Capítulo 25 {4 parte}

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—Como tu mejor amiga —susurro—, así como yo te amo como mi mejor amigo.

Hay ahí una mirada pensativa de nuevo.

—Sí, te amo porque eres mi mejor amiga.

Con un gesto de alivio, suspiro.

—Muy bien, nunca le había dicho a nadie que lo amo. A mi mamá cuando era pequeña, pero eso se detuvo tan pronto como me di cuenta de que no le importaba.

—Puedes decirme amo cuando quieras —contesta—. Es bueno escucharlo.

—Lo mismo va para ti —replico.

Sonríe y se inclina para besar mi frente.

—Te amo.

—Gracias por venir —digo—. Esto significa mucho.

Apartándose sonríe.

—Sabes que luces exquisita esta noche, más allá de hermosa.

Me doy una vuelta.

—¿Te gusta el vestido?

—Sí, es muy bonito —ríe—. Vale totalmente el dinero. No me enviaste una foto por lo cual en realidad estoy molesto.

Eso me hace detener.

—Hablando de eso, pensé que estabas en una cita esta noche.

Frunce el ceño.

—Bien, tal vez mentí acerca de eso.

Mi mano retrocede y lo golpeo en el brazo.

—¡Se suponía que no nos mentiríamos el uno al otro!

—Fue una pequeña mentira blanca, pero lo prometo, nunca mentiré de nuevo, después de este momento.

—Más te vale que no —chasqueo juguetonamente, empujando su pecho con mi dedo—. Tengo que decir, eres probablemente el chico más caliente de aquí esta noche.

Con un brillo en sus ojos, bromea:

—Sí, lo sé.

—Vamos semental —río, tirando de su mano—. La cena comenzará pronto. ¡Espera! No tienes boleto.

—Te sorprenderá con lo que puedes sobornar a la gente estos días. Confía en mí, no fue difícil conseguir un asiento en tu mesa.

—Entonces vamos a buscar a mis amigos —digo—. Tal vez Sonya haya sido atropellada por un camión.

Riendo, Niall comenta:

—¿Un camión en el centro del caro hotel o alguien la empujó fuera de la acera?

—Lo que sea que prefieras —respondo—. Vamos, no queremos ser los últimos ahí.

Envuelve su brazo alrededor de mi cintura mientras caminamos.

—¿Por qué? Seremos la pareja más caliente en pasar a través de esas puertas.

—Aww —suspiro—. Eso es dulce. —Me jala cerca y caminamos de regreso al comedor.

Todo mundo ha comenzado a entrar. Niall y yo nos movemos casualmente hacia la puerta y me detengo a ver las mesas. Finalmente detecto a Jack y Eric. Tomando la mano de Niall, lo jalo a través de las mesas.

—Hola, chicos —digo finalmente cuando lleguemos allí.

Jack grita:

—¡Oye! ¡Ahí estás!

Veo a Niall sacar una silla para mí, sonrío y me siento. Empuja con gracia mi silla mientras lo hago. Eso me hace querer reír. Tomando el asiento de al lado, Niall me guiña. Compartimos una sonrisa y luego miro hacia mis amigos. Eric me está viendo y encuentro sus ojos. Luce como si fuera a decir algo cuando veo a mi archienemiga parada detrás de él. Sonya se sienta en la silla junto a Eric.

—Buenas noticias, me puedo sentar aquí.

—¿Esas son buenas noticias? —me susurra Niall en voz baja.

Resoplo y cubro mi boca, para que nadie vea mi sonrisa. Se inclina y me besa en el cuello—. Hueles bien.

—Gracias —murmuro. Se acerca y toma mi mano debajo de la mesa, y la jala hacia su regazo. Apretamos juntos nuestros dedos. Mis ojos se levantan y Sonya está viendo nuestros brazos.

—¿Qué? —pregunto.

—Nada, sólo estaba viendo la colocación de tu mano —replica.

Eso me hace explotar en histeria.

—Sí, Sonya, le estoy demostrando a Niall lo feliz que estoy de que haya venido "por debajo de la mesa". Tal vez tú hagas eso, pero yo no.

La mesa completa empieza a reír. Niall se inclina sobre mí.

—Estoy dispuesto si tú lo estás.

—Pervertido —chasqueo tratando de no reír. Me inclino más hacia él y susurro—, Recuerda, sé cómo avergonzarte.

Encuentra mi mirada.

—Oh, te reto doblemente.

—Apuesto a que lo harías —bromeo mirándolo juguetonamente.

Comenzamos a reír y tenemos que apartar la vista de todos.

—¿Qué es tan gracioso? —chasquea Sonya.

Sacudo la cabeza y suspiro.

—Nada. Chiste interno.

The Art Of The Life - NiallDonde viven las historias. Descúbrelo ahora