Tenías que ser tú (Borrador)

Capítulo 7.

 

Estuvimos dos días de relax en el hotel. Mis amigas estaban muertas y decidimos no salir hasta el sábado o incluso más. Haríamos planes tranquilos y no estar todo el tiempo saliendo de fiesta como querían. A mi esas cosas no me gustaban y muchas veces iba a regañadientes con ellas, luego me lo pasaba bien pero la idea de trasnochar me ponía de mal Karma. Pero aunque mis amigas y yo habíamos decidido no salir de fiesta, a mí, este viernes me tocaba salir con Jackson. No es que no me apeteciera pero me sentía mal saliendo con el hermano de Scott, dándole tal vez algún tipo de esperanza, cuando a mi no me gustaba y probablemente nunca lo haría. Desde que me levanté la mañana del viernes estaba como pensativa. Llevaba más dos días sin ver a Scott ya que tenía entrenamientos a pesar de haber terminado la liga de no sé que... lo cierto es que no me quedé con los nombres sobre lo que hace, no por nada sino porque probablemente nunca los recordaría. Durante el desayuno Blair notó que me pasaba algo y cuando fuimos a coger la comida en el hotel me preguntó.

– ¿Estás bien?

– Solo un poco nerviosa por lo de esta noche.

– ¿No quieres ir?

– Pues lo cierto es que no tengo muchas ganas. A ver no, quiero ir pero no quiero que le piense cosas que no son a mi me él que me gusta es... - me paré en seco y Blair me miró con los ojos muy abiertos.

– ¿Te gusta alguien? ¿Desde cuándo? ¿Cuándo pensabas contármelo? ¿Es a lo que te referías la otra tarde no?

– Bueno ni siquiera sé que es aún, además ya sabías algo.

– ¿Hola? ¿Te estás viendo? te tiemblan las manos Blake.

– Deja de exagerar. Solo le estoy conociendo.

– ¿No será el chico de la fiesta del martes, no?

– Blair eres mi mejor amiga y te cuento todo pero esto aún necesito aclararlo en mi cabeza y entonces serás la primera en saber quién es.

– No me gusta verte preocupada o en tu mundo. Cuando volviste después de pasar la noche con ese chico estabas diferente, radiante. Debe de ser muy bueno.

– No me acosté con él.

– ¿No? - dijo sorprendida

– No, no lo hice. Estuvimos en su casa hubo besos y bueno algo más, pero no me acosté con él.

– ¿Te...? - dijo levantando las cejas y mirando mi entrepierna.

– No me masturbó Blair  - vi como un hombre se nos quedaba mirando con cara de espanto y yo centré mis pensamientos en echarme los cereales en el cuenco.

– ¿Entonces?

– ¿Tenemos que hablar de esto aquí? - dije con cara de suplica.

– Hombre no es buen momento pero prométeme que hablaremos luego.

– Te contaré algo.

– ¡Bien! - me dio un beso en la mejilla y nos fuimos hacia nuestra mesa. Una vez me senté a desayunar me di cuenta de que no me había echado nada más que cereales en el cuenco. Hoy sería un día espantoso.

Después de comer pisamos la playa por primera vez desde que llegamos, bueno me refiero a todas juntas. Ya que yo me iba cada mañana a dar un paseo sola con la esperanza de que me aclarara la cabeza y también para ver si Scott estaba por allí haciendo surf como aquella vez cuando me lo encontré con Jackson, pero no hubo suerte. Mis amigas habían elegido unos bikinis de infarto mientras que yo iba con uno simple de color rosa palo que me hacía aún más blanca. Solo esperaba coger un poco de color para la cena. El día de playa me había matado pero por lo menos había cogido algo de colorcillo. Después de ducharme se me notaba mucho más. Todas sabían que yo aquella noche había quedado con Jackson, y me preguntaron si me iba a ir con él a un sitio apartado a hacer cosas de mayores, como decían ellas refiriéndose a lo que todos sabemos. Una mueca de espanto apareció en mi cara y ellas se echaron a reír. La respuesta era no. La charla pendiente con Blair llegó mientras me estresaba por elegir algo para la cena.