Un Ser Poderoso! (vegebul)

Capitulo 47 -Oportunidad

Esa mañana pensó en salir a entrenar como hacía a diario, vistió una sudadera, camisa sin mangas, calzado cómodo y ató su cabello con una trenza, caminó despacio hacia el balcón y una pequeña sonrisa apareció en su rostro, con cuidado deslizó la puerta de vidrio encontrándose con Zamasu sentado a lo jefe indio sobre el barandal.

Buen día Romeo... -dijo Bulma con su jovial sonrisa

Romeo? -pregunto extrañado Zamasu

Ya sabes ....de Romeo y Julieta...

No entiendo a que viene esa referencia -dijo el mirándola con seriedad.

Vamos, no te hagas...
Sabes que hablo de tu cita de ayer con Mai... -dijo ella recostandose con los codos apoyados en el barandal-
Llegaste muy tarde anoche, pero es comprensible, ella es una chica hermosa y dulce además me cae muy bien.

Eso no es cierto... quiero decir, lo de llegar tarde... -dijo frunciendo el ceño- sólo que no quise interrumpir.

Bulma lo pensó por un momento.

Ohh... Entiendo -dijo algo avergonzada mirando al frente.

Soy yo el que no entiendo que le vez a ese...humano -pensó con dureza Zamasu.

El silencio los rodeó por algunos segundos que parecieron horas.

Para romper aquella tensión, Bulma miro con dulzura a Zamasu y le preguntó:

Quieres acompañarme a entrenar... como antes?

Zamasu enarco una ceja y le respondió:

En serio... ?
Imagine que lo hacías con Vegeta?!

Si lo hago, pero después de la universidad, en la mañana lo hago sola, por costumbre...

No pudo evitar mirarla a los ojos, cómo decirle no a esos brillantes zafiros.

Anda...vamos -insistió

Esta bien! -dijo poniéndose de pie

Salieron volando y luego de un rato llegaron a un lugar más allá de las montañas, un espacio casi desierto.

Aterrizaron con suavidad, Bulma se sento en posición de loto y junto a ella Zamasu, quien no podía concentrarse y la miraba de reojo con disimulo.
Al verla ahí, se sentía feliz, volvían a ser como antes cuando la visitaba en el planeta de Bills y sólo eran él y ella.
Sus ojos recorrían todas las facciones completamente relajadas de aquella chica y podía sentir esa aura especial que ahora la rodeaba, se sentía diferente pero no sabía por qué.

Su aroma, ese dulce aroma que la envolvía y embriagaba los sentidos de aquel dios, cerró sus ojos para sentirlo una vez más aspirando con fuerza, sin embargo esta vez había otro aroma mezclado, supo inmediatamente que pertenecía a aquel saiyajin y gruño de imaginarlo junto a ella, abrió los ojos para alejar aquel pensamiento, exhalo el aire de sus pulmones y volvio a cerrarlos para intentar meditar un poco.

Bulma sintiendo el ki perturbado de su compañero, abre los ojos y coloca su mano sobre su hombro.

Zamas...te sucede algo? -dijo sonando preocupada.

No es nada señorita Bulma -dijo fingiendo una sonrisa.

Para con eso si? No más señorita Bulma, solo Bulma por favor...

Pero es que...

Zamas...creo que ha sido mucho tiempo juntos para que me sigas llamando así
-dijo Bulma-

Esta bien... Bulma...
.
.
.

Llevaban un buen rato lanzando golpe tras golpe y la intensidad de los ataques aumentaba a cada momento.

Zamasu se sorprende al sentir el intenso poder que tiene Bulma ahora, es decir siempre lo ha tenido, pero ahora era más tranquilo y parecía estar totalmente bajo control, su poder se acrecenta cada vez más.
Recordaba las veces que ella había perdido el control y por eso se manejaba con precaución.

Analizando a esa nueva Bulma que tenía frente a él descuidó su defensa por una fracción de segundo, esta aprovecha y lanza un ataque señuelo para distraerlo Zamasu lo esquiva con algo de dificultad, y sorpresivamente recibe un puño que lo envía al suelo.

Zamasu se incorporó a medias sentado en la arena, sus ropas estaban algo rotas pero nada más.
Bulma se acerca a ayudarlo.

Lo siento...- dijo ella quien también traía sus ropas algo rasgadas -...te lastime?- poniendose de rodillas junto a Zamasu

Tu poder aumentó mucho desde la última vez... te felicito Bulma! -dijo viéndola con sus ojos grises y una suave expresión de felicidad-

Bulma sonrio.

Eres perfecta... -dijo de improviso colocando una mano en su mejilla y acariciandola con el pulgar.

Con rapidez pero con delicadeza Zamasu acerca su rostro al de Bulma
Ella reacciona a tiempo colocando sus dedos sobre los labios del dios.

Te quiero Zamas... pero no puedo corresponder como lo deseas, mi corazón le pertenece a otra persona.

Sus ojos se desviaron casi como imanes hacia su hombro donde vio la marca.

La mirada de Zamasu se ensombrece y gira su cara a un lado.

Lo siento, no debí tratar de...
-Volvió la mirada a Bulma- Yo te amo, -dijo Zamazu- desde que te conozco solo quiero estar a tu lado...

Zamas... éramos tu y yo únicamente, no tenias la oportunidad de conocer a nadie mas, yo siempre sentí algo muy especial por ti, más cuando llegue a la tierra y conocí a Vegeta me di cuenta que eran sentimientos diferentes.
El amor es diferente para cada persona...

Se sentó a su lado y colocó su cabeza en el hombro del dios

Dime algo, cuando conociste a Mai... no sentiste algo en tu interior... algo raro o diferente?

El dios se quedó en silencio, si había sentido algo cuando conoció a aquella chica misteriosa, pero no quería aceptar la idea de que podía sentir atracción por una humana.

Ella es una humana, tu eres una diosa, nuestro destino...

Sabes tan buen como yo que no creo en el destino... -dijo con algo de enojo-

Suspiro para tranquilizarse y continuo:

Debes darte la oportunidad de conocer más a los humanos, no todos son malos, hazlo por mi...
Quieres?