– ¿Qué les voy a decir?
– La verdad Blake.
– No puedo entrar ahí y decirles que su hijo es un adicto de nuevo.
– Es lo único que puedes decirles Blake.
– No puedo.
– Sí puedes y tienes que hacerlo. Eres la única que puede.
– Dylan... ¡Me odian!
– No lo hacen. Entra y ayúdale - Dylan me estrechó la mano cariñosamente y puede que eso me diera fuerzas para entrar de nuevo en aquella casa.
Y de nuevo en aquella puerta. La misma que me había visto entrar cogida de la mano de Scott y de Jackson ahora me veía sola y abatida, sintiéndome culpable por lo que había hecho. Respiré hondo y llamé esperando una respuesta que tardó en llegar. Cuando la puerta se abrió la madre de Scott se sorprendió al verme allí. Sola.
– No recuerdo haberme citado contigo - dijo con desdén.
– Por favor, necesito hablar con usted.
– No quiero saber nada de ti querida.
– ¡No es sobre mi! - dije impidiendo que cerrara la puerta en mis narices.- Es sobre Scott.
– Déjala pasar mamá - oí la voz de Jackson al fondo y entonces su madre me dejó entrar a regañadientes.
Otra vez aquel salón, solo que ahora era incluso más frío que antes. Cuando me senté en el sofá me sentí pequeña ante la mirada de su madre y la cara de circunstancia de Jackson. Ninguno de los tres hablaba simplemente nos mirábamos los unos a los otros, pero nadie se atrevía a decir una sola palabra y entonces Jackson habló por fin.
– ¿Qué quieres Blake?
– Bueno sabréis que no estaría aquí por mi propio pie si lo que les tengo que decir no fuera lo suficientemente importante.
– Habla pues - dijo su madre cortante.
– Es sobre Scott.
– Eso ya lo has dicho - dijo de nuevo en tono seco.
– Mamá, por favor.
– Esta mañana me he entrado de algo que tal vez les interesa a todos no sé si lo sabrán pero hace casi dos semanas que Scott y yo no estamos juntos...
– ¿Por qué no me sorprende?
– ¡Mamá! - gritó Jackson.
–Señora Hale sé que no soy digna de su devoción y a pesar de lo que usted crea, quiero a su hijo pero han pasado cosas que yo no puedo soportar y estar con él a la vez. Si quiere creerme perfecto sino es su problema. Ya se lo dije una vez y se lo vuelvo a decir. He venido aquí porque esto estaba en la bolsa del gimnasio de Scott - saqué la pequeña bolsa y la dejé encima de la mesa- Dylan ha venido esta mañana a decírmelo y he creído que deberían saberlo.
– ¿Se droga otra vez? - dijo Jackson pasándose las manos por el pelo nervioso.
– Dicen que lleva muchos días insoportable y que es incluso agresivo en algunos momentos y yo sospecho que esto empezó antes de nuestra ruptura. Dylan dice que la situación con vosotros le ha superado y que lo nuestro lo ha empeorado y ha vuelto a esto. A evadirse de la única forma que sabe que funciona.
– ¿Por qué nos lo cuentas? - dijo su madre con lágrimas en los ojos.
– Señora Hale ya le dije que yo no era como las demás. Le quiero y me preocupo por él a pesar de todo. Por eso pienso que necesita su ayuda y debían saberlo. Por eso he venido.
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Tenías que ser tú (Borrador)
ChickLitUn viaje con amigas. Nada de padres durante tres meses en la cálida y soleada Florida. Todo parece ser perfecto para Blake Haynes hasta que Scott Hale la súper estrella del fútbol americano del momento aparece en su vida. Los rumores acerca de l...