Ron, Hermione y Ariadne se encontraban en la biblioteca estudiando juntos en una mesa para ellos solos. Harry se había marchado del lugar ya que se había sentido completamente incómodo y observando a causa de los otros alumnos que llenaban el resto de la biblioteca; todos lo miraban raro debido a lo que había pasado en el club de duelos con la serpiente y, a demás, se estaba espácienlo el rumor de que él era el heredero de Slytherin ya que hablaba pársel.
Hermione se levantó de su asiento y fue a buscar un libro dejando a sus amigos solos. Ariadne estaba sentada al lado de Ron y se acercó un poco ha él para susurrarle. "Oye Ron, me podrías ayudar en una cosa". El chico despegó la mirada de su libro y miro a su amiga un poco desconfiado. "Si quieres que te ayude en Historia o Pociones, creo que no soy el más indicado" se sincero el pelirrojo pero Ariadne le miro confusa por su declaración. "¿De que estas hablando? No te estoy pidiendo ayuda con los deberes tontito" dijo ella soltando una risilla. "Quería preguntarte si me ayudarías a vengarme de una broma de Fred y George" le explicó señalando son su cabeza disimuladamente hacia donde estaban los dos pelirrojos (que era a un par de mesas de ellos).
"No hace falta que digas nada más. Me apunto. ¿Cual es el plan?" Dijo el chico pecoso todo confiado e intrigado. "Vale, te cuento: estamos aliados también con Lee Jordan para esta broma. Él había propuesto dormirlos con una poción somnífera (que podría conseguirla del aula de pociones) y, una vez dormidnos, dejarlos flotando en su colchón en el lago negro para que cuando despertaran se asustaran y cayeran en el agua pero eso es demasiado arriesgado y no queremos que el kraken se los coma. Así que debemos pensar en otro plan" le explicó Ariadne susurrando. Iban ha seguir dando ideas para el plan pero se vieron interrumpidos por Hermione, que los miro desconfiada después de sentarse en su sitio delante de los dos. "¿Que tramáis?" Incriminó la chica sería con una ceja levantada. "Nada" dijeron sus dos amigos a la vez con caras de angelitos. No se tragó las palabras de ninguno de ellos pero dejó estar el tema y se centró en sus cosas de nuevo.
Por el momento, dejaron estar el tema de la broma para que los tres involucrados pudieron hablarlo juntos tranquilamente. Ariadne miro hacia la mesa de su lado y observó a Ginny (que estaba sola). Ella se acercó un poco a la pelirroja para hablarle susurrando. "Oye, Ginny. ¿Te quieres sentar con nosotros?" Le pregunto la chica de ojos miel amistosamente. La pecosa negó sería dejando un poco cortada su amiga; últimamente se estaba portando de manera un poco rara.
[...]
La cena había terminado y todos los Gryffindor estaban volviendo a su sala común haciendo que Ron, Ariadne y Lee pusieron su plan de venganza en marcha. Los tres iban unos metros por detrás de los gemelos Weasley (que no se esperaban nada). "Immobulus!" Pronunció el chico de rastras una vez los dos pelirrojos habían entrado a su sala común.
Fred y George estaban desconcertados al verse en esa situación. La chica de pelo castaño y sus dos cómplices se pararon en frente de los dos petrificadnos con una maliciosa sonrisa en su cara. "Chicos... ¿que está pasando?" Dijo (como pudo) George un poco atemorizado por su inmóvil situación.
"Uhmm... no me gusta ropa que lleváis: vamos a cambiarlas. Multicorfors!" Pronunció Ariadne maliciosa con su varita apuntándolos. El hechizo que ella les había lanzado a los dos chicos hacia cambia el color y el estilo de la ropa de sus víctimas.Fred se había quedado con un corto vestido, de tirantes, color morado muy inapropiado que tapaba justo lo necesario y George ahora llevaba unos apretados shorts de cuero negros y una blusa de botones blanca que estaba mayoritariamente desabrochada dejando mostrar un sujetador de encaje rojo de tela.
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-Juro solemnemente que mis intenciones no son buenas- {George Weasley}
FanfictionAriadne se encontraba tranquilamente tocando el piano de su cuarto con su gran ventana abierta distraída del mundo e inmersa en sus pensamientos. Poco duro su tranquilidad debido a que sus dos hermanas mellizas entraron repentinamente a su cuarto ch...