[trece]

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*Si supieras*

El agarre de Johnny en mis caderas y su quijada sujeta en mi hombro mientras nos mecemos lentamente al compás de la tercera canción de Lewis es acogedor, su calor corporal abraza al mio de una forma bastante íntima, mientras observamos a sus padres bailar con las melodías tan románticas del invitado especial.

Ninguno de los dos dice nada, me sentía tan a gusto junto a el, que una pequeña parte de mi, sentia una pizca de pánico. Tenía que aceptar aquello que estaba rondando en mi cabeza, después de casi un mes de conocernos, era más que obvio que lo que sentía no era simplemente una jodida atracción carnal, y que, tenía que ser sincera con él.

Joder, que en un mes más me iba de viaje por tres meses, y estaba bien si él no me quería esperar.

Al fin y al cabo, solo estamos pasándolo bien uno junto al otro, solo éramos pasajeros.

Lewis termina de cantar y baja del escenario, dirigiéndose de inmediato hacía los anfitriones dándoles un gran abrazo. Cuando termina se acerca hacia nosotros, choca las manos con mi cita sin este soltarme y habla mirándome.

-Sería altanero decir que noté que eres mi fans.

-Sería altanero si eso fuera mentira, pero claramente no lo es, me gusta mucho tu música- respondo sonriendo, John aprieta el agarre en mis caderas y he comprendido, cree que estoy coqueteando.

-Cual es tu canción favorita de mi corta lista?

-Grace- él sonríe y va a hablar cuando Joe le llama del otro lado del salón, se disculpa y se acerca al chico.

La música cambia a ritmos latinos y decido tomar la mano de mi cita para dirigirnos a la pista de baile.

Sé que aquella canción de Daddy Yankee junto a Wisin & Yandel lleva poco tiempo en las radios, y en verdad poco me importa de lo que habla ya que, soy un poco nula en el español.

Mis caderas se mueven lentas y sensuales, siguiendo el ritmo, las manos de Johnny se encuentran en mis caderas, sus ojos sobre los míos, sintiéndome tan a gusto pero a la vez tan deseosa de él, pero joder, no quiero besarle frente a sus padres a pesar de que ellos saben lo que sea que ocurre entre nosotros.

No sé cuánto tiempo a pasado, no sé cuántos estilos de música distintos hemos bailado, en algún momento note como el chico rubio se arrancaba hacia un lado con Jennie y me encantó ver aquello, pero no deben haber sido más de 5 minutos que ellos se llevaron mi atención, porque claramente el tipo de uno noventa frente a mi a sido el centro de mi noche, a pesar de que se que ha pasado bastante tiempo desde que estamos danzando, ninguno de los dos parece rendirse al cansancio, es solo en el momento que sus labios se acercan a los míos y yo muerdo el inferior que algo en su mirada cambia.

Johnny toma mi mano y me pide que le acompañe, acepto sin preguntar nada, avanzamos por los pasillos del lugar arrendado, mis pies siguiendo las grandes zancadas de mi cita que aun así son lentas, mirando variadas veces hacia atrás para verificar que yo vaya bien.

Llegamos a una puerta, él mira hacia ambos lados y después abre la puerta invitándome a pasar, sus ojos transmiten una chispa de adrenalina y expectación que provoca las mismas sensaciones en mi.

Sin decir una palabra, me adentro en el lugar, el me sigue a una distancia normal, cierra la puerta y me pregunta si me molesta que ponga el seguro, niego con mi cabeza sin dejar escapar ningún sonido de mi garganta, hace lo que respondo y después se acerca a mi. Retrocedo hasta chocar con una mesa que es de las pocas cosas que hay en el salón en el que nos encontramos, solo hay un gran ventanal hacia el exterior que nos da la vista de una piscina -al parecer cerrada-, él sigue avanzando hasta tener de distancia no más de medio metro entre nuestros cuerpos.

Ambos nos miramos, ninguno dice nada, su mirada se pasea desde mis ojos a mis labios con alguna rápida mirada a mi cuerpo, mientras yo hago lo mismo. La tensión que tan común es entre nosotros desde hace un tiempo se puede palpar en el aire. No sé cuanto tiempo ha pasado, pero ninguno se mueve, ninguno dice nada, la música de la fiesta escuchándose a la distancia, casi pareciendo susurros imperceptibles en esta aura que hemos creado tan de nosotros dos.

Lentamente se acercó a mi en el momento que yo sujete mis manos a la mesa y me levanté para quedar sentada sobre la superficie helada, la distancia entre nosotros era solo el largo de mis muslos. En ese momento pensé en todas las probabilidades de lo que podría ocurrir aquí, en la infinidad de universos paralelos, todo dependiendo de la decisión que tomara.

Lentamente acomodo el vestido para que nada se viera mientras mis piernas se abrían. Él observa dicho movimiento con su labio entre sus dientes, para posterior en un rápido movimiento tomar mi nuca, acercarse a mi y darme un beso, beso el cual era agresivo, sus labios chocan con los míos, mis manos se dirigieron a su cuello y mis piernas se apretaron a sus muslos, baja sus manos y deja cada una de ellas en estos, solo quedando ahí, sin ningún movimiento, segundos después su lengua se pasea por mis labios pidiendo permiso para entrar, accediendo, abro mi boca, su lengua danzando con la mía a un ritmo desenfrenado, mis manos no perdiendo tiempo, escabulléndose en su pecho, tocando todo aquello que los botones no abrochados de la camisa me permitieron.

El primer gemido que salió de su garganta quedó atrapado entre mis labios, y me sentí tan poderosa con algo tan simple como un gemido que no dudé cuando mis manos se movieron a los botones abrochados y comencé a deshacer la acción, nos habíamos separado por unos segundos, sus ojos quemaban en los míos, estaba tan ensimismada en la acción que no noté cuando sus manos se escabulleron bajo la tela, creí que dicha acción me pondría incómoda, pero fue totalmente lo contrario, me sentí deseosa de más contacto, de querer sentir sus manos en todo mi cuerpo.

Ya tenía más de la mitad de los botones fuera, la vista era maravillosa, sus pectorales eran firmes, sus abdominales me saludaban y llamaban a acariciarles, le miré pidiendo permiso, el asintió y me permití explorar con mis manos su torso, el calor que desprendía era acogedor, mis palmas tocaban su piel, ese tono que me llamaba y deseaba hacer tantas cosas de no estar en un salón.

Cuando mi recorrido se detuvo, le observé, sus ojos estaban cerrados, sus labios separados. Segundos después, me observó con una sonrisa ladina para soltar un sutil "me toca".

Tome aire en mis pulmones, y sus manos lentamente comenzaron a ascender, se posaron en mis caderas apretando allí, como quien dice, tanteando terreno, pensé que quedaría allí, pero comenzó a avanzar más, sus manos se posaron en mi cintura y me atrajo a él, una dureza que sabía que era pero no conocía a la vista se presionó en mi abdomen, haciendonos soltar un gemido a ambos. Nos quedamos casi estáticos, sin ningún movimiento, solo mirándonos a los ojos, sin necesidad de exteriorizar las palabras no dichas.

En un pequeño lapsus de tiempo se acercó de nuevo a mi para besarme, pero esta vez más dulce que anteriormente, sus labios hicieron un camino a mi cuello, permitiéndole la acción, y sacándome uno que otro suspiro por la sensibilidad en dicha área, sus manos salieron de mi piel para posteriormente abrazarme, acercar sus labios al oído y hablar, dandome la jodida bienvenida a lo que ambos queríamos.

-Pasa esta noche conmigo. 

××

Insertar el meme de *se prendio esta mierda*

Ayyy joder, como me tenia este capitulo, me costo escribirlo porque sabía lo que queria plasmar pero no sabía como, y casi me explotó la cabeza.

Espero que les haya gustado.

Playlist en spotify: "LIPS | WATTPAD" o en mis historias destacadas de mi ig fanacc.

-Nini🐈‍⬛

ig fanacc: letterstonini_ ; ig personal: connienmy ; y también en tw: ninimny 

LIPS - [S. Johnny]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora