Theo
El avión comienza a moverse, la turbulencia es fuerte y la mano de Alison aprieta la mía fuertemente, tiene sus ojos cerrados y unos cuantos mechones es su cara.
-Tranquila pronto va a pasar.-susurre en su odio pero ella no dijo nada.
Después de unos minutos todo volvió a la normalidad y ella recargo su cabeza en la ventana, aún seguía sin decir nada, desde que salimos de Berlín solo se había comunicado unas cuantas veces y eso me tiene muy preocupado, aunque en el fondo lo entiendo.
Su mano aún sigue apretando la mía y eso me tranquiliza un poco, se que debo de darle su espacio, pero yo al mismo tiempo tengo muchas preguntas y quiero que volvamos a ser los de antes, carajo es una locura.
-¿Desde cuando temes volar?, no recordaba que te diera miedo algo.-dije para romper el silencio y por primera vez ella me miró.
-Me dan miedo muchas cosas Theo y también pasó mucho conmigo aquí.-me respondió y no soltó mi mano.
-Se que no estas lista, pero siempre podrás hablar conmigo Ali, solo quiero que lo tengas en mente.-le recordé y ella me miró de una forma que jamás había visto que lo hiciera conmigo.
-No debiste estar aquí, esto no era parte del trato Montaner, tú y yo, esto nunca termina bien.-espeto y sentí como punzaba cada parte de mí.
-¿Crees que estar sin ti era mejor que esto Ali?, ¿Qué hubiera pasada si yo no hubiera llegado?.-la cuestione y ella fijo su vista en el cielo.
-Eres fuerte, eres bueno y sobre todo muy inteligente como para saber que en la ecuación de tu vida no encajó.-hablo sin mirarme y me moleste.
-Duele Ali, no tengo como sacarte de mi piel, de mi vida, de mi todo, te necesito.-dije, pero ella seguía viendo la ventana.-mírame por favor Alison, mírame.-supliqué.-Te amo y juntos, tu y yo podremos con todo.
Sus ojos cristalizados se postraron directamente a los míos y en ese instante lo supe.
-Antes de vernos por última vez Ryan me buscó y me contó todo, pero no hice nada, te deje ir Theo, yo hice que te fueras porque me quería convencer a mi misma que era lo mejor para ti, pero no es cierto, por meses me negué a ver que lo hacía por mi en realidad, no estaba lista y no lo estoy aún.-confesó y sus manos se movían de un lado al otro, yo no podía procesar todo a la vez, lo entendía y me dolía, pero no quería aceptar nada.
-Aun te amo A.-le dije, pero pareció más suplica que una afirmación, sin embargo mi corazón estaba muy acelerado.
-¿Hablaste con Sebastian no?.-me preguntó y yo asentí con la cabeza, no tenia ganas de decir nada más.-lo conocí por Bianca y creo yo... no se como en realidad... pero creo que me comencé a enamoré de él T.-apenas logro decir eso y sus lagrimas cayeron junto con más mías.
No podía seguir mirándola, no quería que esto estuviera pasando y mi pecho dolía.
-Lo siento Theo, siento hacerte pasar por esto, yo te quiero y enserio... lo hago, en realidad no se que siento ahora.-susurró y no le conteste.
Me puse los auriculares y fingí que no la estaba escuchando, lo único que quería era salir de este pájaro de acero.
No hacía más que darle vueltas a todo, no podía pensar con claridad, sabía que ella estaba sufriendo, aún escuchaba sus lamentos y deje mi orgullo de lado, tenia mucho coraje, pero no podía solo ignorarla.
Los mechones rizados aun perfilaban su rostro y estaba acurrucada en el asiento con sus ojos cerrados, su respiración era agitada y se movía de un lado a otro.
Ella y yo éramos los únicos en esa hilera y eso era una jodida suerte.
Acomode un poco los asientos y la puse en mi regazo, Alison no dijo nada y yo solo la abracé como nunca lo había hecho.
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Las vueltas de la vida
RomanceUna beca por un año en Alemania fue un billete de lotería para Alison. Ah... pero la vida siempre da muchas vueltas y por mas que huya de su pasado, este siempre regresa...