'La fama es un juego peligroso.'
¿Cómo había alcanzado tanta fama en tan poco tiempo?
Yo era la actriz del momento.
Todos los productores me querían, y cada día me llegaban más y más propuestas.Solía rechazar la mayoría, ya que eran papeles que no m...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
No aparté mis ojos de los suyos, dejándole en claro que no tenía escapatoria, le vi tragar en seco, parecía entre asustado y preocupado, sus cejas castañas estaban levemente arqueadas, y su mirada decía " Estoy metido en sendo peo".
Porque sí. Thomas Stanley Holland estaba metido en sendo peo.
— Prométeme que no te vas a enfadar, darling.— dijo con su acento británico. Sí claro, Thomas, como si el darling fuera a tenerme rendida a tus pies. ( Probablemente en otra ocasión sí, pero hoy no)
— Lo intentaré.— suspiré.
— En realidad, sí conocía a Vanessa West.
—¿Qué? — pregunté atónita.
— Fue mucho antes de siquiera conocerte, estaba en el club con los chicos, y bueno, lo cierto es que estaba bastante pasado de copas. Ya sabes que suelo hacer cosas tontas cuando eso pasa.
— Ni me lo digas.— comenté con sarcasmo.
—No tuvimos nada serio, solo la vi un par de veces, antes de que Vanessa quisiera oficializar la relación, pero solo me quería por fama, ella lo negaría, pero Harrison la escuchó decirlo. No supe más nada de su vida, hasta que la mencionaste aquel día, no me lo tomé en serio porque vamos ¿Qué era lo peor que ella podía hacer? — se encogió de hombros. Yo le miré sin ninguna expresión en el rostro, pero por dentro estaba hirviendo de celos ¿Cómo era posible que una arpía como esa hubiese andado con Tom? Con solo imaginarmelos juntos me daban ganas de vomitar.— Ahora, pienso que hubiese sido mejor habértelo dicho de una vez... Tal vez nos hubiésemos ahorrado muchos problemas.
Suspiré.
—¿Te das cuenta de lo miserable que me hiciste sentir por todo lo que pasó con Jonathan? ¡Me ignoraste, me hiciste sentir tan mal!— exclamé, elevando la voz.— Y resulta que tú también me ocultaste cosas ¡Cosas importantes!— él se pasó la mano entre el cabello castaño.
