"¿POR QUÉ JIMIN NO ME AMA? " [JIKOOK]

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No hay nada que puedas hacer para que cambie de opinión.

-Yo no estaría tan seguro-dijo él con una sonrisa que le congeló la sangre a Jungkook

-Por favor, JiMin... He empezado una
nueva vida y quiero disfrutar viviéndola.

-Una vez me dijiste que no te gustaba vivir solo.

-Yo no vivo solo.

-Aclaremos esto, ¿simplemente
compartes casa?

-No-mintió él. Si le hacia creer que
tenía una relación seria, tal vez lo dejara en paz.

-¿Con quién te acuestas?-le preguntó JiMin tranquilamente.

-No es asunto tuyo.

-Lo estoy haciendo mío. ¿Con quién?

-Jung.

-¿Ese blandengue de mediana edad?
JiMin se echó a reir.

-No te atrevas a llamarlo así. Es un
hombre dulce y sensible, y tengo mucho que agradecerle. Me dio un trabajo y un hogar cuando yo estaba sin nada.

-Mi detective me confirmó que vivías en su casa, pero, conociéndote tan bien, no creo que se lo hayas agradecido en la cama.

-No es solo gratitud. Lo quiero.
Apasionadamente.

-¿Y desde cuándo sois amantes?-la
sonrisa burlona de JiMin le dijo que no se creía ni una palabra.

-Desde hace mucho.

-¿Entonces cómo es que dormís en
habitaciones separadas?

-¿Qué te hace pensar que tenemos
habitaciones separadas?

-No lo creo. Lo sé.

-Cómo podrías saber algo así?

-La encargada de la limpieza puede ser una estupenda fuente de información. A la señora Crabtree, en particular, le encantan
los cotilleos.

Jungkook tragó saliva. La señora Crabtree,una mujer alegre y parlanchina, iba a limpiar una vez a la semana.

-De acuerdo, tenemos habitaciones
separadas. Jung quiere mantener las
apariencias.

-No me extraña. Es tan viejo que podria ser tu padre. Debe tener al menos cuarenta y Cinco anos.

-Tiene cuarenta y tres. Y la edad no
importa en absoluto. Es un amante
extraordinario mientras hablaba sentía la punzada de la conciencia. No le gustaba hablar así de Jung-. Y no es tan estrecho de miras como para creer que solo se puede hacer en la cama hacer el amor en la cama.

-Por el bien de todos espero que estés mintiendo- dijo JiMin con un peligroso brillo en los ojos.-Así eras cuando te conocí.

-En aquel tiempo era ridículamente
ingenua. Pero me enseñaste mucho, y es muy difícil abandonar un placer conocido. ¿0 creías ser el único hombre que podía
excitarme?

-No creia que Jung fuera tu tipo.

-Eso demuestra lo equivocado que estás. Jung y yo estamos muy bien juntos. Quiere casarse conmigo.

-Por encima de mi cadáver-dijo JiMin endureciendo la mandíbula-. No pienso dejar que nadie más te tenga.

-Pero tú mismo has dicho que he
cambiado. Ya ni siquiera soy guapo.
-
-No, no eres tan solo guapo. Ahora
tienes esa belleza conmovedora que puede llegar a obsesionar.

-Aunque eso sea cierto, es algo que les has dicho a muchas mujeres hermosas. ¿Y que paso con tu novia?

-He estado con muchas mujeres
hermosas, creo que seria mejor no hablar de eso.

-¿Por qué no JiMin?

-Porque he descubierto que solo te quiero a ti. En mi cama y en mi vida.

-No lo entiendo...gritó Jungkook desesperante.

-Por una sencilla razón- dijo JiMin con una voz dura y fría. -Me perteneces.

-¿Cómo dices?-preguntó
Jungkook completamente pálido.

-¿Por qué te sorprende? ¿No pensaste que al dejarme de aquella manera me hiciste parecer un imbécil?

Jungkook no podía negarlo. Parte de él había querido hacerle pagar todo el
sufrimiento que él le había infligido.
Apartó la mirada y se fijó en un niño que corría junto al lago. Empujaba con un palo un yate de juguete, mientras su madre, que
llevaba un bebé en un carrito, le advertía que tuviera cuidado porque el agua era profunda.

-Además de eso-siguió diciendo JiMin-, cuando te fuiste no supe lo que te había pasado. Casi me volví loco de preocupación, y he gastado una fortuna en dos años y medio en buscarte. Ahora que te he
encontrado, te quiero en mi cama. ¿Quiero supliques misericordia y yo quede saciado. Ese hacerte el amor
hasta pensamiento no te excita?

-No, no soporto la idea de que me toques-dijo ella con voz poco clara.

-Y saber que eso me dará una gran
satisfacción y...?- se calló de golpe al
escuchar un grito de pánico.
JiMin se puso en pie de un salto y corrió hacia el lago, mientras la mujer del carrito gritaba histéricamente. Le dijo algo que la hizo callar de inmediato, y se tiró al agua.

Tan solo le llegaba por la cintura, y a los pocos segundos salió, llevando en sus hombros al niño, que estaba ileso, y el barco. La mujer abrazó a su hijo sin parar de llorar.

Tras cerciorarse de que nada había
pasado, Jungkook aprovechó para huir. Salió corriendo hacia un taxi estaba aparcado a la entrada del
parque. Se metió en él a toda prisa.

-¿Adónde, señor?

-A cualquier lugar.

Mientras se alejaba del parque, giró la
cabeza y comprobó que nadie la seguía.
Gracias a Dios, había conseguido escapar.
Pero, ¿por cuánto tiempo? JiMin lo sabía todo de el, y no era un hombre que abandonara su objetivo.
Verlo había sido estremecedor, pero saber sus intenciones era traumático. Y también inesperado.
Jamás se hubiera imaginado
que JiMin quisiera volver con él.