-Narra Eva-
Seguimos esperando a que digan algo de Ana, pero no salen. Hugo y Rafa están muy nerviosos. Yo tengo cogido a Hugo de la mano y de vez en cuando nos dedicamos a laguna mirada, pero el sobretodo mira a la puerta de donde salió, al igual que Rafa. Son las 2:00 de la mañana, estamos cansados de estar aquí, queremos que salga ya, pero sobretodo para saber que está bien y que no es nada grabe.
Madre Eva: Voy a por algo de beber abajo, ¿queréis algo?- dice cuando se levanta.
Eva: Yo quiero agua porfa.
Hugo: Yo también.- mira a Rafa pero no reacciona.- Oye, ¿quieres algo de beber?- sin dejar de mirar a la puerta, niega con la cabeza.- Déjalo, gracias.- dice mirando a mi madre. Cuando ya ha desaparecido por el pasillo, me pongo justo enfrente de Rafa y me pongo en cuclillas para poder mirarle mejor.- Rafa, tranquilo, mamá va a estar bien. Sabes que es muy fuerte.- le dice dándole un abrazo.
Eva: Tu hermano tiene la razón, seguro que ha sido cualquier tontería, no ha sido nada grave.- le digo con una media sonrisa.
Hugo y yo estamos muy preocupados también, pero tenemos que tranquilizarle. Rafa se nota que está muy nervioso. No ha hablado en todo el tiempo que llevamos aquí, está sentado, sin moverse mirando a la puerta. Me levanto un poco y le doy un abrazo, sorprendentemente, él me responde con otro abrazo y noto que empieza a llorar. Le acarició la cabeza sin dejar de abrazarle y miro a Hugo, que también está llorando y acariciandole la espalda de arriba a abajo con una mano a Rafa.
Después de un rato, mi madre vuelve con los botellines de agua. Nos da uno a cada uno y se vuelve a sentar donde estaba antes de irse. Yo me siento también a su lado y me da la mano, me mira y me sonríe. Le agradezco muchísimo a mi madre que esté aquí con nosotros, cualquiera no haría esto. Vuelvo a levantarme y me pongo enfrente de Rafa, me agacho de nuevo y me quedo mirándole.
Eva: Toma un poco, tienes que tener sed.- le digo ofreciéndole la botella. Pero niega con la cabeza sin dejar de mirar a la puerta.
Vuelvo a sentarme en mi sitio y veo que Hugo lo coge por los hombros con cuidado y lo echa hacia atrás para poder abrazarlo y que se tumbe un poco. Pero Rafa no deja de mirar a la puerta.
Bastante rato después, la puerta se abre y los cuatros nos levantamos de golpe, nos acercamos a la puerta de donde sale el médico con unos papeles.
Médico: ¿Familia de Ana Cobos?
Hugo: Nosotros, somos sus hijos.- dice cogiendo a Rafa de la mano.
Médico: Vale. A ver, no tiene nada grave, solo ha sido un bajón de tensión. Por el golpe que ha sufrido, le hemos hecho varias pruebas para asegurarnos de que no tiene ninguna lesión interna y así es, no tiene nada, está generalmente bien. Podéis ya volver a casa. Está algo débil por el bajón que ha sufrido, pero mañana estará perfecta.
Hugo: Gracias.
-Narra Hugo-
Cuando ha dicho todo eso el médico, he notado como un peso enorme caia de mi cuerpo, al saber que mi madre está bien, ya estoy tranquilo. Entramos a la sala donde está mi madre y al vernos sonríe. La ayudamos a levantarla de la camilla y vamos con cuidado hacia fuera. La sentamos en las sillas donde estábamos esperando y le ayudo a ponerse una chaqueta.
Ana: Gracias por quedaros aquí con ellos.- dice mirando a Eva y a su madre.
Madre Eva: No tienes que darlas, es lo que debíamos hacer.- dice con una sonrisa.- Me alegro de que hay sido solo un susto. ¿Veis como no era nada?- dice mirándonos a mi hermano y a mí con una sonrisa.
Hugo: Gracias, de verdad.- les digo a las dos. Salimos despacio del hospital y vamos hacia mi coche. Sentamos a mi madre y se despide de ellas, mi hermano también entra en el coche y la madre de Eva se aleja. Nos quedamos solo Eva y yo.- Gracias por venir cabezona.- le digo a Eva con una sonrisa y le doy un beso.
Eva: No las des, es lo que teníamos que hacer.- me da un abrazo.- Venga, iros a descansar, lo necesitáis.- dice separándose de mi.
Hugo: Mañana hablamos. Te quiero.- le vuelvo a dar un beso.
Eva: Y yo.- me da un abrazo. Se despide de mi hermano y mi madre y va al coche de su madre.
Me monto en el coche y antes de empezar a conducir, me aseguro de que mi madre se encuentra mejor. Vamos a casa y cuando llegamos, subimos directos a las habitaciones. Hoy dormiré con mi madre para comprobar que pasa la noche bien y no le pasa nada.
Ana: Gracias por actuar con tanta cabeza cariño, estoy muy orgullosa.- me dice cuando ya estamos tumbados e su cama.- Has cuidado de tu hermano y has estado a su lado.
Hugo: Es lo que tenía que hacer mamá, por algo soy el mayor.- digo riéndome. Ella se ríe también como puede.- Venga, descansa, lo necesitas. Si te notas algo, me lo dices.- le doy un beso en la mejilla y me termino de tumbar a su lado.
Ana: Buenas noches cariño.- me da un beso en la frente y cierra los ojos.
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Aquí os dejo el siguiente capítulo. Espero que os guste.💜
Gracias por seguir leyendo.🤍
