miró con el ceño fruncido—No me hagas volver a hacerte daño, Yoo. Todo esto puede resolverse fácilmente.

Jinyoung solo lo miró sin decir palabra alguna, Seonho puso sus ojos en blanco y levantó a Jinyoung del suelo apretando su brazo, la chica puso fuerza en sus pies para evitar que Seonho la lanzara como hace un rato.

Eso provocó que el chico tuviera que poner ambos de sus brazos y finalmente pudiera empujar a Jinyoung contra la mesa del comedor logrando un estruendo más grande.

𝗢𝗕𝗦𝗘𝗦𝗦𝗜𝗢𝗡 | L. TAEYONGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora