nine

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La familia Choi, se había mudado de aquel lugar dejando solo al señor Han, a quien poco le importaba saber como estaba su hijo.

Los Choi se mudaron porque el padre de Soobin después de tanto esfuerzo y de ahorrar mucho pudo comprar una casa decente incluyendo haber conseguido un buen trabajo estable, por eso fueron a buscar a su hijo Soobin para llevárselo y si podían también querían llevarse a Jisung y a Mashiho... pero a este último, se le desconocía el paradero.

Toda la buena suerte habia caído en los Choi, justo cuanto más la necesitaban por el sacrificio de Han y la fuga de Mashiho.

Y la madre de Soobin teniendo bajo a su cuidado a los dos bellos niños en una linda casa y Jisung por fin había despertado después de que pasaran algunos meses.

Los padres de Soobin le dijeron si queria que pasaran su nombre de "Han Jisung" a "Choi Jisung" pero este se negó rotundamente, él había nacido como Han y se quería quedar como tal.

Quizás para los Choi les iba todo bien pero no todo era felicidad para Jisung, perder a su hermanito Mashiho, perder un riñón y ahora tener una nueva familia...

Todo había sido muy rápido para asimilar.

Jisung se habia aislado en su habitación, llorando siempre, pocas veces sonreía por las bromas que le hacía Soobin tratando de animarlo.

Siempre se sentía solo y sentía que no encajaba en la familia de su amigo de la infancia ahora hermanastro Soobin.

Llegando a los dieciseís, Jisung se fue de casa... agradeciendo mucho a la familia Choi.

El joven Jisung se fue a vivir con su mejor amigo y hermana, poco a poco perdiendo el contacto con Soobin pero reservando el contacto de sus padres postizos...

El joven Jisung se fue a vivir con su mejor amigo y hermana, poco a poco perdiendo el contacto con Soobin pero reservando el contacto de sus padres postizos

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—¡JISUNG-HYUNG! ¡JISUNG-HYUNG ESTÁ VIVO! —gritó Mashiho a todo pulmón con felicidad levantándose y luego miro a Soobin tirandose arriba de él.

—¡Eu! ¡También me alegro que este vivo! Aunque ya lo sabía... —murmuró desviando la mirada pero volvió su vista al menor— ¡EH! ¡¿Por qué tan cerca?! —mirando a Mashiho quien estaba demasiado cerca de su rostro.

—Ajá. —abultó sus labios escondiendo su felicidad de hace unos momentos—De-sá-ta-me. —mandó.

—Perdón, lo había olvidado. —sonrió y se levanto con Mashiho encima— Voltéate.

El menor asintió: —Oye, Soobin. —llamó una vez que sus manos estaban liberadas— Perdón por lo que pasó en la cafetería...

—No te preocupes, Massy.

—Bien, pero otra cosa... —se sentó delante del mayor— ¿Tienes el número de hyung? —sus ojos brillaban con sus manos hechas puños.

—Ya no. —negó— Perdí contacto con él, si quieres le puedo preguntar a mis padres...

Mi número por 3 folletos | 한승Donde viven las historias. Descúbrelo ahora