+18 Mi Pasión: Su Sonrisa. - TERMINADA -

Conociendo la mansión Hwang.

Al salir a la calle HyoYeon no podía dar crédito de lo que estaba viendo, HyoYeon era una chica muy extraña, si, le gustaban los automóviles y poder ver el automóvil que en ese momento manejaba MyungMin, para ella era como ver un unicornio, nos subimos y al principio HyoYeon lo hizo con mucho cuidado, no quería ensuciar nada y al saludar a MyungMin se notó muy tímida. MyungMin nos llevó hasta la casa de MiYoung mientras HyoYeon y yo íbamos muy metidas en nuestra platica, hasta que en un momento llegamos a una reja que protegía un fraccionamiento gigantesco con casas hermosísimas y de un tamaño enorme, miramos a través del parabrisas y cada casa que estaba a la vista era bellísima, pero no había ninguna como la mansión que estaba hasta el fondo, estaba lejísimos y aún con la distancia se veía enorme.

   El guardia de la reja revisó los papeles de MyungMin y después de unos segundos empezamos a avanzar, HyoYeon y yo nos preguntaríamos cual podría ser la casa de MiYoung y entre más avanzábamos más se incrementaban nuestros nervios, no podía creerlo, como era que yo podía tener una amiga que viviera en ese residencial tan lujoso, pero seguía pensando que la persona que viviera en la casa del fondo tendría que ser inmensamente millonaria, esa mansión era única. MyungMin siguió avanzando y hubo un momento donde HyoYeon y yo pensamos que nunca pararía y en un momento pulsó un botón para abrir el portón de la cochera y se empezó a abrir un portón en la casa del fondo, no me lo podía creer, pensé que sería una broma, pero MyungMin se dirigía exactamente a esa casa, y cuando vi que el auto de MyungMin iba a entrar a esa casa la verdad es que sentí que me desmayaba.

   - Hemos llegado a la mansión Hwang señoritas, esperen que iré a abrirles la puerta. – nos dijo MyungMin a HyoYeon y a mí, y en ese momento recordé que MiYoung me había dicho que si no lo dejaba que me abriera la puerta se podía molestar conmigo muy fácilmente.

   HyoYeon y yo esperamos hasta que MyungMin abrió la puerta del flamante y lujoso Bentley Continental Flying Spur, o por lo menos así me dijo HyoYeon que se llamaba ese coche, yo de automóviles no tenía mucho conocimiento, así que tenía que confiar en la palabra de ella. Al bajar fui testigo de la imagen más hermosa que había visto hasta ese momento, incluso sabiendo que iba a tener visitas, MiYoung había venido a recibirnos, pero aún estaba en pijama, y con el cabello un poco alborotado, haber visto así a MiYoung hizo que mi mente volviera a la escena de la noche anterior, no sabía por qué, pero cada vez veía más hermosa a MiYoung, HyoYeon me trajo de nuevo a la tierra cuando me empujó apresurándome a avanzar ya que me había quedado inmóvil de lo sorprendida que me quedé.

   - Oye, muévete, casi me topo con tu nuca Tae. – me dijo HyoYeon muy molesta.

   - Ah sí, lo siento amiga, me quedé en la boba, en serio me sorprendió el tamaño de esta cochera. – le dije a HyoYeon tratando de despistar el verdadero motivo de mi sorpresa.

   - Hola chicas, sean bienvenidas a mi humilde casa, ya quiero que conozcan a mis padres. – nos dijo con mucha alegría MiYoung a HyoYeon y a mí.

   - ¿Humilde?, por favor MiYoung, esta es la mejor casa en el mejor fraccionamiento, es bueno tener humildad, pero eso es exagerar. – le dije entre dientes, ya que a decir verdad no creo que yo fuera la única que lo pensaba, pero estaba segura que era la única que sentía la confianza suficiente para decírselo; pero tampoco quería que me escucharan ni los papás de MiYoung, ni MyungMin.

   - Bueno, es una forma de decir, pero apúrense hay que aprovechar para desayunar ahorita que el molesto de mi hermano no está y no nos va a poder molestar. – nos dijo MiYoung muy alegre, como si los problemas fueran muy constantes entre ella y su hermano.

   - Está bien, apurémonos HyoYeon. – le dije a HyoYeon, la tomé de la mano y empezamos a caminar un poco más rápido.

   Al llegar al comedor el papá de MiYoung nos recibió, estaba leyendo la sección de finanzas del periódico, como lo haría cualquier hombre tan millonario como él, seguramente amasó su fortuna comprando y vendiendo acciones en la bolsa, pensé yo.