Bajo los Reflectores

Capítulo Veintiuno

Callum:

—Los dejare solos para que hablen.—Nos dice ángel y sale de la habitación.

Entonces me quedo a solas con ella.

Trago saliva y lo único en lo que pienso mientras la veo, es a ella y a ese sujeto, quien quiera que sea, besándola.

Besándose.

—Felicidades.

—Felicidades.

Los dos le hemos dicho, aunque ella luce confundida.

—Por tu concierto..—Dice ella.—Fue maravilloso ¿Por ..Qué? ¿Por qué me felicitas tú a mí?

Arrojo la lata de Coca Cola al basurero, ella se sobresalta por la presión que ejerzo.

—Por tu noviazgo.. ¿Por qué más?

Camino hacia el refri y acerco mi mano, mis dedos tiemblan cuando están cerca de la botella de cerveza, peor me niego a tomarla.

No voy a dejarme caer, mucho menos porque este dolido, molesto y furioso.

No lo haré.

—¿Noviazgo?

Abro la lata y lo llevo a mis labios, le ofrezco uno y ella niega con la cabeza.

—Esta tarde fui a verte.

No puedo creer que Ángel le enviara la invitación.

—Fuiste a verme..

Ella lo procesa.

—Ohh.. eso, ¿Nos viste?

—Si vi cómo le comías la boca a tu novio, si, si lo vi.

—No le comía la boca a nadie, Callum.

—¿Vas a negarme que lo estabas besando?

—No, peor no es cómo crees y no es mi novio.

—¿Cómo es entonces?

Ella suspira.

—Calvin no es mi novio, solo trabaja conmigo..

—¿Te acuestas con gente que trabajas?

—No sería la primera vez.

Silencio.

—Me estas confirmando que te acuestas con él.

—No, ya lo enredaste todo.

—No te entiendo, Lucy.

—Haber, solo cállate.—Me ordena, alzo una ceja.—Callte y déjame hablar.

Estoy deseando escucharlo.

—Sí, es verdad lo que viste, pero fue fuera de contexto.—Me explica.—Calvin me beso porque le gusto, peor no fue al revés.

—¿No lo besaste?

—Dios no, no me gusta, él lo sabe.—Me responde.—Sabe que estoy enamorada de alguien más.

Ella misma se da cuenta y mis ojos se abren, me acerco a ella.

—No, yo..

—¿Es eso cierto?

Sus ojos tiemblan.

—¿Estas enamorada de mí?

—Pero que egocéntrico eres.

Ahora quiere hacerme creer que no habla de mí.

—Callum...

—¿Aun tengo oportunidad?

Sus ojos no se apartan de los míos.

—Lucinda...

Quiero besarla.

Después arreglare cuentas con ese sujeto que la beso sin su consentimiento, pero ahora mismo quiero hacer eso, besar sus labios.

Voy a hacerlo y ella me pone los dedos en los labios.

—Callum.

—¿Qué pasa?.—Pregunto retirándome.

—No nos hemos visto en seis meses, creo que no deberíamos hacer esto de este modo.

—¿Entonces cómo..?

Ella baja la mano.

—Así..

—Lucinda..

—¿Quieres ir a una cita conmigo, Callum Creed?

Mis ojos se abren, ella me sonríe y me da fuerza.

Justo lo que necesito.

El corazón se me acelera.—Me encantaría ir a una cita contigo, Lucinda Torres.

Esta vez quiero hacer las cosas bien.

Hola..

Lucinda y Callum estan dispuestos a avanzar lento.

A paso tortuga como Abril y Sawyer xDD

Nos quedan nueve capítulos para acabar esta historia.

Nos leemos.

>>Yiemir.