! Aquellos Maravillosos años!

Volvemos a Casa

                                                                                      Donna

Todavía sigo sin poder creerme todo lo que nos ha pasado en tan solo unos meses, no llevamos aquí ni medio año y ya hemos pasado por mucho. Meto en el microondas mi taza con la manzanilla que previamente me preparé, cuándo vivíamos en Point Place lo más emocionante que nos pasaba era cuándo Kelso se caía de la fuente del agua.

Pero ahora estamos en un nivel mucho más alto, no entraba para nada en mis planes que mi antiguo novio- hermano de uno de mis mejores amigos a parte de vivir aquí en Chicago, intentará matar a mi prometido. Tampoco contaba con que a estás alturas de la historia, sus padres seguirían salvando su culo, seguimos ligados a nuestros antiguos amigos. Es como siguiéramos en el pasado. En otra cuidad, otra década, otra casa, pero seguimos anclados en los mismos amigos, la familia y los mismos problemas que la herida nunca se cierra del todo. Siempre uno de los puntos se acaba infectando y vuelve a abrirse, dejando salir la sangre de nuevo, el dolor vuelve a hacerse más grande, más y más.

Escuchó el "clip" indicando que el microondas se a parado, abro la puerta y cojo la taza por el mango. Cierro la puerta y cojo una cuchara pequeña para meterla en la taza y empiezo a remover, cierro los ojos unos instantes de segundos recordando mis años de instituto, en los cuales la única preocupación que tenía era aprobar los exámenes y ir aprobando todas las materias para pasar al siguiente curso. En esa época me preocupaba por cosas muy pequeñas, tanto que ahora lo recuerdo y comienzo a reírme sola en la cocina, Eric se encuentra en el bar de la esquina hablando con su padre.

Hyde, Kelso, Fez y Jackie se fueron muy temprano junto con su madre, él fue a despedirse de ellos mientras yo me hice la dormida. No es que no quisiera verles, cada vez que los veo me recuerdan a aquella época en la que verdaderamente fui feliz, abro los ojos al oír que el teléfono está sonando.

Dejo la taza en la encimera y miro el teléfono pensando en quién es, si es alguno de los chicos y me preguntan porqué no fui a despedirme no sabría si decirles la verdad. Ya que ni yo misma se cual es la verdad, vuelvo a coger mi taza y salgo con ella de la cocina, me encierro en nuestro cuarto, ya que en la habitación no tenemos teléfono.

Me termino mi  manzanilla deje la taza en el suelo, me tumbe en la cama mirando unas antiguas fotografías hasta que me quede dormida.

No se cuanto tiempo estuve durmiendo, pero el ruido de la puerta principal cerrándose me despierta, abro los ojos y me siento de golpe en la cama. Me froto los ojos y me pongo a estirar los brazos, Eric a vuelto. Cojo el despertador para ver la hora, son las 15:00 de la tarde, estado toda la mañana durmiendo, vuelvo a dejar el despertador donde estaba y me levanto de la cama. Entro en el baño, me miro en el espejo para retocarme el pelo y la camiseta, escuchó que abre la puerta del cuarto y pronuncia mi nombre.

-Estoy en el baño.

Abro el primer cajón del mueble y saco el cepillo, empiezo a peinarme y veo que se coloca en el cuadro de la puerta, le veo desde el espejo está detrás de mi.

-¿Les has pedido perdón de mi parte?.

Veo que asiente cruzándose de brazos, sigo peinando mi pelo y viéndolo desde el espejo del baño. Al terminar lo vuelvo a guardar, deja de cruzar los brazos y se acerca hasta mi, pone sus brazos alrededor de mi cintura y coloca su cabeza sobre uno de mis hombros.

E: ¿Estás bien?.

Diga lo que diga solo yo sabría que le estoy mintiendo, a mi misma me miento, asiento sonriendo.