La tranquilidad del ambiente le dejaba un mal sabor de boca, en su interior sentía que algo estaba por suceder, la calma antes de la tempestad, Yoongi estaba inseguro de haber dejado al reino sin el cuidado pertinente, pero como rey, había obligaciones que estaba forzado a realizar por el bien de Silla.
El ejército rebelde era un problema que le mantenía despierto por las noches, sobretodo, porque sabía quién estaba a la cabecilla, y eso sólo le causaba más furia, nadie podía quitarle lo que por derecho era suyo, no lo permitiría, así tuviera que ir en contra de su misma sangre, Min Yoongi estaba seguro que su sangre no sería derramada y que su reino estaría protegido, tal y como se lo prometió a su padre antes de morir.
Pensaba que no había nada en el mundo que fuera capaz de hacerlo mostrar debilidad, hasta que llegó Jimin, él era la única persona que había causado en él el temor de la perdida, quería protegerlo con su vida, porque lo amaba y el amor causaba debilidad.
Se encontraban en un campamento provisional, a unos kilómetros de su destino, en ese tiempo, no habían encontrado ningún inconveniente, hasta que escucharon caballos acercándose a gran velocidad, sus hombres se pusieron en completa alerta, subiendo a los caballos y tomando las espadas, Yoongi hizo lo mismo, su ejército era poderoso, confiaba plenamente en ellos.
Sin embargo, cuando se acercaban, hubo algo que le hizo bajar lentamente la espada. —¡Es la cuadrilla del príncipe! —dijo Namjoon quien se encontraba nervioso.
Cuando los hombres estuvieron cerca, Yoongi repasó la mirada por estos, dándose cuenta que Jungkook no estaba. Se acercó a gran velocidad.
—¿Qué está pasando?
Un general joven, a quien reconoció por ser hermano de su mano derecha, le miró desesperado, en sus manos, cargaba a Jungkook quien parecía inconsciente.
—Hubo una emboscada, hirieron al príncipe.
Jimin estaba caminando alrededor del mercado, con los guardias pisándole los talones, a su lado se encontraba JeonHan y Soyeon, quienes miraban con encantó lo que estaba alrededor, a él no le importaba en lo absoluto, su mente divagaba, iba y venía al momento de la noche anterior, donde se reencontró con Hoseok y este le besó, estaba ansioso, aquel beso despertó en él la incertidumbre, no lo amaba, o al menos no como antes, pero sabía que lo sucedido era una enorme falta, su rey no tenía que enterarse.
La noche anterior se había torturado la mente, sobretodo, por las duras palabras que Hoseok había dicho, sobre ese terrible futuro al que estaba orillado Silla, por más que miraba alrededor, a las personas que pasaban y trabajaban, no podía desechar ese horrible presentimiento de muerte, estaba preocupado, más al no tener a Yoongi cerca.
—Mira Jimin, este es bonito, te quedaría bien—dijo JeongHan mostrándole un prendedor de flores blanquecinas—. Le va perfecto a tu esencia.
Jimin miró el broche sin prestarle mucha atención, sonrió a JeongHan. —¿Tú crees?
—Claro que lo creo, es más debes llevarlo—anunció con efusividad.
Asintió a la petición de JeongHan, le agradaba, de los concubinos era quien había demostrado verdadero interés en él, pensaba que si las circunstancias hubiesen sido distintas podrían ser buenos amigos, sin embargo, no podía darse el lujo de confiar ciegamente en él sin antes conocerlo, no estaba con personas humildes y honestas, sino con aquellos que habían sido beneficiados con la vida y cuyo corazón estaba marcado. Nadie era verdaderamente honesto en el palacio.
—¿Dónde está SuRan? —preguntó SoYeon llamando la atención de Jimin, quien, a ese punto, no se había dado cuenta que ella no estaba, grave error, Jimin confiaba menos en SuRan, ella sabía que Hoseok estaba con vida y se había quedado callada, pero ¿Por qué?
ESTÁS LEYENDO
El Concubino Del Rey *Yoonmin/Taekook*
FanfictionEl amor no era una maravillosa victoria sino un grito de dolor y desesperación. El rey de Silla, Min Yoongi, deseaba el cuerpo que tenía dueño, lo sabía, no podía poseerlo, pero tampoco podía sacarlo de su mente. Yoonmin TaeKook Namjin Hopemin M...