—Lovino Vargas ha asistido a clases, director.
Vash miente.
El director bufa, le quería preguntar a él porque es uno de los alumnos más leales, sabe que no mentiría solo por un alumno, mucho menos alguien tan irritante como Lovino Vargas.
—Joven Zwingli, usted es uno de los mejores alumnos —se levanta de su escritorio—. Confío plenamente en tu testimonio —camina hasta colocarse frente al suizo.
El menor arquea su espalda para poder ver a los ojos de su director.
Vash siempre ha sido pequeño, en cuestiones de estatura. El director es alto, muy alto, de las personas más altas en Italia, tal vez, su cabello en punta ayuda con eso.
—No me mienta —ordena—. ¿Asistió Lovino a todas las clases de Gramática?
El suizo logra sentir la mirada acusadora del director. Su mente grita que diga la verdad, Lovino se lo merece.
—Sí, señor, asistió a todas —miente.
Porque a pesar de que la gente piense que no, Vash tiene corazón y su corazón le hizo mentirle a su director.
El director bufa y se retira a su escritorio.
—Ya puedes irte.
Vash sale de la oficina del director corriendo.
Llega hasta su aula, su respiración es errática.
No puede creerlo, Vash, el lame botas, Zwingli acababa de mentirle a un maestro por un bien... No propio.
Peor aún, había mentido por Lovino Vargas. Mismo que se encontraba en su butaca revisando su teléfono. Abre sus mensajes, usualmente los archiva, por lo que tiene como primeros contactos a Antonio, desde el examen que no lo ve. Piensa que tal vez verse fuera de la escuela sea lo mejor, está a punto de enviarle un mensaje cuando Vash azota sus manos contra la paleta de la butaca.
—Hoy me vas a comprar el almuerzo, Vargas —le ordena con su voz demasiado gruesa para su tamaño.
Lovino casi tiene un infarto. Rápidamente bloquea su celular y frunce el entrecejo.
—¿Por qué? —pregunta con mala cara.
Vash se siente incapaz de decirlo en voz alta. No le gustan las cosas amargas, ni siquiera las mentiras amargas.
—El director me... —no hace falta que diga más, con la simple mención del holandés es más que suficiente para ponerle de peor humor que antes —. Respecto a los exámenes yo ... —Vash vacila, no quiere admitirlo, pero su rabia le ayuda—. Mentí por ti ¿Ok?
El italiano le mira sin poder creerlo.
—¿Por qué? —es la única manera en que puede responder.
—Eres amigo de Kiku Honda, él es amigo de tu hermano, eso te hace mi... Compañero —miente en una explicación rebuscada, bastante poco creíble, pero ¿Qué le queda a Lovino si no creerle?
La verdad, Vash no da nada gratis.
Hace tres años Vash llegó a Italia, sin que le gustara realmente la idea de dejar su villa en Suiza
El viaje había sido largo. Vash estaba en la camioneta de su madre, asiento del copiloto, mientras que su hermanita Lily dormía.
La madre de Vash podía ver la tristeza en el rostro de su hijo con el rabillo del ojo.
—Vash —le llamó.
El pequeño le miró con sus grandes ojos verdes.
—Extraño nuestra casa, pero cuando hagamos recuerdos aquí...
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Reprobado (SpaMano)
Fiksi PenggemarLovino está enamorado de su profesor sin embargo su orgullo le impide admitirlo. Descubre como alumno y profesor le dan un nuevo significado a "un amor imposible" Portada realizada por: https://twitter.com/GleysitaNadiez1?t=R0q-qnljGNL2tnDzt_JiBQ&s...