Alexis.
Alexis se llamaba aquél secuestrador. Por qué así se le tenía que llamar a aquél maldito. Con aquél abundante cabello. Tenía medios rizos, y medias pecas. Y sus ojos verdes cómo la grama verdosa.—He dicho que la sueltes, maldita sea.-—habló nuevamente TaeHyung.
Alexis iba a responder pero recibió una llamada. Dejando a ambos solos en aquella habitación, encerrados.
A Cassie le habían vuelto a poner el paño en su boca. No quería mirar a TaeHyung. Estaba arrepentida.
—Cassie.-—habló con voz ronca.—Cassie, mírame.
Cómo ordenó él, ella hizo caso, mirándole atentamente.
—No te sientas culpable. Yo he venido a sacarte de aquí.
Se escucharon murmullos de ella.
—No hables, no te esfuerces. Veré cómo salimos de aquí, mientras tanto.. descansa, yo velo por tí.
Más murmullos desesperados.
—Te quiero muchísimo, Cassie.-—le confesó mirándole, ella tan desesperada por abrazarlo.
Pasaron varios minutos, ella al parecer se había dormido.
TaeHyung miraba por doquier. Buscando algunos objetos. Escuchó una puerta cerrarse, y un auto encender y arrancar. ¿Se habían ido?
Sus ojos se movieron tan rápidos por la habitación, buscando, mirando, poder escapar con su nena. Dió saltos con toda y silla, lastimandose las manos. Frunciendo el ceño en cada raspón con la cuerda ajustada a sus manos grandes. Llegó hasta una columna de semento. Con sus manos comenzó a mover de arriba hacia abajo con rapidez, tratando de quemar la cuerda, de desgarrar la cuerda, para que rompiese.
Aquella habitación estaba hasta media oscura. Se cansó de tanto esfuerzo. Tragó hondo con la garganta muy seca. Mordió su labio inferior sintiendo las gotas del sudor bajar por sus mejillas cómo si fuesen lágrimas. Temía que esos tipos volviesen.Respiró hondo viendo a su nena, viendo sus manos maltratadas, y su débil cuerpo. Continuó el labor, hasta que se rompió la cuerda, miró sorprendido aquello. Salió del trance, desatando sus pies. Se levantó de la silla con rapidez, miró por la ventana. Notó lo oscuro que estaba afuera, pues era de muy noche. Acarició sus manos en sus pantalones, limpiando la tierra y la sangre. Suspiró mirando, no había nadie por allí. Se dirigió rápido a donde Cassie. Nada más al contacto de sus manos en sus pies, ella se encogió abriendo sus ojos, pero se alivió al ver a TaeHyung desatando sus pies con rapidez y con delicadeza a la vez. Le acarició los pies, le colocó los zapatos con rapidez. Fue a una mano, luego a la otra desatando aquellos nudos tan fuertes. Le sacó con cuidado el paño de la boca. Ella mojó los labios, respirando con dificultades y garganta seca. Ella iba a hablar pero TaeHyung la hizo sentarse colocando una mano en la espalda de ella y besándola con ganas.
La besó con ganas.
Movía sus labios en los labios de ella. No tan profundo el beso. Pero la abrazó al separarse.—Yo también t- te quiero y mucho, TaeHyung.
—Sh, no digas nada, bésame por favor.-—le pidió él entre susurros sobre su oído. Se besaron nuevamente, entre caricias necesitadas. Le acarició el cabello. Volvió a comerle la boca y le susurró sobre sus labios;
—No te dejaría nunca. Vine por tí, solamente eres mía, Cassie. No iba a permitir qué te hicieran daño.
—Gra- gracias Tajie.
El chico le sonrió, el aliento mezclándose, mezclándose todo.
—No agradezcas, te lo mereces y muchas cosas más. Quédate aquí, buscaré la forma de abrir esa puerta.
Había comenzado a llover. Se reflejaba en aquella ventana, que TaeHyung estaba asomado hace minutos atrás. Observó y tocó varias paredes, nada hueco, nada para salir, la puerta estaba súper cerrada con seguro.
—Tendremos que salir por la ventana.
—No importa.
El chico asintió. Se acercó a la ventana, le mandó a la chica a cambiar la vista. Con el codo rompió la ventana, ella cambió la vista para que los vidrios no le cayeran en los ojos. TaeHyung gimió de dolor tocándose el codo, sangrando. Ella rápidamente agarró un poco su camisa y se la colocó con suavidad en el codo de él, calmando la herida, para que no siguiera corriendo la sangre. Pero debían salir de allí cuanto antes.
—Vamos nena, tú primero.-—le dijo él. Ella asintió. Salió por ventana con cuidado, cayendo bien en el suelo, de pie.
—¿Estás bien nena?
—Sí, baja.. tengo miedo aquí.
Un auto se aproximaba.
—Escondete Cassie, ¡date prisa!
Ella se escondió por la celca. Los tipos se bajaron. Entraron a la casa, TaeHyung observó el lugar, agarró los celulares qué estaban tirados en el suelo. Se abrió la puerta repentinamente. Corrió con velocidad a la ventana, pudo salir con rapidez, los tipos miraron a los dos afuera y desatados. Ambos se habían raspado con vidrio, tenían varias heridas.
—Vamos corre, no hay tiempo qué perder.-—le dijo TaeHyung a ella.
Se agarraron las manos para comenzar a correr por aquél oscuro bosque. Los hombres fueron detrás de ellos con almas cargadas. Los hombres sabían a la perfección a donde llevaba ese bosque. Alguien podía salir herido seriamente.
Siguieron en le persecución.
Las respiraciones de la pareja estaba muy acelerada. No sabían qué camino tomar. Más la lluvia hacia la escapada más tenebrosa.
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A ESCONDIDAS | KTH [Completa]
RomanceLe acarició el mentón con sus dedos largos. Se acercó a sus labios resecos. Combinación de respiraciones, ella acomodaba la cabeza en la palma de la mano del chico, buscando sensación cálida. Entonces, él es el único que le podía dar esa gran calide...