[XI] Es tan preciosa

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Law se había enamorado al final de Hinata y ella de el, pero ninguno sabía lo que el otro sentía pero esos sentimientos que cada uno sentía iban creciendo poco a poco a medida que pasaba el tiempo.

Me encontraba en el baño arreglando mi cabello, aún seguía en casa de law, el por su parte andaba recogiendo la habitación, había pasado unas semanas, pero en aquel momento comemce a ver todo borroso totalmente mareada, apoye mis manos en el lavabo y di una bocanada de aire mirando al espejo, me notaba cansada, pose mi mano en mi frente mirando si tenía subida la temperatura por si fuera fiebre o una bajada de tensión pero ninguna de esas cosas las confirme.

Al rato salí del baño con el pelo recogido en un moño y fui a ver a law, lo encontré aún en la habitación ordenando unos libros y pergaminos que andaban descolocados.

Hinata, me ayudas. -Sonrió law contento. -

¡Hai! -Exclame asintiendo con la cabeza y acercandome a el para ayudarlo. -

Cogí unos cuantos pergaminos pero perdí el equilibrio y me caí hacia adelante entre cerrando los ojos casi desmayada, law al instante soltó las cosas y me sujeto llamándome preocupado.

¡Hinata! ¡Hinata! -Exclamó law preocupado. -

No le respondía comenzaba a quedarme dormida, entonces me cogió en brazos y me poso en la cama, allí se quedó a mi lado hasta que desperté.

Law miraba el rostro de Hinata mientras dormía iba acariciando mi pelo con cariño hasta que abrí los ojos lentamente.

Law Kun, lo siento no me siento bien. -Dije levantándome un poco recostada. - tengo sueño..

No pasa nada, duerme si quieres. -Dijo depositando un pequeño beso en mi frente. -

Yo asenti y volví a cerrar los ojos quedando dormida, por una cuantas horas.

Al rato law me trajo una bandeja con la cena y la dejó a un lado para sentarse al otro extremo de la cama a lo indio esperando que despertara. Volví a despertarme encontrando la bandeja con la cena encima, mire por un momento la comida y sonríe para luego ver como law se había acercado al instante de haber dirigido la mirada hacia el.

¿Estas mejor? -pregunto posando el dorso de su mano en mi frente. -

Cogí su mano y la sujete al momento sonriendo.

Si me encuentro mejor. -Dije sonriendo sin soltar su mano. -

Te voy a traer una manta por si tienes frío. -Dijo levantándose de donde estaba. -

Law, no te preocupes, debería volver. -hable levantándome. -

Pero aún es temprano. -Se excusó poniendo cara triste. -

Lo se pero debo irme. -Avance hasta el abrazandolo para luego darle un pequeño beso en los labios. -

Al rato me volví a poner mi ropa y me despedí de law, cuando llegue a casa , hanabi me esperaba al lado de la puerta de mi habitación con una sonrisa feliz.

One Chan, por fin vuelves. -Decía corriendo hacia a mi y sujetandome por la manga del suéter. -

Si hanabi, hoy me quedaré contigo. -Dije abriendo la puerta de mi habitación pasando las dos juntas. -

El filo de la katana || Libro I ||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora