Mi destino a tu lado - Pxndx fic

Capitulo FINAL "Mi Destino a tu lado"

NARRACIÓN DE PAOLA:

El silenció que se prolongó tras estas declaraciones fue bastante incómodo, todos nos miraban de manera distinta: en algunos rostros se reflejaba la tristeza, en otros la incredulidad y en el de Mariana no se veía otra cosa más que dolor y decepción. Cuando se dio cuenta que la miraba me sostuvo firmemente la mirada, luego se paró de la silla y salió corriendo del jardín.

- Tengo que ir a hablar con ella – musitó Ricardo cerca de mi oído.
- Se veía muy mal – agregó Iván mirando hacia la dirección donde Mariana había desaparecido – Será mejor que vayan a hablar los dos con ella, no vaya a hacer una locura.
- Tienes razón – me acerqué a su silla y lo besé en los labios – Te quiero.
- Lo sé – sonrió a medias.

Ricardo me tomó de la muñeca y salimos corriendo del jardín, en la sala ya no había nadie y la puerta principal estaba entre abierta lo que nos indicó que Mariana ya se había ido. Corrimos por las calles en busca de su paradero y fue hasta después de varios minutos que encontramos una solitaria sombra caminando entre penumbras debajo de la banqueta. Gritamos su nombre como dementes una y otra vez pero no detuvo su andar sino hasta que nos paramos en frente de ella y Ricardo la obligó a escucharnos.

- Mariana ¿A dónde crees que vas?
- Suéltame – sollozó ella sacudiendo su brazo – ¿Para qué quieren que me quede? ¿Para que sigan restregándome en la cara su amor?
- No pensé que estarías aquí – respondió Ricky – no te queríamos lastimar, créeme que esa nunca fue la intención.
- Yo ni siquiera sabía de ese plan – agregué – Mariana, yo estoy igual de sorprendida que tú – me miró con reproche – Nunca imaginé que Iván y Ricardo se habían puesto de acuerdo para...
- Para que me dejara y volviera contigo – me interrumpió – ya sé esa historia, gracias.
- Mariana... no quiero que lo nuestro acabe así – Ricardo la tomó de las manos mientras ella lo veía directo a los ojos a través de sus lágrimas – Mira, lo que tuvimos fue muy especial para mí, créeme que si no hubiera sido así jamás te hubiera pedido que te quedaras a vivir conmigo.
- Pero nunca me amaste ¿Verdad? – su ex novio agachó la mirada – Ya lo sabía...
- Te quise demasiado, y aún te quiero... pero como una gran amiga ¿Me entiendes? – ella asintió con la cabeza – Sé que te lastimé y te pido una enorme disculpa y créeme que nunca fue mi intención herirte pero cuando ella volvió – me señaló con la mirada – mi único objetivo era recuperarla de nuevo...
- ¿Por qué nunca me contaste la verdad? – preguntó – ¿Qué tan difícil era decirme que mi nueva amiga era la mujer que aún seguías amando?
- Creí que no lo entenderías...
- Si, tal vez no lo hubiera entendido en un principio, pero hubiera preferido saberlo por ti a la forma de como me enteré ¿Sabes lo que sentí cuando me dijeron que mi mejor amiga se había acostado con mi novio?
- Eso no fue cierto – exclamamos los dos al mismo tiempo.
- Eso ya no importa – respondió ella – total, ya terminamos ¿No?
- ¿Estarás bien? – preguntó Ricky volviendo a sostener sus manos.
- Supongo – se encogió de hombros – de hecho sólo venía despedirme de ustedes – Ricardo y yo nos miramos extrañados – Mañana me regreso a Boston, supongo que irme de la ciudad y estar con mi familia me ayudará en el proceso de olvidarlos.
- ¿Cómo? ¿Y tu trabajo?
- Ya renuncié a Golden Events – me respondió – Y la campaña con Sally estaba apunto de terminar, me tomaron las últimas fotos ayer y ... bueno eso es todo.
- ¿Sin rencores? – Ricardo extendió sus brazos, Mariana lo miró dudosa unos segundos y después se abalanzó sobre él.
- Sin rencores Ricky, ya aprendí que si amas algo debes dejar ir y espero que ella te pueda dar la felicidad completa que yo nunca pude darte.
- Yo también te deseo lo mejor mi güera hermosa, estoy seguro que tendrás mucho éxito en tu carrera y también de que encontrarás a la persona que...
- Ya, ya no sigas – se separaron – no hagamos este momento más cursi ¿Si? – se limpio las lágrimas y se giro para verme – ¿Lo harás feliz?
- Eso intentaré – Ricardo sonrió ante mi respuesta.
- Eso espero – agregó Mariana acercándose más a mí – ¿Sin rencores?
- Sin rencores – aseguré mientras me unía a su abrazo, la sinceridad de este me dio la seguridad de que a partir de este momento todo estaría bien entre los tres. No había nada que temer.
- Cuida mucho a ese bebé Paola – acarició mi vientre con ternura – Estoy segura que Ricardo desarrollará bien su papel como padre.
- Gracias, yo también lo creo.
- Bueno, creo que es momento de despedirme – miró hacia el otro lado de la calle donde unos faroles se aproximaban a nosotros – Sean felices ¿Si?
- Tú también - respondió Ricky rodeando mi cintura con sus brazos.
- Lo intentaré – nos sonrió mientras le estiraba la mano al taxi que pasaba, de inmediato el auto se detuvo – Adiós.
- Adiós – respondimos los dos mientras la chica de pelo rubio se subía al auto para después desaparecer entre las calles.
- Vaya – suspiró Ricky contra mi nuca – no creí que sería tan fácil.
- Ni yo – tomé aire – ¿Volvemos a casa?
- Sí... pero antes me gustaría intentar algo.
- ¿Qué? – respondí girándome para quedar frente a frente de él.
- Esto...