5. EL CORAZÓN DEL ARCÁNGEL (Evil 5)

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ZAIRA

—Estos son conjuros de nivel menores. –Señalaba Keyle un par de hojas de papiro. Ella observo con detalle los garabatos e imágenes– muy útiles.

—No entiendo absolutamente nada. –Suspiro, por más que viera la escritura y los dibujos no lograba entender que decía– ¿Qué son conjuros menores? –Pregunto para ver si se daba una ligera idea.

—Oh, lo siento. –Se sonrojaba Key– los conjuros de nivel menor son todo aquellos que no causan daño alguno, por ejemplo... –le señalaba uno– este es de rastreo de mediante un olor, aquí está la lista de ingredientes y los paso a seguir, también hay otros derivados, usar un cabello, sangre, ojos, etc. Puedes usar diferentes objetos del receptor para encontrarlo, el hechizo cambia un poco, pero sigue siendo el mismo propósito, encontrar algo o alguien ¿entiendes?

—Creo que sí. –asintió– ¿Qué otro tipo de hechizo menor hay?

—Está el de curaciones, el de leer mentes, el de restricciones, hay demasiados y si te los dijo todos te vas a confundir. –Keyle sonreía encantada con darle explicaciones, no cabía duda que era un ratoncito de biblioteca– algunos demonios puedes hacerlos, pero mayormente recurren a las brujas para que los realicen. Antes las brujas se encontraban en el mercado oscuro, por ser unas criaturas poco leales.

Oh... su pasado como bruja siempre estaría marcado, ¿ella fue asi de desleal y ambiciosa a costa de otros? Su corazón se encogía ante la idea, si era asi no podía culpar a Aiden por odiarla y eso reforzaba más el motivo por saber que le había hecho para que la odiase. Comenzó a sentirse triste.

—Realmente no recuerdo mucho de mi pasado... solo tengo vagos recuerdo del año en que fui al infierno en esta actualidad. –Dijo, su mirada estaba fija en las páginas del grimorio– si asi son las brujas no cabe duda de que fuera asi en mi otra vida...

—Creo que te estas precipitando. –parpadeo y miro a Keyle que la miraba con seriedad– no saques conclusiones sin tener pruebas. Tu conductas y actitudes no muestran indicios de que fueras una bruja mala.

—¿En serio? –No pudo evitar sonar esperanzadora ante la idea– pero no hay prueba de que fuera buena... Aiden dijo que... –un nudo se le formaba en la garganta ante el recuerdo de las palabras dichas por Aiden.

—Ese es un lado de la moneda. Hay dos lados, los espectadores y el emisor, los ángeles vieron su propia visión y el emisor que eres tu tienes tu propia historia, nunca nadie ve igual las cosas, Zaira.

—¿En serio?

—¡Por supuesto! Las acciones y actitudes siempre se mal interpretan. No importa que especie seas. –Respondía Keyle con firmeza– hay un refrán humano muy utilizado "no hagas cosas buenas que parezcan malas y ni malas que parezcan buenas." Velo desde ese punto de vista, estoy segura que cuando más recuerdes sabrás quién eres realmente.

—Tienes razón, gracias. –Sonrió agradecida. Necesitaba una luz en el camino para no perderse– ¿Seguimos?

—¡Claro! la mayoría son hechizos de nivel bajo, también pociones, aunque unas son muy poderosas. –Keyle observaba con mucho interés lo escrito por su otro yo del pasado– ¡oh vaya! Aquí hay un hechizo para evitar que un demonio detecte a su consorte...

Intrigada y curiosa miro la escritura demoniaca, a su mente llego un recuerdo.

Estaba ella moviendo las aguas turbulentas del caldero mientras las especias se mezclaban, el humo sofocaba el interior de su casa, los estantes llenos de frascos con contenidos que ninguna criatura podría ver. La luna roja se alzaba como un símbolo de sangre, sangre que estaba siendo derramada. Cuando la poción estuvo lista la vertió en un frasco de vidrio para después guardarla en una bolsa de piel la cual dejo en una de las mesas de madera de cedro sangriento.