-Juro solemnemente que mis intenciones no son buenas- {George Weasley}

1.11

Había un montón de estatuas en forma de piezas de ajedrez que no les dejaron pasar con un rápido movimiento de espadas para ir a la siguiente puerta. Todos estaban llenos de rasguños, heridas y suciedad por todo su cuerpo.

Ron se dio cuenta que tenían que ganar la partida para seguir adelante así que colocó a sus amigos de unas maneras determinadas para que también fueran piezas del juego (Ron se montó encima de uno de los caballos).
Ellos jugaban en el equipo de las piezas negras así que las blancas empezaban el juego. "Ron... esto no será como... el ajedrez mágico, ¿verdad?" Pregunto Hermione un poco asustad. Ron mando uno de sus peones a la muerte para ver si había la posibilidad de que la hipótesis de la chica fuera cierta. El peón blanco destruyó al completo el peón negro asustando a los chicos y demostrando que sí que era el ajedrez mágico.

[...]

Ron había estado mandando a las piezas de su equipo para intentar ganar. Muchas piezas habían sido destruidas pero lo que no sabían los demás es que el chico estaba siguiendo una estrategia que los llevaría a la victoria(aún que suponía arriesgar su vida).

La reina blanca hizo pedazos una de las torres negras cerca de Harry pero se quedó en la posición exacta que estaba buscando Ron. El chico de gafas se fijó en la jugada y por fin lo entendió. "Espera un momento" le dijo al pelirrojo al saber que movimiento iba ha hacer. "Lo entiendes, ¿no, Harry?" Le dijo el pelirrojo. Hermione y Ariadne no estaban entendían nada pero les entró una preocupación enorme de golpe. "Cuando yo mueva mi pieza... la reina me matará... y tu estarás libre para hacer jaque al reí" explicó firme Ron (aún que se le notaba asustado).
Sus amigos se opusieron rotundamente pero el pelirrojo tenía razón; era la única forma de detener a Snape. "Harry, tú eres el que tiene que seguir adelante. Lo sé. Ni yo, ni Hermione, ni Ariadne. Tu." Le dijo mirándolo fijamente a los ojos muy seguro. El chico de gafas redondas asintió algo triste.

"Cabello a H3" dijo Ron agarrándose fuertemente al caballo y suspirando. El nombrado avanzó hasta su nueva posición. Todos estaban muy tensos, asustados y preocupados. "Jaque" dijo el pelirrojo antes de que la reina blanca se moviera de casilla. La reina llegó hasta el chico y destruyó su pieza haciendo que él cayera al suelo y dejándolo inconsciente. "¡RON!" se alarmó Ariadne apuntó de moverse de su casilla para ir donde estaba su amigo pero Harry la detuvo. "¡No, no te muevas! ¡Recuerda que seguimos jugando!". Ella se quedó donde estaba observando a Ron en el suelo asustada.

Harry se movió por el tablero hasta su nueva posición "Jaque mate" pronunció mirando al rey blanco. El juego terminó cuando la espada del rey derrotado cayó al suelo.
Todos corrieron donde estaba su amigo inconsciente para asegurarse que estaba bien dentro de las circunstancias. "Cuidad de Ron" les dijo a las dos chicas Harry. "Después id a la lechuzería. Enviadle un mensaje a Dumbledore. Ron tiene razón. Yo debo continuar." Ellas dos asintieron. "Lo harás bien Harry. Eres un gran mago" le animo Hermione. "Ten mucho cuidado" le dijeron las dos antes de que el chico se fuera.

"Hermione, ayúdame a cargarlo en mi espalda" le dijo Ariadne mientras intentaba empezar a levantar a Ron. Ella la ayudo con dificultad; el chico pesaba bastante más de lo que aparentaba. Se lo llevaron a un lugar más seguro que ese lleno de escombros mientras esperaban ha Harry.

[...]

"¡SOYS UNOS INSENSATOS! ¡Como se os ocurre! ¡Estáis dementes!" Regañaba Ambrose a su hermana Ariadne mientras la enfermera Pomfery le curaba algunas heridas de su cara con un algodón.

Se encontraban todos a salvo en la enfermería de Hogwarts siendo tratados. Harry estaba inconsciente a un par de camillas de los demás de forma estable ya tratado; Ron ya había despertado y estaba estirado descansando en su camilla comiendo un poco para terminar de recuperarse; Hermione estaba sentada al lado de Ariadne, ya tratada también, con un par de tiritas en su frente; Aileen, Ambrose y Draco habían ido a visitar a Ariadne preocupadisimos (aún que Ambrose no paraba de regañarlos); los gemelos Weasley también estaban allí para ver a su hermano y a su amiga (Percy también había ido pero se había marchado hacia rato) y estaban acompañados por Oliver Wood.