A ESCONDIDAS | KTH [Completa]

#7

El chico caminaba por las calles después de salir de la agencia. Miraba a cada persona ir y venir. Era muy tarde en la noche. Estaba de mal humor, después de que le dijeran en la agencia que tenía que tener más resistencia. Que también se tenía que forzar más y comer menos o hacer dieta. Tenía que tener una actividad física muy activa. Le dijeron tantas cosas que no sabía ni qué hacer.

Al principio no le habían dicho que tenía que estar tan activo. Pero él sabía que tenía que hacer mucha actividad física en una agencia de entretenimiento. Habían tantas cosas que le pidieron hacer, que ya se estaba cansando de lo mismo. No quería salirse de su carril, que era ser artista. La carretera estaba media oscura. Iba por la acera húmeda. Pues estaba comenzando a lloviznar. Tenía mensajes de su mejor amiga. Pero él quería despejar su mente.

También quería llegar a la casa. Así que fue por un callejón para acortar la distancia. Se sentía el humo a cigarrillo, la basura.. el olor.

Él tenía el cubrebocas puesto, su cabello le caía en los ojos. Siguió caminando con pasos largos, quería salir de allí cuanto antes mejor. Pasó el callejón. Caminaba de largo, pero no habían tantos focos de luz. Apresuró el paso.

Al fondo sin luz casi, unos chicos se atravesaron por su camino. Uno se recostó de la pared, otro atrás de TaeHyung, con distancia prudente aún.

—Entregue todo.-—le pidió uno, con voz calmada.

—No.-—TaeHyung se negó rotundamente. Negando con la cabeza, aún con su semblante no tan descubierto.

Aún crecía su popularidad, la del chico.

—¿Qué?-—le preguntó el de atrás.

—No le entregaré nada. No tengo nada de valor aquí, por tal razón, no le entregaré nada.-—habló TaeHyung.. saliendo de sí, su voz ronca y fuerte.

—Chico lindo este..-—dijo el que estaba al frente del artista. Se acercó lentamente.—, entregue todo, ¡no importa!-—le dijo un tanto enojado. El artista negó.

Un golpe bajo, con la rodilla. El chico se dobló por el dolor, TaeHyung quejándose. Sin soltar sus cosas aún. El chico de atrás, se rió. Ambos quedaron en frente del artista. Uno le bajó el cubrebocas y lo tiró al suelo con descaro, lo piso manchando la tela blanca. El artista miró la escena casi sin dolor ante el golpe. Tenía que resistirse.

Los tres se miraron fijamente, cuando de un abrir y cerrar de ojos, los dos se le echaron encima a golpearlo con fuerza y violencia. El artista trató de cubrir su rostro y parte de él, cayó al suelo con ellos arriba, agarró fuerza desde lo más hondo, los empujó con ambas manos a los dos. Pudo tomar aire, cuando uno buscaba en su bolso. Otro se le venía encima. Aquél sacó una cuchilla, se la colocó en el cuello.

—Nos viste la cara, mira lo que has echo.-—dijo aquél. Pues en la pelea, TaeHyung le quitó el cubre bocas a uno de los ladrones. TaeHyung se rió burlón, alzó un rodilla con violencia, aquél se retorció contra la acera por el golpe bajo. Se levantó, corrió a su bolso, y el otro ladrón se volteó en ese mismo instante por el quejido del otro. El artista y el otro inesperadamente chocaron. Ambos tenían cuchillas en sus manos, la cuchilla se introdució en el abdomen del artista con violencia. Los ojos de TaeHyung se abrieron con sorpresa al recibir tal impacto doloroso.

El ladrón se echó hacia atrás por la sorpresa.

—Hey, vámonos de aquí, corre. Eres un estúpido, esa no era la idea.-—dijo el que estaba en el suelo cubriendo su entrepierna, jaló del brazo a su compañero y se fueron, TaeHyung se arrodilló en el suelo. Bajó su mano para tocar la herida toda ensangrentada. Se miró los dedos con sorpresa, esa herida seguía saliendo sangre. Manchando su camisa, miró a lo lejos, los ladrones corriendo y perdiendo de vistaa ambos.

¿Qué haría ahora?

Presionó su herida con suavidad y luego presionó con más fuerza en la zona, buscando la cuchilla. La tenía en la carne, clavada. Tenía que sacarla. Sacó de su bolso con rapidez, sentía su cuerpo pesado pero quitó mal pensamiento. Agarró papel toalla con una mano, y con la otra la cuchilla. La jaló, después de contar unos segundos. Rápidamente presionó la herida con el papel toalla. Agarró su bolso, abierto y tirado.

Se intentó parar, así lo hizo, lentamente caminó, tambaleándose. Chocaba con las paredes de los edificios. Casi nadie había por allí, por el atajo que tomó.

Estaba arrepintiendose del camino que había tomado anteriormente. Llegó con el cuerpo pesado a la casa de su mejor amiga, tocó dos o tres veces seguidas sin fuerzas casi. Sus pensamientos, todo lo estaba consumiendo. Estaba cayendo a fuego lento, no sabía que hacer, la herida ardía, dolía muchísimo, seguía saliendo sangre pero más lento, era un no tan alivio, pero estaba adolorido, su mejor amiga le abrió la puerta con velocidad, emitió un sonido de sorpresa y al ver la herida más se asustó. Él fue a abrazarla, ella lo abrazó pero sintió el peso de él demás, había perdido las fuerzas.