"Diamante Inestable" Bakugo, Katsuki

c a t o r c e

Al día siguiente estábamos consolando a Mina, Kaminari, Sato y Kirishima debido a su derrota en el examen práctico. Incluso Sero pensaba que él iba a estar fuera, porque no hizo nada útil en el examen.

Aizawa al llegar nos dio a conocer que esa derrota no los iba a excluir del campamento, pero que si tendrían escuela dentro del mismo entrenamiento lo cual volvería pesada esa estadía. Al final, efectivamente Sero fue parte de ellos. El campamento tendría la duración de toda una semana, de modo que todos acordamos que nos harían falta algunas cosas.

Nos entusiasmamos con la idea de Hagaruke de ir al centro comercial a comprar lo necesario juntos como clase. Yo solo era capaz de pensar en un bolso deportivo para guardar ropa, ¿qué más podría ser? Tal vez un par de guantes, no estaría mal. No puedo creer que todo este tiempo he logrado ocultar el hecho de mi mano perdida y los ataques repentinos de mi espalda...

Seguimos hablando del plan de la salida, pero en ello Todoroki se echó atrás.

— Hey, Bakugo, espero verte ahí —le dijo Kirishima entusiasta.
— Ahora mismo no puedo pensar en algo más molesto que eso... —respondió de mala gana antes de irse.

Pensar que ni si quiera yo pude convencerlo después, pero por alguna razón me molestó más la idea de que no fui yo quien tomó la iniciativa...

Fue entonces que el fin de semana nos reunimos la mayoría a excepción de Katsuki y Todoroki... Me fui con Iida a ver bolsos para llevar nuestras cosas y después se nos unieron Ochaco e Izuku.
Cuando nos decidimos, compramos y salimos. En un momento me separé del resto hasta que encontré una tienda deportiva de patinaje. Aquí debían de vender guantes y claro, habían de muchos tipos. En el hielo suelen ser esenciales por si deben los patinadores artísticos tocar la superficie, ya sea por caída o acrobacia. Me llevé unos cuantos para cambiarlos de vez en cuando. Mientras aún esperaba el horario de almuerzo que acordamos como clase, di un par de vueltas hasta que encontré una tienda algo rockera. Fue ahí que vi un collar con un dije que el mismo logo de las playeras favoritas de Katsuki. Era como si me llamara desde la vitrina, la verdad parecía metal pulido, era precioso.

Como él no vino, decidí que sería un bonito detalle llevárselo. Espero no le moleste el gesto. Por alguna razón me sentía algo avergonzada...

Logramos reunirnos casi todos al almuerzo, pero sucedió un incidente y tuvimos que evacuar. Nos dimos por enterados que Izuku y Ochaco reportaron la aparición de un villano que generó toda esta polémica.

Yo me ofrecí para acompañarlos a la comisaría, dónde fueron interrogados antes de poder irse. Mientras estaba en la sala de espera, vi llegar a tía Inko, quién se encontraba muy asustada. Logré calmarla antes de que finalmente liberaban a Izuku. Ochaco también terminó y se fue por su parte.

De camino a casa, Izuku me comentó lo que sucedió. El hombre que generó el incidente de la U.S.J. lo estuvo amenazando. Ahora temíamos cuál sería la siguiente movida de la liga de villanos...

Finalizando oficialmente el primer semestre, teníamos una semana libre antes de empezar el campamento. Supuestamente uno de estos días las chicas y yo íbamos a usar la piscina de la academia para divertirnos, pero se tardaron algo en avisarme.
De ese modo me dediqué a entrenar y relajarme con tratar de retomar el componer. Odiaba como las únicas palabras que llegaban a mi cabeza eran cosas casi cursis cuando esa mierda no es lo mío...

Fui incapaz de tomar iniciativa para darle a Katsuki durante esos días el regalo, por lo que supuse lo mejor sería algún día que lo vea en el campamento.
Suzaku tenía tiempo libre, de modo que aproveché el tiempo de estar con él en lo posible y pasar el rato como solíamos hacerlo. Hablamos muchas cosas y agradecí que mis ataques hayan cesado. Espero sea un efecto permanente...