Levantando la mirada digo.
—¿Qué?
—Veo que pareces realmente molesta con tu comida. Se buena con tu comida, y tendrá un mejor sabor.
—Lo siento —murmuro.
Niall baja su cubierto.
—¿Qué está mal?
—Nada. —Rápidamente tomo otra porción de comida y miro el restaurante.
—Algo está mal. ¿Te hice enojar? Solo te estaba probando. Eso es lo que pasará cuando un chico te coquetee. Nada de lo que dije fue una mentira si eso es en lo que estás pensando.
Genial.
—No —me quejo—. Sé eso. Es solo que... eh... Nunca he tenido un chico que me mire de la forma en que la miras a ella. Para algunas chicas es muy fácil. Mira cuanto esfuerzo tengo que poner en eso. Solo me parece injusto.
—Ella podría ser una perra total —responde Niall.
—¿Qué?
Inclinándose hacia delante susurra.
—Soy un chico atractivo. Sé eso. No es difícil atraer a las chicas. Tengo una buena moto y un auto aún mejor. Eso lo hace muy fácil, pero cuando se llega a esto, luego de algunas citas, debes mostrar tu propio color. Ella puede ser la pintura perfecta, pero no tienes idea de lo que realmente es. Podría vivir con 50 gatos. No tengo idea. Salir en citas y conseguir números telefónicos puede ser aterrador y difícil.
—Eso está bien y todo —respondo—. Pero al menos tienes la opción de conseguir número telefónicos. Este es el primer día en que me siento incluso la mitad de normal. Conseguir el número telefónico de un chico está a mil años luz.
Niall se estira y saca un lapicero de la mesa detrás de él. Toma su servilleta y empieza a escribir algo. Solo levanto mi ceja. De pronto, me pasa la servilleta. La tomo y miro. Niall solo sonríe.
—Ahora, tienes el número de un chico.
—Conseguir tu número no cuenta —suspiro, tratando de no reír.
—¿No me encuentras sexy? —pregunta con una enorme sonrisa. Solo ruedo mis ojos—. Oh vamos, fuiste tú quien me dijo sexy primero.
Cruzando mis brazos, digo.
—Bien, eres muy guapo, pero ya sabes eso.
—Así que, técnicamente un chico sexy te dio su número.
—¡Eso no cuenta! Eres mi amigo. Anula totalmente el efecto.
Luciendo exasperado, Niall gruñe.
—Detalles, detalles.
—Come tu lasaña.
Río mientras tomo otro bocado de mi comida. Mis ojos solo miran su número. ¿Por qué esto me hace sentir mareada? Eso es muy estúpido Alex. ¡Sabes donde vive! Hago una pausa y luego me río.
—¿De qué te estás riendo? — Niall curiosea.
No puedo dejar de reír.
—Pensaba para mis adentros que dudo que Sonya alguna vez haya conseguido el número de teléfono de un chico tan caliente antes. ¡Oh, espera! ¡OH! ¡Idiota! ¡Me había olvidado por completo de las flores!
—Oh, vamos. ¡Eran hermosas!
—Sí, lo eran, pero ese es el punto. ¡Hablando acerca de ser el centro de atención! Sonya me quitó la tarjeta antes de que siquiera pudiera leerla.
Niall para de masticar y dice—: ¿Fue un problema?
—No, no sabía lo que era una guillotina, sin embargo. Entonces este chico le dijo que debería comprobar cómo funcionaba, y todo el mundo lo encontró gracioso. Ella terminó luciendo bastante estúpida, así que al final fue bueno. Fue simplemente vergonzoso que todos me miraran.
Poniendo una sonrisa bastante maliciosa, Niall responde.
—Bueno, lo hice para molestar a Sonya, así que mi plan funcionó. Además, pensé que te gustarían. Las vi en tu habitación. ¿Las mantienes ahí para así poder mirarlas y pensar en mí?
—¡Estás muy seguro de ti mismo! —digo juguetonamente—. Caray, Niall, no todas las chicas caen a tus pies.
—Maldición, estoy perdiendo mi toque.
Los dos reímos y luego comemos la cena.
El resto de la conversación es acerca de películas y bandas que nos gustan. Es bueno saber que tenemos mucho en común. Y al final de la comida, Vicky trae la cuenta.
—¿Disfrutaron la comida?
—Sí, estaba MUY buena. TENDREMOS que volver —responde Niall amablemente.
—Es bueno escuchar eso. Si necesitas algo más... por favor siéntete libre y házmelo saberlo.
Niall solo le sonríe. Cuando se aleja, levanta la cuenta.
Un pequeño pedazo de papel cae de debajo. Recogiéndolo, Niall sacude la cabeza.
—Ves, conseguir un número no es difícil para mí. Encontrar una chica en la que esté realmente interesado es otra cosa.
—¿No la llamarás? —pregunto.
Encogiéndose de hombros, Niall responde.
—Probablemente lo haga. Solo estoy tratando de decirte que conseguir un número no siempre significa que tendrás éxito.
—No sé si querría conseguir el número de un extraño —respondo—. Sin importar que pase, soy tímida. Sería más fácil para mí salir con alguien si lo conozco de algún tiempo.
—Eso no es algo malo —dice Niall —. Es probablemente mejor idea que lo que yo hago. —Pone algo de dinero dentro de la carpeta de la factura, y desliza el número en su bolsillo—. Vámonos, cariño. Salimos de nuestras sillas.
—Gracias por la cena, Niall. Gracias por todo.
—Me alegra poder hacerlo. Ahora, te llevaré algún lugar, porque me gustaría que hicieras un bosquejo para mí.
—Haré un bosquejo de lo que quieras —digo—. Te debo mucho.
Mirándome, Niall, enfatiza.
—No me debes nada.
—Bueno, sigo ofreciéndome a hacer lo que quieras.
Eso lo hizo reír.
—Ten cuidado con lo que le dices a la gente, joven dama. Un chico puede tomarlo por otro lado.
Mis mejillas brillan a fuego de la vergüenza.
—No lo dije en ese sentido.
—Lo sé, solo estoy cuidando de ti. Vamos. — Niall gesticula para que lo siga. Al ir por el pasillo. Se acerca y arroja su brazo sobre mí—. Pon tu brazo alrededor de mi cintura —susurra.
—¿Por qué? —susurro por lo bajo.
—Solo hazlo. —Así que lo hago. Y tan pronto como caminamos fuera, miro a nuestra derecha. Eric está sentado ahí. Sonríe y le sonrío en respuesta. Ahora entiendo por qué estoy tocando a Niall. No es que sea malo tener tus brazos alrededor de un chico caliente. Espero que sea tan fácil tener a un chico tocándome en realidad. Niall lo hace muy confortable y fácil de llevar.
Nos dirigimos hacia el auto. Niall me deja ir para abrirme la puerta.
—¿Por qué? Gracias. —río al entrar.
—Siempre le abres la puerta a una hermosa chica —responde.
—De seguro estas tratando de aumentar mi autoestima.
Recostándose contra la puerta, Niall dice—: Estoy tratando de que veas que eres atractiva y alguien importante.
—Creo que me tomará un tiempo llegar ahí —digo tranquilamente.
Niall me da una sonrisa.
—Prometo que te llevaremos ahí.
Con eso, cierra la puerta.
Cuando entra al auto, Niall me mira.
—Así que, quiero que me dibujes algo, pero quiere decir, como profesionalmente. Quiero ser capaz de enmarcarlo, tan grande como tu libro y colorido.
—Digo que sí, haré lo que quieras.
—Está bien —responde—. Te lo mostraré.
Escuchamos música mientras conduce. Finalmente, llegamos a su apartamento. Me giro y lo miro.
—¿Quieres que dibuje tu apartamento? ¿En serio?
—No — Niall ríe—. Te mostraré. Sal de auto.
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The Art Of The Life - Niall
FanfictionNiall es un chico de 21 años devastadoramente atractivo con un secreto, quien sólo tiene que entrar a una habitación y lanzar su sonrisa ganadora para derretir el corazón de una chica. Alex Nimon, es una artista apenas perceptible, cuya vida en casa...