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Dos días después

NARRA JADE

Me encontraba parada frente a la puerta del departamento de Perrie. Llegué a Londres ayer por la noche, mi madre está estable y ella misma insistió en que viniera para arreglar las cosas con mi rubia.

Llevaba casi diez minutos ahí parada sin saber que hacer, hasta que tomé valor y dí tres golpes a la puerta.

Luego de unos segundos la puerta se abrió lentamente dejándome ver a una pequeña niña castaña. Mi sorpresa fue mayor cuando veo que tiene a Hatchi en brazos, lo que indica que no me he equivocado de departamento.

- Hola pequeña - la saludo con una amable sonrisa - ¿Cómo te llamas? - me pongo de cuclillas para estar a su altura.

- Me llamo Brooke - dijo tímidamente y dió dos pasitos hacia atrás.

- Que lindo nombre - le dije suavemente pues pude ver algo de miedo en su rostro - Dime ¿se encuentra Perrie en casa? - pregunté mirando al interior del departamento para ver si había señales de la rubia.

- E-ella está dormida - dijo la pequeña aferrándose aún más fuerte al pequeño animal.

- Oye tranquila, no tienes que tener miedo pequeña - murmuré al ver que su labio inferior temblaba.

- ¿Eres amiga de Perrie? - preguntó mirando a la criatura en sus brazos.

- Algo así - respondí - ¿Podrías despertarla? Necesito hablar con ella - le pedí mientras hacía un pequeño puchero con mi labio inferior.

Ella al verme comenzó a reír.

- Hey ¿de que te ríes? - pregunté fingiendo estar enfadada.

- Estás muy grande para hacer eso ¿no crees? - dijo ella aún riéndose.

- Puede ser - toqué mi barbilla fingiendo pensar en algo - Pero me gusta hacerlo - dije para luego hacer otro puchero haciendola reír nuevamente.

Su risa era muy linda y contagiosa así que empecé a reír junto a ella.

- ¿Cómo te llamas? - preguntó una vez nuestras risas cesaron.

- Soy Jade, mucho gusto - estiré mi mano en forma de saludo, ella la miró con algo de temor, pero al final la aceptó.

Sentí una conexión extraña al tocar su pequeña manito, no sé como explicarlo, pero fue casi mágico.

La analicé por unos segundos y capté el hermoso color verde de sus ojos. Su piel morena es muy parecida a la mía y su pelo es castaño con algunos tonos más claros. Es realmente hermosa.

- Hhmm - escuchamos como alguien hacia sonar su garganta.

Miré hacia arriba y me encontré con la hermosa imagen de mi novia. Estaba en pijama y su cabello se encontraba alborotado, pero aún así me parecía el ser más hermoso de este planeta.

- B-buenos días Perrie - tragué con dificultad mientras me enderezaba para quedar a la altura de la rubia frente a mi.

- Hola Jade - respondió ella con un tono que no pude reconocer - Veo que ya conociste a Brooke - la pequeña al oír su nombre volteó y saltó a los brazos de mi novia. Creo que es la imagen más tierna que he visto en mi vida.

- Si, y es realmente adorable - miré a la pequeña con una sonrisa que la hizo sonrojarse.

- ¿Quieres pasar? - preguntó con algo de inseguridad en su voz.

- Claro, necesito hablar contigo - la miré fijamente a los ojos, pero ella desvió la mirada al piso.

Se hizo a un lado de la puerta, aún con la niña en brazos, y me adentré en el lugar.
Mis pasos eran algo inseguros, pues me sentía insegura. Tenía miedo, por muy exagerado que suene eso.

Love me baby, please IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora