Fantasía/Drama/Romance
"Dicen que el amor es mágico... pero Magia no está de acuerdo"
El principe Erick hara hasta lo imposible para ganarse el corazon de la guardiana Arelis, incluso ignorara las advertencias de la protectora del reino. Pero al ser...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Judasan volvió a entrar a la habitación del príncipe para llevarle la comida. En los últimos días lo había visto distante, desanimado y bastante triste; intento hablar con Arelis para que averiguara que le sucedia al príncipe, pero Arelis se había negado hacerlo, la negativa de la guardian y el silencio del príncipe le confirmó que algo había sucedido entre ellos, algo de lo que Sinor era responsable ya que cuando el rey y él llegaron, Sinor había mencionado un corazón roto y Arelis había casi enloquecido a punto de atacar al guardián.
Habían pasado tres días desde que habían presenciado lo sucedido entre Arelis y Sinor; Judasan quería saber a que se había debido la pelea entre los guardianes, pero no era amigo de Arelis y el príncipe parecía no querer saber nada de ella. Además el rey le había prohibido hablar acerca de aquello con el príncipe y tenía prohibido mencionar cualquier cosa acerca de las facultades mágicas de la guardiana.
Erick observó a Judasan parado junto a la puerta mirándolo, le indico que le dejara el desayuno junto a la mesa que se encontraba cerca de la cama y se sentó dispuesto a comer.
-¿Está bien?- preguntó el guardián sin poder ocultar su preocupación. Erick lo miro y suspiro largamente
-Si, no te preocupes- dijo tomando la cuchara - ¿mi padre ha dicho algo?- preguntó curioso, había notado el secretismo que mantenian Judasan y su padre. Judasan desvió la mirada nervioso al comprender que el príncipe sabía que algo estaba sucediendo y no le habían dicho.
-No, señor- dijo mientras se dirigía a la puerta para marcharse
-¿Se trata de Arelis verdad?- el guardián se detuvo al sentirse descubierto- ¿mi padre está planeando apartarla de mi?- Judasan se giró rápidamente al darse cuenta que el joven había comprendido mal las cosas- si es asi, hasle saber que ya he decidido no insistir mas con ella- Judasan lo miró sorprendido, era la primera vez que lo veía triste al hablar de la guardiana
-No puedo decirle nada, pero no se trata de eso- respondió el guardián- el rey está buscando la forma de proteger el reino, así que no se preocupe- se giró de nuevo hacia la puerta con ganas de contarle todo, pero antes de ser su servidor era fiel al rey y no podía poner en juego su puesto- si quiere que le dé mi opinión acerca de Arelis señor; usted debería pensar con detenimiento en sus acciones, ella ha arriesgado mucho por usted, puede que nunca lo haya dicho con palabras pero para ella usted es muy importante
-Tonterías Judasan, Arelis esta con Sinor- pronunció con amargura mientras se ponía de pie dejando su comida intacta- yo soy el príncipe, ella fue mi guardiana, comprendo que no quiere faltar a su labor; pero sus acciones no significan más que su compromiso con mi familia -finalizó metiéndose nuevamente bajo las cobijas, Judasan abrió la puerta dispuesto a salir, sintiéndose disgustado por la falta de comprensión de su señor
-Solo tenga en cuenta, alteza, que Arelis era una persona muy egoísta, hasta que lo conoció a usted- Erick se sintió confundido ante las palabras del guardián
