Promise [PJM] COMPLETA

~ Capítulo 20 ~

Jimin entró a la habitación encontrando a HyeLin sentada en el suelo frente al espejo, se acercó a ella sentándose a su lado, la joven de cabello oscuro miraba su propio reflejo con aire ausente balanceándose hacia adelante y atrás, Jimin tomó una de sus manos acariciando el dorso de esta.

— Lo siento.

— No tienes que...

— Sólo...déjame en la calle, así no seré una carga para nadie.

— No haré eso—buscó su mirada—No me importa lo que Rose diga o piense, ella está molesta con todos por lo que hizo, no sabe expresar su ira.

— Que pena de ese bebé cuando nazca entonces—comentó—Cuando esté molesta y explote hará que ese bebé se sienta como lo peor—sonrió con amargura— ¿Sabes lo que me decía mi madre? Puedo estar enojada con los demás, pero no por eso pagaré mi enojo contigo—Jimin apartó aquella lágrima silenciosa—Quiero ir a casa, Jimin, estoy cansada, a veces...sólo quiero hundirme en la bañera—lo miró— ¿Por qué no me sueltas? Pierdes tu tiem...

— No, no, deja de decir eso—apretó su mano—No eres una maldita pérdida de tiempo, estoy harto de escucharlo, ¡Estoy harto! —se mostró molesto—Hago lo que puedo, hago todo por ti, necesito verte bien, no debí irme, nunca debí irme del país, debí estar a tu lado para evitarte esto, debí decirte lo que sentía y así...

— ¿Qué? —Hye frunció el ceño— ¿Lo que sentías?

— No es nada.

— Te sonrojaste y no me estás mirando, tiene que ser algo—ahora era ella quien buscaba su mirada—Jimin.

— Prometo decirlo cuando estés lista.

— ¿Qué?

— Quizás no deba decir esto, pero...hiciste bien dándole su puesto a Rose—cambió el tema. Hye hizo una mueca mirándose al espejo—Pero me preocupa un poco que te consideres loca cuando no lo eres.

— No me siento bien al habérselo dicho—susurró—Rose siempre se ha mostrado distante conmigo.

— Rose tiene demasiado por madurar.

— Ella me dijo sobre su embarazo una noche cuando no pude dormir—contó—Dijo que el padre del bebé sólo buscaba diversión, deberías volver a Miami, Jimin.

— ¿Hablas enserio?

— Sí—asintió mirándolo fijamente. El rubio notó esos ojos cansados y opacos, ¿Por qué ella no entendía lo mucho que valía para él? Quizás si le contara la verdad las cosas serían diferentes, Jimin se sentía cobarde, tenía cinco años siendo un maldito cobarde.

— No voy a dejarte, sé que eso es lo que quieres, pero no lo haré—sonrió dulcemente—Me quedaré contigo.

— Estoy comenzando a creer que...

— ¿Qué?

— Que...—respiró profundo—Nada—miró sus manos juntas dejando caer su cabeza en su hombro.

֎֎֎

— No creo que sea buena idea—se mostró dudosa con sus manos metidas en los bolsillos de su sudadera, Jimin y ella estaban en el centro comercial un sábado por la tarde, el chico quería comprarle algo.

— Necesito comunicarme contigo, mi madre también lo necesita, además, es algo normal que una persona tenga uno.

— Rose dice que genero muchos gastos, dijiste que me ayudarías a encontrar un trabajo y...

— Hye, honestamente no creo que estés lista para un trabajo—opinó—Quizás puedas preguntarle a tu psicólogo.

La chica mordió su labio inferior queriendo admitir que estaba bien, pero en su interior sabía que no era cierto. Tenía días sin escuchar las voces por estar tomando su medicina sin falta, su ansiedad tampoco había aparecido y sus nervios estaban calmados, Hye sabía que una vez que dejara de tomar aquellas píldoras...todo volvería al inicio.

— No necesito un celular.

— Sí, lo necesitas.

Jimin la guió al interior de la tienda, Hye escogió el color del suyo que venía siendo el mismo modelo de teléfono que tenía el chico, acabó decidiéndose por el rojo oscuro, a Jimin le extrañó que escogiera dicho color, más aún cuando la funda de dicho móvil era roja como el de una manzana.

— Bien—ambos salían de la tienda—Acabo de agendarte el número de mi madre, el mío y el de casa—Hye asintió caminando a su lado—Necesitamos un fondo de pantalla—el chico levantó el móvil apuntando la cámara para ambos, pero de inmediato Hye cubrió su rostro.

— ¿Qué estás haciendo? No me gustan las fotos, siempre salgo mal en ellas.

— Sigues odiándolas—sonrió ladinamente. Tomó sus muñecas descubriendo su rostro—Quiero tomarme una foto contigo, necesitas un fondo de pantalla.

— ¿No puedo simplemente colocar una imagen?

— No—hizo un puchero. HyeLin sonrió un poco sonrojándose, Jimin levantó el celular frente a ellos rodeando los hombros de la chica, él sonrió a la cámara, pero Hye lo miró dulcemente encontrando gracioso y tierno todo lo que hacía Jimin por ella. La cámara captó el momento y Jimin abultó sus labios—No sonreíste.

— Lo siento, pero...creo que no quedó mal—se encogió de hombros, tomó su celular colocándola de fondo e inconscientemente sonrió por lo lindo que se veía. Por primera vez Jimin notó un brillo hermoso en su mirada oscura, una sonrisa apareció en sus labios también.

"¿Qué más seguiré esperando a decirle? No puedo seguir perdiendo el tiempo"

— Hye, yo...

— HyeLin—una voz ronca los interrumpió. La pareja volteó a ver encontrándose a un muchacho de cabello oscuro y ropa negra, Jimin lo reconoció, era el chico que ayudó a su chica cuando Wendy apareció, era...

— YoonGi—Hye por cortesía hizo una pequeña reverencia en lo que él se acercaba.

"Perfecto, no podía aparecer en un mejor momento"

Pensó con cierto sarcasmo el rubio de labios carnosos.

Se nos juntó el ganado :v okno