Amor Entre Shinobis (CANCELADA)

El regreso a la aldea de la hoja

Iruka y Kakashi se encontraban paseando aquella noche, bastante arreglados, ya que estaban celebrando su tercer aniversario de novios. Se encontraban paseando, tomados de la mano, por el mismo lugar donde Kakashi le había pedido a Iruka que fuera su novio.

- Siento que esta noche no podría ser mejor - dijo Iruka abrazando a su novio - Te amo.

- Y yo a ti - contesto el mayor antes de besarlo - No me puedo creer que hayan pasado ya 3 años. Nunca imagine una vida así... Tan feliz.

- Ow, Kakashi - Iruka volvió a besar a su novio - Gracias por estos 3 años y gracias por todos los que nos quedan por vivir.

- Soy yo el que debe darte las gracias Iruka. En mi cabeza siempre he sido como un soldado sin más. Un ninja que vive por y para la aldea. No me importaba morir y pensaba que a nadie le importaría si muriese.

- ¡No digas eso!

Kakashi sonrío por el regaño de su pareja, sabia cuanto odiaba que se menospreciara a sí mismo.

- Eres mi mundo entero Iruka... Eres mi luz... Mi vida... Mi amor... Te amo.

- Kakashi... - Iruka abrazo al mayor con todas sus fuerzas - Te amo, amor mío.

Aprovechando la distracción de Iruka, Kakashi saco una pequeña caja de su bolsillo.

- No imagino una vida sin ti, Iruka. Y me gustaría saber una cosa...

Iruka se separó de Kakashi - ¿El que? - pregunto.

Kakashi se arrodillo frente a Iruka y abrió la caja que tenía en la mano, la cual contenía un anillo.

- ¿Pasarías el resto de tu vida conmigo?

- Ka-Kakashi...

Los ojos de Iruka se llenaron de lágrimas. Jamás imagino que Kakashi le pediría matrimonio, nunca hablaron de ello y pensaba que era porque no quería.

- Sí... ¡Sí! - contesto Iruka entre lágrimas.

Iruka se tiro sobre Kakashi, haciendo que ambos cayeran al suelo, entre risas y lágrimas de felicidad. Después de un largo beso, Kakashi puso el anillo en el dedo de Iruka. Ambos estaban muy emocionados, hace tres años que comenzaron a salir y un año desde que se mudaron a vivir juntos a una casa propia. Esos tres años habían sido increíbles y bastante tranquilos, lo cual les había dado tiempo para conocerse mejor y ambos habían llegado a la conclusión de que estaban hechos el uno para el otro.

Al día siguiente Iruka fue a trabajar a la torre de la Hokage y la ver a Konohamaru sintió nostalgia, cada día se parecía más a Naruto y en verdad extrañaba al rubio. Shizune y Tsunade notaron el anillo en su mano de inmediato, pero no dijeron nada. Tsunade se puso muy contenta por la noticia, conocía a Kakashi desde pequeño y se alegraba mucho de que hubiera conseguido rehacer su vida y encontrar a alguien a quien amar. El hecho de haber conseguido seguir adelante y ser feliz, decía mucho de él y se sentía orgullosa, tanto como el cuarto Hokage lo hubiera estado.

En otra parte, aquella mañana, Lee despertó de madrugada lleno de energía, listo para su entrenamiento matutino.

- ¡Muy bien, estoy listo para un buen entrenamiento!

- ¿No tuviste bastante con el de anoche? - pregunto Neji, tumbado junto a él, completamente desnudo.

Lee se puso rojo - ¡Eso no cuenta como entrenamiento! - dijo avergonzado.

Neji se abrazó a la cintura de su novio - Pues yo estoy agotado - dijo avergonzando todavía más al chico.

- ¡Neji, no es momento para eso! ¡Es hora de entrenar!