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Les tocaba la primera clase de DCAO (Defensa Contra las Artes Oscuras) con el nuevo profesor. Ariadne se había sentado con Ron aquel día y solo Gryffindor y Slytherin se encontraban en la sala.

"Os presentó al nuevo profesor de DCAO. Yo." Comunico con aires de superioridad un hombre rubio-pollo al frente de la clase. "Gilderoy Lockhart, Orden de Merlín, tercera clase, miembro honorario de la Liga de Defensa Contra las Artes Oscuras y cinco veces galardonado por la revista Corazón de Bruja con el premio a la sonrisa más encantadora" se presentó sin dejar de tirarse piropos. Muchas chicas de la clase se derretían por él pero no era el caso de Ariadne.
El hombre, había ido alguna que otra vez a una de las fiestas que organizaban los padres de la chica en primavera y no es que le hubiera caído muy bien (lo encontraba un cansino mentiroso a pesar de que a su hermana Ambrose le encantaba).

"Este tío en un farsante; no ha hecho nada de lo que ha escrito" le susurró la chica de ojos miel al pelirrojo de su lado soltando una risita por parte de los dos. "A Hermione y a mi madre le encanta este tío, pero no se que le ven" le comentó el chico ahora ha ella susurrando también.
El hombre seguía hablando y auto-alagándose haciendo que muchos chicos lo miraran desconcertados y asqueados (al contrario que la mayoría de chicas, que no paraban de suspirar).

La clase se puso un poco más interesante cuando el nuevo profesor destapó una jaula de al lado de su mesa dejando mostrar una pequeñas criaturas moradas con alas y ojos completamente negros; Duendecillos de Cornualles. Muchos rieron al verlos pero el profesor advirtió que podían ser muy canallas. "Veamos qué podéis hacer con ellos" les dijo a los alumnos antes de soltar a las criaturas por la sala.

Los duendecillos empezaron a desordenar y tirar objetos muchas veces rompiéndolos. Los alumnos se levantaron de sus pupitres e intentaron combatirlos como podían pero la gran mayoría se fue corriendo del aula para huir. Ariadne cogió un libro que encontró y golpeó una de las criaturas violetas que estaba tirando del pelo de Hermione.
"¡Perkipiksi Pesternomi!" Intentó conjurar el profesor Lockhart para detener a las criaturas pero uno de los duendes le arrebató la varita. El hombre huyó también a su oficina dejándoles el marrón a los estudiantes que quedaban en el lugar; Harry, Hermione, Ariadne y Ron.

Los cuatro siguieron golpeando a las criaturas con sus libros pero le chica del pelo crespado fue lista y lanzó un hechizo: "¡Immobulus!" Gritó así paralizando a los duendecillos.
"¿Por qué siempre a mí?" Pregunto molesto y confuso Neville mientras colgaba de una lámpara en medio del aula.

[...]

Habían pasado algunas semanas y el equipo de quidditch de Gryffindor de dirigía al campo a entrenar. Iban vestidos con los uniformes, las protecciones y llevaban sus escobas en mano mientras andaban. "Me he pasado el verano preparando un nuevo programa y nuevas jugadas. Entrenaremos antes, más y mejor" comentó Oliver un poco emocionado. Ariadne no se enteró muy bien de lo que decía ya que iba detrás de los demás charlando con Fred y George.

De la nada, el equipo de Gryffindor se paró en medio del patio delante del equipo de Slytherin. "¿Que hacéis aquí?" Pregunto su capitán de forma cansada con sus brazos cruzados. "Entrenar al quidditch" respondió prepotente el capitán del otro equipo, Marcous Flint.
Ariadne se puso al lado de su amigo Harry para escuchar bien toda la conversación y no perder detalle (era algo curioso la chica). "He reservado el campo ara Gryffindor" explicó Oliver con un tono molesto y resoplando. "Tranqui, Wood, tengo permiso" comentó el capitán de las serpientes entregándole un pergamino.
Oliver lo leyó en alto mientras Ron y Hermione se acercaron al grupo de vestimenta roja para ver que pasaba; se olían problemas. "¿Tenéis nuevo buscador?¿Quién?" Resopló el capitán de Gryffindor. De entre la pequeña multitud verde salió una cabeza rubia con una sonrisa extremadamente arrogante. "Malfoy" dijo Harry desconfiado.

-Juro solemnemente que mis intenciones no son buenas- {George Weasley}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora