Sam mira fijamente a Robin, este tiene los ojos cerrados y parece estar disfrutando mucho lo que puso en su boca. Abre los ojos y mira a Sam que no puede esperar para escuchar lo que piensa, después de todo lleva trabajando mucho en esa receta.
-¿Y bien?- Pregunta Sam impaciente.
-Este debe ser el mejor brownie que he comido en la vida-responde Robin mientras se chupa los dedos.
-¿En toda tu vida? ¿Estás seguro?-. Ella lo señala con el dedo y entrecierra los ojos.
-Muy seguro-. Robin sonríe y se inclina sobre su escritorio- ¿No tienes otro por ahí?
-Sí, pero solo uno más.
Ella le acerca la cajita que tiene en las manos y señala otro par de sus cheesecake brownies.
-Estos son para el doctor Hale-le dice ella.
-Él no tiene que enterarse que existieron-. Robin guiña un ojo y Sam se ríe.
-El Dr. Hale se entera de todo.
Ambos escuchan a Daniel mientras él sostiene la puerta para que una mujer y su hijo salgan del consultorio.
-Te veo en una semana Jerome-dice Daniel al niño.
El niño solo lo ignora y sigue caminando. La mamá voltea a ver al doctor avergonzada aunque él no se ve para nada sorprendido o molesto.
-Esta bien, solo tenemos que darle tiempo-dice él con una sonrisa reconfortante.
-Sí, doctor, muchas gracias-dice la mujer claramente apenada por el comportamiento de su hijo.
Él asiente, voltea a ver a Sam y enarca una ceja como siempre lo hace.
-¿Qué es lo que ustedes dos tratan de ocultarme?- Pregunta.
Ella no responde, solo voltea a ver Robin de forma maliciosa, él que ha tenido que esconder su brownie le sonríe y también ignora la pregunta. Daniel niega con la cabeza y le indica a Sam que pase. Él cierra la puerta y Sam que apenas esta unos pasos dentro se voltea repentinamente y casi lo golpea en la cara cuando le muestra la caja que tiene en las manos.
-¡Tienes que probar esto!¡Ahora!- dice Sam con casi demasiado entusiasmo.
Él toma la caja que está a centímetros de su cara y mira lo que hay dentro. Ambos toman asiento para iniciar con la sesión.
-Tienes que ser muy honesto conmigo ¿son buenos?-Dice Sam que a pesar de su entusiasmo previo se siente un poco insegura.
-Son excelentes Sam-dice él que está muy entretenido comiendo.
-¿Seguro?
-Las personas que dudan de su talento usualmente son las más talentosas, confía en ti misma.
-Eso es difícil ¿sabes?
-Lo sé, pero también puedes confiar en mí... y en Tyler.
-Me da la impresión de que tu asistente come lo que sea.
-Pues sí, es cierto. Pero yo no y de verdad están deliciosos.
-Mmm... Gracias-. Sam sonríe.
-Bien- dice Daniel poniendo a un lado la caja-¿Como te fue esta semana?
-Fue una semana muy buena, estoy empezando a creer que esto de venir contigo realmente me ayuda.
-Bueno, ese es el punto Sam-. Ríe.
-Pues si, pero te voy a contar un secreto-. Sam se inclina hacia adelante y lo mira fijamente-. No le creí a mi hermano cuando dijo que me ayudarías. Esto de la terapia psicológica parecía falso.
ESTÁS LEYENDO
El Recetario del Amor
Romance"Él está de pie frente a mí, una de sus manos está apoyada en la pared a lado de mi cabeza y la otra en mi cintura, sus ojos no dejan los míos ni por un segundo y casi puedo sentir su aliento acariciando mi piel. Es como si temiera que escape de él...