Peter.
Aunque todo lo que me enteré fue un duro golpe para mí, por lo menos agradezco que Lali me haya perdonado. Tenerla junto a mi, tener su cuerpo abrazado al mío me hace sentir el hombre más feliz del mundo. Después de haber hecho el amor, nos quedamos abrazados y sin que nadie nos moleste.
— Peter.
— Si mi amor.
— ¿Como le dirás a Bruno todo lo que sabes?
— Todavía no lo sé. No quiero lastimar a mi h.... Sobrino. Es difícil decirlo...
— Te entiendo. — apoya su cabeza en mi pecho y me mira. — pero aunque no sea tu hijo, es de tu familia y le puedes dar todo tu amor. El que me preocupa es Pablo, no se veía tan feliz de ser padre.
— Tiene que acostumbrarse y como dije: si él no quiere ser el padre lo voy a golpear y así como me hice cargo de Luz, también me haría cargo de Bruno.
— Yo estaré ahí para apoyarte en todo.
— Gracias mi hermosa. — le doy un beso. — pero mañana hablaré con Pablo y ver la solución que tomaremos. Además tengo que pensar que hacer con Laila. Por todo lo que hizo, merece morir.
— No creo que la muerte sea el mejor castigo para ella. Pero es tu decisión, pero no me gustaría que la mates, aunque hizo todo lo que hizo ella es un ser humano, cruel, pero lo es.
— Mi amor tienes un corazón tan grande. — la beso emocionado. — eres la mujer mas maravillosa y noble que conocí. Otra en tu lugar por todo el daño que te ha hecho.
— Dios nos enseña que hay que perdonar a nuestros enemigos.
— Ay mi amor. — la aprieto a mi cuerpo. — yo no creo que pueda perdonar al hombre que tanto daño me hizo ni a esa mujer.
— No te preocupes. — me da un beso rápido. — mejor solo disfrutemos de nosotros y de ser felices.
— Te prometo que te voy hacer la mujer más feliz de todas y no te haré más daño.
Nos volvemos a besar y entre besos y caricias; volvemos hacer el amor. La hago mía de una manera lenta y tierna. No voy a volver a cometer el mismo error de lastimarla y la haré la mujer más feliz, no quiero volver a ver el dolor en sus ojos, no deseo volver a ver lágrimas en su hermoso rostro, lo que quiero es hacerla feliz y que no se arrepienta en haberme dado una oportunidad.